11/02/2022, 08:23
—Ay, Shiba-san, no tienes que ser tan amable . Pues... No lo sé. Quisiera más que me prestaran atención en el escenario. Además... Shiba-san... tambiénesbastanteguapa.
Shiba hizo una breve negación con la cabeza.
— Lo siento, Suzume-chan. No he entendido eso último. — le dio unos segundos a la cantante para contestarle antes de empezar de nuevo con su rollo, ignorando la ironía de que ella no entendiese cuando hablaban rápido. — Bueno, estoy bastante segura de que en el escenario, con un vestidito bonito y esa voz tan suave, tienes que ser una delicia para los ojos.
Ensanchó aún más su sonrisa imaginándoselo por un instante.
— Y no es amabilidad, ya sabes que no tengo mucho tacto. Es completamente sinceridad, digo lo que pienso y acabo pensando menos de lo que debería. — río por lo bajo — Digamos que los profesores de la academia estuvieron bastante aliviados de perderme de vista, o más bien, de oídas. Solía interrumpir constantemente para preguntar o para decir cualquier cosa.
Entonces paró para dar un trago de agua y se dio cuenta de que Saki también estaba allí y se dirigió a ella antes de beber.
— Ay, perdona Saki-san. No te estoy dejando hablar, si quieres interrumpir me en cualquier momento, adelante, no me ofendere. Cualquier cosa que quieras decir, adelante.
Entonces decidió tomarse un buen minuto para beber y así sus compañeras podrían expresarse libremente.
Shiba hizo una breve negación con la cabeza.
— Lo siento, Suzume-chan. No he entendido eso último. — le dio unos segundos a la cantante para contestarle antes de empezar de nuevo con su rollo, ignorando la ironía de que ella no entendiese cuando hablaban rápido. — Bueno, estoy bastante segura de que en el escenario, con un vestidito bonito y esa voz tan suave, tienes que ser una delicia para los ojos.
Ensanchó aún más su sonrisa imaginándoselo por un instante.
— Y no es amabilidad, ya sabes que no tengo mucho tacto. Es completamente sinceridad, digo lo que pienso y acabo pensando menos de lo que debería. — río por lo bajo — Digamos que los profesores de la academia estuvieron bastante aliviados de perderme de vista, o más bien, de oídas. Solía interrumpir constantemente para preguntar o para decir cualquier cosa.
Entonces paró para dar un trago de agua y se dio cuenta de que Saki también estaba allí y se dirigió a ella antes de beber.
— Ay, perdona Saki-san. No te estoy dejando hablar, si quieres interrumpir me en cualquier momento, adelante, no me ofendere. Cualquier cosa que quieras decir, adelante.
Entonces decidió tomarse un buen minuto para beber y así sus compañeras podrían expresarse libremente.