25/02/2016, 22:06
(Última modificación: 26/02/2016, 12:06 por Uzumaki Eri.)
–Diecisiete –
¡No era de extrañar su gran belleza, la llevaba años de ventaja! En verdad no, la joven de Taki, de nombre Noemi, no llevaba más experiencia, no, era algo único, era ella la que iluminaba el lugar donde pisaba, así que no podía competir con la rubia porque entonces, desde el primer momento, Eri hubiese perdido. Mostró una sonrisa amplia y contestó -¡Vaya, tienes que tener unas grandes dotes de shinobi! - Afirmó mientras daba pequeños saltitos a medida que se alejaban del lugar y se acercaban más a los dojos.
Cuando, de repente, la duda al parecer golpeó a la joven de ojos verdosos.
–Entonces… ¿Pasaste a la segunda ronda…? –
Sus mejillas se tiñeron de carmesí y sus manos viajaron hasta uno de los mechones de sus cabellos, jugando con ellos nerviosa mientras recordaba el cuerpo de Kazuma sobre el pilar, entonces una nube negra ensombreció los grandes ojos de la kunoichi de Uzushiogakure. -Sí... Estoy en la semifinal - Respondió con un tono de voz apagado.
Negó con la cabeza y volvió a instaurar su sonrisa para que, esta vez, no se fuera de nuevo. ¡Hay que crear una buena imagen si quieres hacer amigos! -Y... Dime, Noemi-neesan, ¿cuál es la razón por la que estás por aquí? ¿Vienes a entrenar o de turista? ¿O quieres apuntarte al torneo? No sé si puedes pero... ¡Seguro que hubieras podido vencer a la mayoría de los participantes! - musitó mientras afirmaba lentamente con la cabeza.
''No sé si le molestará la pregunta... Ay, no sé qué hacer...''
¡No era de extrañar su gran belleza, la llevaba años de ventaja! En verdad no, la joven de Taki, de nombre Noemi, no llevaba más experiencia, no, era algo único, era ella la que iluminaba el lugar donde pisaba, así que no podía competir con la rubia porque entonces, desde el primer momento, Eri hubiese perdido. Mostró una sonrisa amplia y contestó -¡Vaya, tienes que tener unas grandes dotes de shinobi! - Afirmó mientras daba pequeños saltitos a medida que se alejaban del lugar y se acercaban más a los dojos.
Cuando, de repente, la duda al parecer golpeó a la joven de ojos verdosos.
–Entonces… ¿Pasaste a la segunda ronda…? –
Sus mejillas se tiñeron de carmesí y sus manos viajaron hasta uno de los mechones de sus cabellos, jugando con ellos nerviosa mientras recordaba el cuerpo de Kazuma sobre el pilar, entonces una nube negra ensombreció los grandes ojos de la kunoichi de Uzushiogakure. -Sí... Estoy en la semifinal - Respondió con un tono de voz apagado.
Negó con la cabeza y volvió a instaurar su sonrisa para que, esta vez, no se fuera de nuevo. ¡Hay que crear una buena imagen si quieres hacer amigos! -Y... Dime, Noemi-neesan, ¿cuál es la razón por la que estás por aquí? ¿Vienes a entrenar o de turista? ¿O quieres apuntarte al torneo? No sé si puedes pero... ¡Seguro que hubieras podido vencer a la mayoría de los participantes! - musitó mientras afirmaba lentamente con la cabeza.
''No sé si le molestará la pregunta... Ay, no sé qué hacer...''