18/04/2022, 15:40
El jabalí fue golpeado, atizado, regolpeado y apalizado sin ningún tipo de piedad. Ni a los peores criminales se les daba tal tunda, pero Lyndis, Meme y Toshio no estaban jugando a ser la justicia, estaban jugando a ser los ejecutores. El gran animal soltó un terrible quejido desde lo más profundo de su alma, que se estaba yendo directa al cielo de los jabatos.
Tras la triste defunción del ser más grande del lugar, un tenso silencio volvió a envolverles. Esta vez siendo interrumpido ocasionalmente con los movimientos de patas de los mapaches restantes, huyendo y escondiendose como podían.
Tras la triste defunción del ser más grande del lugar, un tenso silencio volvió a envolverles. Esta vez siendo interrumpido ocasionalmente con los movimientos de patas de los mapaches restantes, huyendo y escondiendose como podían.