8/05/2022, 19:04
—¡Vamos, vamos! —canturreó Suzume en cuanto Saki se puso en marcha. Pasó un brazo por debajo del de Shiba, para llevarla de él, y a su vez se apresuró a pasar su otro brazo por debajo del de la morena, para que Saki le llevara.
Y así, caminando con una a la derecha y la otra a la izquierda, Suzume anduvo con suma felicidad de vuelta al hotel.
—Quisiera haber tenido más trucos bajo la manga, pero no he desarrollado mis habilidades mucho... Y creo que la usé demasiado pronto, ¿No crees, senpai? ¡Y los golpes de Shiba-san sí que duelen! Espero crecer para resistirlos con el tiempo.
Le guiñó un ojo y soltó una risita. Parecía estar pasando el mejor día de su vida.
Y así, caminando con una a la derecha y la otra a la izquierda, Suzume anduvo con suma felicidad de vuelta al hotel.
—Quisiera haber tenido más trucos bajo la manga, pero no he desarrollado mis habilidades mucho... Y creo que la usé demasiado pronto, ¿No crees, senpai? ¡Y los golpes de Shiba-san sí que duelen! Espero crecer para resistirlos con el tiempo.
Le guiñó un ojo y soltó una risita. Parecía estar pasando el mejor día de su vida.