27/11/2022, 01:43
Lo que Chika pensaba que no era más que frustración por la derrota pareció escalar de sobremanera. La peliazul decidió avanzar con sus hermanas sin demasiada intención de intervenir, normalmente no ayudaba con sus intervenciones. Hasta que Momo lanzó un puñetazo, uno bien lanzado que por poco alcanza a su hermano.
Intercedió de inmediato, no poniendose en medio ni alzando la voz. No necesitaba ser explosiva allí. Le puso una mano en el hombro a Momo para reconfortarla.
— Hey, Momo-chan. Calmate. Estoy segura de que no es que no confiase en que lo fueses a hacer, sino que no iba a dejarte caer aunque lo hubieses hecho. Es tu hermano, ¿no?
Habló en un tono suave y tranquilo, con la intención de desescalar eso lo más rápido posible. Y estaba segura de que Kazemaru no tenía malas intenciones, aunque era cierto que la subestimaban.
Intercedió de inmediato, no poniendose en medio ni alzando la voz. No necesitaba ser explosiva allí. Le puso una mano en el hombro a Momo para reconfortarla.
— Hey, Momo-chan. Calmate. Estoy segura de que no es que no confiase en que lo fueses a hacer, sino que no iba a dejarte caer aunque lo hubieses hecho. Es tu hermano, ¿no?
Habló en un tono suave y tranquilo, con la intención de desescalar eso lo más rápido posible. Y estaba segura de que Kazemaru no tenía malas intenciones, aunque era cierto que la subestimaban.