6/01/2023, 01:24
Chika dio la última remada, consciente de que Mami quería algo de conversación pero al mismo tiempo no sabía qué decir que no arrancase de ella otro "Si tú lo dices" o "Callate, perra". Por suerte para su pobre cabecita, pronto dejó de pensar.
En cuanto vio a Mika, todo su cuerpo se puso en modo alarma. De repente, no existía Mami ni el bote ni el hospital, debía detener a Mika. Hizo un sello y saltó a toda velocidad para interceptarla. Si lo conseguía, ni siquiera diría una palabra ni actuaría violentamente, se quedaría mirandola con el ceño fruncido esperando una respuesta o una reacción.
En cuanto vio a Mika, todo su cuerpo se puso en modo alarma. De repente, no existía Mami ni el bote ni el hospital, debía detener a Mika. Hizo un sello y saltó a toda velocidad para interceptarla. Si lo conseguía, ni siquiera diría una palabra ni actuaría violentamente, se quedaría mirandola con el ceño fruncido esperando una respuesta o una reacción.