19/12/2022, 23:53
Los ojos de la morena se abrieron como platos, y alzó la cabeza casi de inmediato. Era como si hubiera visto un oasis de esperanza en un caluroso y desolador desierto; aunque más bien sería como ver unas fuentes termales en una desamparada tundra helada. Yuu se puso casi de inmediato, tomándola de la mano con sus dos manos.
— ¡S-Si, s-senpai! — su boca temblaba, y mantenía una expresión entre ilusión y tristeza muy extraña, apretando los labios y sus cejas mientras asintió una única vez.
Esperó a que Yuri volviera a dirigir la marcha, para seguirla a la misma velocidad que antes sí hacía falta, aunque eso suponer quedarse sin aliento y fuerzas por todo lo que quedaba de semana. Podía simplemente haber ido flotando transformando sus piernas en papeles de la misma forma que había hecho anteriormente, pero estaba tan alterada y aterrada por quedarse sola que aquello no era una opción que siquiera hubiera podido cruzar por su mente.
— ¡S-Si, s-senpai! — su boca temblaba, y mantenía una expresión entre ilusión y tristeza muy extraña, apretando los labios y sus cejas mientras asintió una única vez.
Esperó a que Yuri volviera a dirigir la marcha, para seguirla a la misma velocidad que antes sí hacía falta, aunque eso suponer quedarse sin aliento y fuerzas por todo lo que quedaba de semana. Podía simplemente haber ido flotando transformando sus piernas en papeles de la misma forma que había hecho anteriormente, pero estaba tan alterada y aterrada por quedarse sola que aquello no era una opción que siquiera hubiera podido cruzar por su mente.