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(D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 27/05/2021
La lluvia era, como todos los días, fría e inclemente. Pero esto era un buen clima para todos en la villa, porque, vaya, raramente tenían otro. Y si lo tenían, por lo general la cosa no acababa bien.
Esto nos llevaba a las calles de la aldea donde se escuchaban unos pasos entre los charcos... O no. La palabra más adecuada serían pisadas, pisadas de cuatro patas pequeñas que se dirigían a una casa cualquiera, pero el motivo no era tan sencillo como este. Se trataba de la casa de la joven Nara Jun que aún no había sado sus primeros pasos como shinobi, pero estaba por empezar en este camino.
Se escuchó el sonido de algo o alguien llamando a la puerta: Tres golpes sonoros que parecían haber sido dados por algo muy pequeño.
Quién quiera que se asomara a abrir y recibir al extraño se encontraría con una imagen curiosa: Un enorme doberman sentado frente a la puerta, y que pese a estar en esa posición era tan grande que su mirada aún podía hallarse frente a frente con la de una persona adulta. El animal portaba una bandana de Amegakure en el cuello, y un pergamino en la boca. Ciertamente, tenía un rostro impaciente mientras esperaba una respuesta.
RE: (D) Una carta para nadie - Nara Jun - 27/05/2021
Y una estela de rayos dibujaba el recorrido de ambas katanas. Iban y venían. Chocaban entre sí, buscando esa apertura, buscando el hueco, también intentando desgastar al otro hasta que uno de los dos ceda. Sin duda, era una pelea épica con una historia y trasfondo que le daba un toque interesante al enfrentamiento. Digna de final de anime ¿O manga? El medio por el que se mostraría esa historia daba igual, lo importante era que ese duelo estaba muy reñido y había mucho en juego. Entre las dos figuras, una se dejaba ver que era un humano a simple vista. Por el otro lado, a pesar de ser un bípedo y tener apariencia de persona, se notaba que sus técnicas y su capacidad física no parecían ser de este mundo. Este último, este ser infernal, en un movimiento demasiado rápido, logró desenvainar a su rival. Luego lo pateó y lo tiró al suelo, a la fría tierra que ya había sido pisada tanto en ese combate que casi parecía barro. Aquel demonio apuntó su katana al, en un principio, débil humano. Todo parecía llegar a su fin, parecía que no había más escapatoria. Estaba totalmente agotado y vencido por la situación, nada podía salvarlo.... hasta que el enfoque recae en sus ojos y algo parecía brillar en su mirada...
—¡JUN!
La chica, completamente ensimismada, se exaltó inmediatamente y pegó un pequeño brinco, incluso estando recostada en su propia cama, al escuchar el grito de su hermano.
—¡Tocaron la puerta. Ve a abrir que me estoy bañando!
Se levantó de su cama, no sin antes dejar el manga en su mesita de luz y pegar un bufido por la abrupta interrupción que acababa de sufrir.
—A veces eres muy molesto, espero que lo sepas Hinata. — soltó cuando pasó por el pasillo cerca del baño donde su hermano se estaba duchando. Solo estaba haciendo eso el pobre chico, ducharse. No tenía culpa de mucho en esa situación.
Con la peor mala gana que podía haber en el ser de la Nara, caminaba rápido y sin detenimientos hacia la puerta de su casa. Quería cuanto antes atender a la persona que este fuera para volver a terminar lo que le quedaba a la historia que leía. Bueno, ella pensó que afuera sí iba a haber una persona.
Más temprano que tarde, Jun estaría frente a su puerta, con una camiseta negra que le quedaba muy grande y unos pantalones largos, estos tapaban un poco sus pies descalzos. Abrió la puerta de golpe.
—Buenas buenas ¿A quien bus-
Cuando se quiso dar cuenta, estaba hablando con un perro gigante. Bueno, gigante para los estándares que tenía ella de altura de un perro. Quizás ese tamaño era lo común para otras personas, ya ella no sabía que pensar. Con su vista notó rápidamente que tenía una bandana de la aldea y tenía un pergamino en la boca, entendía por lo menos que era un perro ninja. A pesar de eso, miró para ambos lados para saber si había personas cerca.
—¿Hay alguien aquí? — si en esas ida y vueltas con la mirada para sus costados no encontraba a nadie, decidiría acercarse al perro. —¿Para quien de todos los que vivimos aquí será esto? — soltó en voz baja y acercando su mano, con un poco de timidez, hacia el pergamino que sostenía el gran perro.
RE: (D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 27/05/2021
El perro pareció fruncir el ceño mientras la chica buscaba y hablaba como si él no fuera más que un simple animal, como si no pudiera considerar que él estaba a la actitud de su intelecto. Ciertamente en un gesto mucho más humano que animal. Antes de que ella pudiera tomar el escrito, sacudió el hocico lanzando el pergamino al aire por encima de la cabeza de la chica, ya sí ella lo lograba atrapar no era su asunto.
—¿¡ESTOY PINTADO O QUÉ!? — Ladró el perro con una voz ronca. —Estos cachorros de hoy en día — Procedió a ponerse a cuatro patas y mirar fijamente a la chica. —No sé porqué creo que eres a quién estoy buscando... Vine a dejar eso para Nara Jun, aunque por tus reacciones lentas, creo que tienes todo lo que encaja en la descripción de novata recién salida de la academia— Se ufanó el animal mientras acercaba su nariz hasta la cara de la kunoichi.
Si la chica leía el contenido, encontraría sus respuestas.
El perro parecía entre tanto, lucir muy impaciente. Parecía pese a todo estar furioso por ser ignorado.
RE: (D) Una carta para nadie - Nara Jun - 27/05/2021
Solo unos centímetros separaban su mano del pergamino, hasta que lo más inesperado ocurrió. Y no solo era el perro que revoleó el pergamino.
—¿¡ESTOY PINTADO O QUÉ!?
Se sobresaltó y pegó un brinco para atrás al escuchar tan fuerte al animal. A todo esto, el pergamino que tiro por el aire, chocó con la cabeza de la Nara.
—Estos cachorros de hoy en día. No sé porqué creo que eres a quién estoy buscando... Vine a dejar eso para Nara Jun, aunque por tus reacciones lentas, creo que tienes todo lo que encaja en la descripción de novata recién salida de la academia.
—¡AHH! — bufó algo fuerte, liberando un poco la tensión que tenía por la sorpresa que se acababa de llevar. —¿Por qué todo lo raro me pasa a mi? — susurró para ella misma mientras sobaba su cabeza por el golpe del pergamino.
Posteriori, soltó un suspiro y se agachó para tomar el mensaje que le habían dado. Abrió el pergamino y se quedó unos segundos leyendo.
—Se me hace... algo curioso. — cuanto menos lo era, aunque por lo menos era algo bastante simple. —Voy a entrar a cambiarme y ya partiré ¿Hay algo más que deba saber? — aun con el pergamino abierto, mirando con detenimiento la foto del ex jōnin para tenerlo bien reconocido.
RE: (D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 27/05/2021
El perro pareció sentarse de nuevo al notar tan alterada a la muchacha. ¿Por qué siempre terminaba asustando a todos? ¿Era por ser un doberman? ¿Si fuera un collie sería más popular entre los genin novatos? Como fuese, suspiró.
—Oye, puedo seguir oyéndote, que tenemos el oído más agudo que los humanos — Empezó a rascarse la oreja con la pata trasera. —No deberías llamarme raro si tú pareces más delincuente que shinobi con ese peinado — Le vio de reojo mientras ella leía el escrito.
No comentó nada al respecto y ya estaba dispuesto a pararse e irse tras haber cumplido su labor de entregar el escrito. Estaba por irse, hasta que la chica preguntó por información extra. El canino volteó a verla y resoplí.
—Lo que tienes que saber es que el tipo ESTÁ LOCO. No del tipo peligroso, por suerte. No es que tenga un tornillo flojo, sino que directamente se le ha caído. Y diría que varios, eh. — Hizo una mueca de sonrisa. —Desvaría un poco el tipo, pero nada fuera del otro mundo. Igual dice tonteras —. Empezó a caminar bajo la lluvia. —Como sea, ya hice mi trabajo. El resto depende de ti —. Fue lo único que dijo, antes de echarse a correr a toda velocidad por la calle.
RE: (D) Una carta para nadie - Nara Jun - 27/05/2021
Resopló para arriba y apartó un poco la mirada del pergamino para ver al can. Ella estaba sonriendo, le había divertido un poco lo que dijo el perruno.
—Quizás yo misma busco las cosas raras.
Terminó por cerrar el pergamino y se quedó escuchando la información que podía portar el animal.
—Un loco. Genial, bastante habitual. — al partir el doberman, corriendo a una velocidad considerable por las calles. —¡Mucha suerte! — dijo fuerte, sin importarle mucho si el perro lo había escuchado o no.
Cerró la puerta y se metió en su casa, yendo directo a su habitación para ponerse ropa más cómoda. En el pasillo, Hinata salía de su cuarto, estaba recién cambiado y con una toalla secándose el pelo.
—¿Quién era?
—Un perro. Me tengo que ir, quedas solo en casa. Espero que no te estés duchando si tocan la puerta de nuevo.
El chico quedó atónito y no pudo ni mediar palabra, Jun ya se había metido en su habitación para cambiarse. Se puso otra camiseta, esta vez de su talle, una sudadera morada, unos pantalones holgados de color negro y sus botas ninjas del mismo color. No podía faltar su bandana en su cuello, su portaobjetos con los pocos objetos que suele guardar ahí y su kodachi colgando de la cintura. Siempre tenía que estar preparada para todo, aunque sea una misión bastante simple.
—No puedo decir que me pasan cosas raras y tengo que buscar a un loco por ahí.
Salió de su casa, ya preparada y lista para partir. Si nada se lo impedía, comenzaría caminar por las calles de la aldea, teniendo como destino el Distrito Comercial, el último lugar donde lo habían visto.
RE: (D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 29/05/2021
Al llegar al distrito comercial, vería todo de forma "normal". Algarabía, gente promocionando sus productos, lugares de ocio, centros comerciales más o menos grandes, e incluso restaurantes y demás. Luces neón adornando letreros de negocios eran el pan de cada día en ese sitio pese a la lluvia perpetua. ¿Por dónde podría esconderse el mencionado loco?
Ciertamente no parecía ser el sitio donde un vago pudiese estar. A la vista, quién estaba por ahí era porque tenía dinero, pero recordemos que lo obvio no puede ser tan obvio. Por dónde o con quién empezar a buscar, era decisión de la Nara.
Estaba muy ajetreado, siendo que si ella se detenía mucho en un lugar no tardaría en ser empujada en el hombro por alguien que llevase mucho más prisa que ella.
RE: (D) Una carta para nadie - Nara Jun - 29/05/2021
El distrito comercial estaba como todos los días. Mucha gente, luces de neón por todos lados, negocios de todo tipo y para todos los gustos, y un gran etcétera . Justamente no estaba allí para disfrutar de todo lo que ofrecía ese lugar tan insignia de Amegakure. De hecho, todo lo contrario.
Lo primero que se le pasó por la cabeza era preguntarle a alguien sobre la persona en cuestión. Aunque, al parecer, no era el lugar más óptimo para pararse a charlar con otra persona. No solo era eso, también entraba en juego que quizás esas personas no habían visto al ex shinobi, ya que solo podían estar de paso ese día por allí y no eran tan habitúes del distrito. Lo más lógico, o por lo menos lo que le parecía lógico en su cabeza, era preguntar en algún negocio que estaba instalado en el lugar. Si el tipo había pasado cerca de alguno de los negocios, los que trabajan en estos lo tuvieron que haber visto ¿O no?
Su caminata se vio interrumpida al ver un restaurante que se encontraba por esos lares. Todavía lo pensaba más y le sonaba aún más lógico que haya pasado por algún restaurante a mendigas algo de comida, si es que el hombre se encontraba en situación de calle. Quizás le había dado muchas vueltas al asunto y ya era hora de tomar acción. Así que iría a cruzar aquella puerta del restaurante a preguntarle a alguien del personal si habían visto al susodicho. El punto a favor que tenía es que contaba con una foto del señor y podría mostrársela a las personas para ver si estos podían reconocerlo.
RE: (D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 3/06/2021
El restaurante al que entró se encontraba atiborrado de personas, y eso que aún no era hora de la cena. Las mesas estaban rodeadas de sillones acojinados y sus empleados vestían un curioso uniforme donde destacaban los patines deportivos. Si bien podían desplazarse rápidamente dentro del local, parecía una completa locura ir deslizándose con una charola por ahí llena de comida y bebida, pero de alguna manera se las arreglaban para no tropezar y llevar los pedidos a sus clientes sin que esto terminara en un terrible accidente culinario.
Era enorme, y no parecían prestarle atención a la chica recién llegada, hasta que una de las empleadas se acercó con presteza a la recién llegada con libreta en mano.
—¡Bienvenida! ¿Has venido sola o esperas más personas? De ser así te podremos asignar el tamaño de la mesa, ya que ahora mismo estamos un poco saturados. ¿Deseas una bebida para la espera? — Dijo con una sonrisa en su intento de cumplir al pie de la letra con su trabajo de servicio al cliente.
RE: (D) Una carta para nadie - Nara Jun - 4/06/2021
Sin siquiera saber donde estaba entrando, la sorprendió mucho el tamaño del recinto y la peculiar forma en la que los empleados trasportaban los pedidos. Sin duda, no había visto nada así en su vida y sentía un leve temor a seguir introduciéndose al restaurante y chocar con alguno de los patinadores. Parecían ser bastantes buenos para hacer eso sin llegar a generar un desastre, pero de todos modos prefirió respetar el riesgo que significaba meterse en medio del camino.
Finalmente, una de las chicas que trabajaba allí la pudo atender.
—¡Buenas! ¿Qué tal? — al igual que la otra, la kunoichi se intentó mostrar cordial con una sonrisa. —Me encantaría tomar algo pero ando con prisa. Necesito preguntarte algo.
Con la diestra sacó el pergamino y tomó la foto que había dentro. Dejó su mano firme, sosteniendo la foto y mostrándosela a la mesera del restaurante.
—Me gustaría saber si vio a este hombre cerca de aquí. O por lo menos si conoce a alguien que pueda saber donde puedo encontrarlo. — recordando algo importante, hizo un chasquido con la zurda. —¡Ah! Casi lo olvido. Él no está como en la foto, se supone que está vagando por el distrito. Pareciera que está en situación de calle.
RE: (D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 7/06/2021
La empleada pareció quedarse sorprendida ante la petición de la chica púes su habitual cliente resultó ser en realidad un shinobi de servicio. Su actuación habitual se había desperdiciado. Y bueno, la chica lo mínimo que podía hacer era colaborar en el caso, pero por más que intentaba reconocer a la persona en la fotografía, el rostro simplemente le era totalmente ajeno.
—La verdad mi turno termina en las tardes, así que no me mantengo mucho por aquí... ¡Pero puedes preguntar atrás en la cocina! Eso sí, han de estar un tanto ocupados ahora... ve por la puerta trasera, que no sería adecuado que vieran a un shinobi entrar a la cocina desde el acceso principal. Quién sabe que diría la gente, pero ya sabes que inventan cosas aunque no sea nada malo — Se giró sobre sus patines. —Los cocineros suelen sacar la basura todos los días, así que quizá ellos sepan algo — Empezó a deslizarse en cuanto otro cliente se asomó a la puerta. —¡Disculpa debo proseguir con mi trabajo! — Diría con una sonrisa.
Jun vería a la chica alejarse con presteza para atender a los recién llegados.
RE: (D) Una carta para nadie - Nara Jun - 7/06/2021
Lentamente fue alejando y guardando la fotografía al ver la reacción de la chica, no parecía que haya visto al hombre bajo ningún concepto. Lo bueno, por lo menos, es que si parecía que podía haber alguien en el restaurante que sepa algo sobre el vagabundo.
—Si, entiendo. No quiero que se malentienda nada, así que iré por detrás sin problemas. Muchas gracias por la ayuda, suerte con todo. — le dedicó otra sonrisa, también en un intento de seguir mostrándose cordial, y se dio media vuelta.
La empleada, ni bien pudo, se giró sobre sus patines y fue directo a atender nuevos clientes. Todavía le seguía sorprendiendo la forma en la que se movían todos ahí, se le hacía hasta hipnotizante en un momento. Pero no podía perder mucho tiempo allí, tenía que conseguir rápido la información y zanjar con el asunto lo antes posible. Así que ni bien pudo, salió por la puerta principal del negocio sin más, teniendo cuidado por si había gente que tenía que entrar.
Tal como indico la mesera, se fue derecho a la parte trasera del restaurante, buscando la dichosa puerta. Si la encontraría, ¿qué debía hacer? ¿abrirla o tocar? Ella supuso que si la empleada le dijo que entrase por allí, no habría ningún problema que entrase sin más. Según la chica, los cocineros iban a estar ocupado en ese momento, por lo que ella quería entrar lo más rápido posible y soltar su duda, sin sacarle mucho de su preciado tiempo a los trabajadores del lugar.
RE: (D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 10/06/2021
Al abrir la puerta trasera de la cocina, el aroma de los platillos inundó sus fosas nasales con una fugaz calidez. Había varias estufas, planchas y personas en sus labores. Unos cortaban, otros picaban, otros salteaban, otros daban retoques, y otros llevaban los platillos hacia el interior del restaurante. Todo se estaba estaba desarrollando con una increíble velocidad y precisión de quienes llevan años practicando su oficio.
De hecho, ninguno de los ahí presentes pareció notar la presencia de la chica pues el sonido de los sartenes y demás utensilios de cocina chocando sumado al de cosas friéndose era tan fuerte como para opacar totalmente el rechinido de la puerta. Literalmente era la hora pico y ninguno prestó realmente atención a la recién llegada.
Un hombre en especial, quién parecía el chef principal, se la pasaba dando órdenes a los demás con bastante fuerza.
RE: (D) Una carta para nadie - Nara Jun - 10/06/2021
Inmediatamente el olor que emanaban las preparaciones entraba por su nariz. Olor que iba a causarle una leve sensación de hambre, pero nada que la haga detenerse en el labor que estaba intentando llevar. Evidentemente, nadie se había dado cuenta de su llegada, por lo que si llegaba a tocar la puerta seguramente nadie iba a darse por enterado. Suerte por ella.
—Ejem.
Si ni siquiera se habían dado cuenta de su presencia, era obvio que era por la cantidad de sonidos que provenían de ahí. Entre la cocción de los platillos y sonidos de los utensilios, además de un tipo que hablaba a viva voz con todos, iba a tener que hacerse notar de alguna u otra forma en ese lugar. Solo dio unos pasos para adelante y fue sacando la tan útil fotografía.
—¡HEEEEY! — gritó fuerte, cosa que todos los que estén ahí se den por aludidos.
Si los cocineros la veían, iba a estar sonriendo de lado, mostrando un poco los dientes y sosteniendo la foto del ex shinobi con la diestra.
—¿Alguien me puede ayudar un segundo? Necesito encontrar a este hombre y se dice que pudo haber pasado cerca de estas calles.
Si con suerte nadie se enojaba y brindaban la ayuda que estaba pidiendo, ya iba a poder trabajar con un poco de información sobre el paradero del destinatario.
RE: (D) Una carta para nadie - Akamatsu Nao - 19/06/2021
Hubo un momento dónde todo se detuvo ante la voz de la chica. Los trabajadores reaccionaron moviendo sus cuellos de forma robótica al unísono atraídos por el grito de la kunoichi y se le quedaron viendo estáticos como estatuas. Aquellos que estaban removiendo cosas calientes en la estufa eran los únicos que continuaban moviendo sus brazos pero sin apartar sus ojos de la recién llegada.
Todos parecieron escucharla, pero más pronto que tarde se voltearon de nuevo para continuar sus labores con la misma precisión que al inicio. Parecieron ignorarla, hasta que el chef principal se acomodó su sombrero y caminó hasta ella con los puños apretados y pasos fuertes. Ciertamente estaba muy incómodo con la interrupción.
—¿¡Cómo entraste aquí!? — Bufó y movió el bigote, para luego arrebatarle la foto de la mano a la jovencita.
El sujeto la observó detenidamente.
—Por aquí no suelen haber vagos. Justamente nos encargamos de que no mendiguen para no dañar el prestigio del restaurante. Aunque los de la zona del mercado que venden alimentos frescos puedan decirte algo. Les solemos comprar los ingredientes, quizá ellos sepa. Ahora debo volver al trabajo, que es hora pico — se dió vuelta sin más.