20/02/2022, 20:13
El joven Kiozan esperaba alguna reacción de alguien de la parte administrativa, pero un simple viejo le miró con cara apática, como si nada hubiera pasado. Cuando se dispuso a volver a repetir su petición, escuchó una voz tras de él. Kuuran Meme se postulaba para una misión, como él. Cuando se dispuso a entablar una conversación amigable con ella, el señor del mostrador, golpeó el mostrador muchísimo más fuerte que lo había hecho anteriormente el joven Yotsuki, cosa que hizo que girara la cabeza hacia él. Después de que lo alabara por su actitud, Kiozan pudo darse cuenta de que el mostrador había sufrido una pequeña grieta por culpa del golpe del viejo.
-Wow, viejo... Usted es poderoso...- Dijo asombrado el chico de cabellos violáceos. -Encantado de conocerle, señor Shiten. Está más fuerte que cien osos. ¿Que come usted? ¿Qué ejercicios hace para golpear tan fuerte? ¿Puede mostrarme su técnica más poderosa?-Una ristra encadenada de preguntas fueron lanzadas hacia el señor mayor, quien se giró para buscar misiones. Kiozan estaba lleno de energía y voluntad, por eso cuando le preguntó que misión quería hacer, el joven, con una amplia sonrisa, puso ambas manos sobre el mostrador, para impulsarse, saltar y ponerse de pie sobre aquel armatoste de madera. Una vez de pie en el mostrador, le señaló con sus dedo índice de la mano derecha y le gritó tan fuerte como pudo. -¡IAAAAAAAAAAAAAAARGH!-
-¡Démelas todas! ¡Soy su ninja de confianza! ¡Su shinobi leal que hará todo lo necesario para cumplir los objetivos!- Dijo, obviando totalmente a la otra shinobi que se encontraba a sus espaldas. Cuando se percató de ello, le miró de reojo y le dirigió unas palabras. -¿Verdad que te apuntas a todo, Meme?- Sin esperar una respuesta de la chica, volvió a mirar al viejo. -Usted diga, nosotros haremos. Simple como un muelle.-
-Wow, viejo... Usted es poderoso...- Dijo asombrado el chico de cabellos violáceos. -Encantado de conocerle, señor Shiten. Está más fuerte que cien osos. ¿Que come usted? ¿Qué ejercicios hace para golpear tan fuerte? ¿Puede mostrarme su técnica más poderosa?-Una ristra encadenada de preguntas fueron lanzadas hacia el señor mayor, quien se giró para buscar misiones. Kiozan estaba lleno de energía y voluntad, por eso cuando le preguntó que misión quería hacer, el joven, con una amplia sonrisa, puso ambas manos sobre el mostrador, para impulsarse, saltar y ponerse de pie sobre aquel armatoste de madera. Una vez de pie en el mostrador, le señaló con sus dedo índice de la mano derecha y le gritó tan fuerte como pudo. -¡IAAAAAAAAAAAAAAARGH!-
-¡Démelas todas! ¡Soy su ninja de confianza! ¡Su shinobi leal que hará todo lo necesario para cumplir los objetivos!- Dijo, obviando totalmente a la otra shinobi que se encontraba a sus espaldas. Cuando se percató de ello, le miró de reojo y le dirigió unas palabras. -¿Verdad que te apuntas a todo, Meme?- Sin esperar una respuesta de la chica, volvió a mirar al viejo. -Usted diga, nosotros haremos. Simple como un muelle.-