5/05/2022, 18:57
Tras asentir, la chica se recostó boca arriba en el césped, tal y como Hayato bien había hecho. Antes que nada, se quejó de que tenía hambre, y justo después vino la pregunta de Siete. La chica hasta pareció olvidar el cansancio, pero lo que seguro olvidó por el momento era el hambre. Con ímpetu y energías exclamó que porque el Uzukage molaba un montón. Tanto fue el afán, que hasta se reincorporó. Sentenció que la había encandilado con aquél discurso sobre la espada y el escudo. Muchos, pero muchos fueron convencidos por las palabras de éste carismático líder, eso no había quien lo negase. Y preguntó a Hayato si a él no le había parecido cool.
—Si... demasiado cool... —Sentenció el genin.
Pero ella no quería ser una espada. No, no señor. Ella lo que realmente deseaba era convertirse en el escudo del Uchiha, para proteger a quien les protegería. La verdad, en éstos días era realmente de las más nobles intenciones que podría haber escuchado. Pero éstos días, no eran días para héroes noveles. Quizás si llegaba a graduarse, en poco tiempo la llevaban al frente, y moría.
Éstos tiempos apestaban a muerte y Zorrón número 9, una asquerosa fragancia.
—Me parece un propósito genial —Respondió el Senju. —pero tómatelo con calma. No te lances demasiado pronto a las fauces del zorro...
Y eso que quizás él era de los menos indicados para hablar. Nadie iba a escapar de ésta guerra, pero si no entrenaba lo suficiente antes de graduarse, podían llevarla a una muerte prematura.
—Si... demasiado cool... —Sentenció el genin.
Pero ella no quería ser una espada. No, no señor. Ella lo que realmente deseaba era convertirse en el escudo del Uchiha, para proteger a quien les protegería. La verdad, en éstos días era realmente de las más nobles intenciones que podría haber escuchado. Pero éstos días, no eran días para héroes noveles. Quizás si llegaba a graduarse, en poco tiempo la llevaban al frente, y moría.
Éstos tiempos apestaban a muerte y Zorrón número 9, una asquerosa fragancia.
—Me parece un propósito genial —Respondió el Senju. —pero tómatelo con calma. No te lances demasiado pronto a las fauces del zorro...
Y eso que quizás él era de los menos indicados para hablar. Nadie iba a escapar de ésta guerra, pero si no entrenaba lo suficiente antes de graduarse, podían llevarla a una muerte prematura.