29/02/2016, 22:35
Intimidar había dado sus frutos pero no como ella quería, pretendía que Anzu se uniera a la pelea y en su lugar optó por quedarse apartada justo al lado del gordo genin de la nariz partida y luego claro, tenían que suplicar una vez más por piedad. ~ ¿Es en serio...? ~ Se cuestionaba la pelirroja que había decidido adoptar una postura algo más relajada cruzando levemente una pierna para apoyar apenas la punta del pie mientras dejaba que todo su peso cayera sobre su otra pierna que permanecía completamente extendida. - Como quieras. - Respondió a secas Ritsuko mientras frotaba levemente la válvula para quitar de allí unos pocos restos de lava.
Al final parecía ser que la tal Anzu no era tan parecida a Ritsuko, si bien ambas eran algo así como bichos raros, no compartían ese deseo de lastimar a la hora de pelear o castigar a alguien pero que va. ~ El Uchiha había dicho algo de una misión… Pero estaría fuera de la aldea… ~ Allí en silencio se mantenía Ritsuko hilando recuerdos mientras Takeshi levantaba su obeso trasero para emprender el escape probablemente en dirección al hospital.
La pelirroja luego de un buen rato decidió devolverse al interior del establecimiento donde se habían estado relajando ambas chicas. - Anzu… - Llamó en lo que cruzaba de nuevo la ventana, tenía ganas de volver a meterse a las aguas termales aunque sea por un rato pero… Tenía los pies hechos un desastre y la espalda también debido a la caída. - ¿Qué te parece ir a una misión de rango C conmigo y otro fulano? - Ahora si, había hecho su parte, si la morena aceptaba o no era cosa suya y no de Ritsuko.
~ Así al menos no podrá quejarse el Uchiha… ~ Refunfuñaba en su mente la chica que ya se había sentado a un lado del agua para sacar algo de agua a manotazos y limpiarse los pies al menos, luego se ocuparía de su espalda embarrada. - El otro es un Uchiha y ya sabes que puedo defenderme sola, creo yo que estaremos bien aún siendo genins. - Agregó en un intento por conseguir convencer a la rubia.
Al final parecía ser que la tal Anzu no era tan parecida a Ritsuko, si bien ambas eran algo así como bichos raros, no compartían ese deseo de lastimar a la hora de pelear o castigar a alguien pero que va. ~ El Uchiha había dicho algo de una misión… Pero estaría fuera de la aldea… ~ Allí en silencio se mantenía Ritsuko hilando recuerdos mientras Takeshi levantaba su obeso trasero para emprender el escape probablemente en dirección al hospital.
La pelirroja luego de un buen rato decidió devolverse al interior del establecimiento donde se habían estado relajando ambas chicas. - Anzu… - Llamó en lo que cruzaba de nuevo la ventana, tenía ganas de volver a meterse a las aguas termales aunque sea por un rato pero… Tenía los pies hechos un desastre y la espalda también debido a la caída. - ¿Qué te parece ir a una misión de rango C conmigo y otro fulano? - Ahora si, había hecho su parte, si la morena aceptaba o no era cosa suya y no de Ritsuko.
~ Así al menos no podrá quejarse el Uchiha… ~ Refunfuñaba en su mente la chica que ya se había sentado a un lado del agua para sacar algo de agua a manotazos y limpiarse los pies al menos, luego se ocuparía de su espalda embarrada. - El otro es un Uchiha y ya sabes que puedo defenderme sola, creo yo que estaremos bien aún siendo genins. - Agregó en un intento por conseguir convencer a la rubia.