Campos festivos - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: País de la Espiral (https://ninjaworld.es/foro-pais-de-la-espiral) +--- Foro: Bosque de la Hoja (https://ninjaworld.es/foro-bosque-de-la-hoja) +---- Foro: Minori (https://ninjaworld.es/foro-minori) +---- Tema: Campos festivos (/tema-campos-festivos) |
RE: Campos festivos - Hazegawa - 20/08/2017 —Soy de Amegakure— Busco en su bolso por un momento y saco la bandana, colocándosela al hombro como solía llevarla siempre, esbozo una amplia sonrisa al decir aquello que simplemente le causaba cierto orgullo. —Es la primera vez que interactuó con un Shinobi de otra aldea, no suelo salir mucho de la aldea…— Se rasco la nuca, y esbozo una sonrisa leve, memorizando lo que le habría dicho el peliblanco. — Entonces la fortaleza del Clan Senju, se encuentra ahí adelante. — Dijo tratando de visualizar el sitio. —Esto es emocionante…quizás aprenda algo de vosotros, uno nunca sabe. — Acoto sonriente, y se giro ante el sonido de una lata que cayó al suelo, frunció un poco el ceño pero no le dio mucha importancia, su mirada recayó en el peliblanco RE: Campos festivos - Riko - 20/08/2017 Para sorpresa del uzunés, Hazegawa resultaba ser habitante de Amegakure no Sato, y no solo eso, si no que, encima, era un shinobi, al igual que él, quizás por eso se había interesado en la fuerza que tenía el Senju, quizás quería comprobarla o simplemente buscara sacarle información, menos mal que no había contado nada. — Entonces la fortaleza del Clan Senju, se encuentra ahí adelante. El peliblanco sonrió, aquel muchacho parecía bastante curioso. — No creo que sea la fortaleza del clan, de hecho diría que hay más por ahí, no solo en Uzushiogakure. — Explicó Riko. — Siempre se puede aprender algo, de cualquiera. — Recapacitó el peliblanco, dando a entender que cualquiera podía ser un buen rival sin importar de donde viniera. — Mira, ya no queda mucho para llegar, es un par de calles más para allá y llegamos. RE: Campos festivos - Hazegawa - 20/08/2017 —Tienes razón. — Acoto al finalizar el peliblanco de decir sus palabras, estaba emocionado y la curiosidad le podía bastante. —Si alguna vez te pasas por Ame, estoy a la orden. —Soltó una leve risilla, cuando se escucharon pasos en los tejados de las casas, justo entre las intersecciones una persona con un atuendo de color violeta saltaba entre los tejados, ambos Shinobi habrían visualizado su sombra al pasar por encima de sus cabezas, era un varón con la cabeza rapada. — ¿Eso es normal por aquí no? — Expreso el Ojiblanco al ver la sombra pasarle por encima, frunció el ceño un poco, pero volvió al asunto rápidamente sin darle mucha importancia. Acto seguido unos segundos más tarde dos personas más con el mismo proceder, pasaron por encima de los tejados, con una pinta más o menos parecida, solo que estos tenían cabello sobre sus cabezas, algo de polvo cayo de los tejados cuando pasaron, algunas personas en las calles observaron los movimientos fugases pero no les prestaron mucha atención. RE: Campos festivos - Riko - 21/08/2017 —Si alguna vez te pasas por Ame, estoy a la orden. El peliblanco sonrió, no creía que el joven Hyuga hubiera dicho aquello de verdad, todos sabían que entrar en una villa que no es la tuya no era la mejor de las ideas, por lo que dudaba mucho que en algún momento se pasara por Amegakure. — No creo que... — Pero un sonido le interrumpió, un hombre calvo corría por encima de los tejados, saltando de uno a otro con gran agilidad, y ambos genin se quedaron un momento parados antes de reemprender su marcha. No pasaron apenas unos segundos cuando, dos hombres más, con la misma pinta que el primero, pasaron por encima de sus cabezas persiguiendo al calvo y aquello terminó por no convencer al de Uzushiogakure que, con el gesto levemente torcido, miró a su acompañante. — Quizá deberíamos seguirles, a ver qué pasa. — Sugirió Riko. RE: Campos festivos - Hazegawa - 22/08/2017 — ¡Hagámoslo!...Pero a lo seguro, los seguiremos en la calle…de otra forma nos verían, yo te guiare. — Dijo enérgico el Hyuuga, esbozando una sonrisa echándose a correr en la misma dirección que los sujetos solo que en vez de ir a por los tejados, iría a ras del suelo. Sin necesidad de aplicar sellos activo su Dōjutsu, acto seguido las venas que rodeaban sus ojos se hincharon de sobremanera, otorgándole una visión superior sobre el entorno que a la par con su carrera le permitía ver al último sujeto que saltaba por los tejados. Al recién comenzar la carrera tras el pelonchas un par de shurikens cayeron de lo alto, además de un par de Kunais que estaban clavados en las paredes de madera de las casillas del vecindario, no estando muy lejos de la residencia senju todo fue acompañado del terrible sonido del combate, del metal chocar entre sí. Mientras el par de gennins los seguían al cruzar la segunda calle uno de los sujetos vestidos de violeta, cayó sobre un carro de posta de algún animal del campo, reduciendo la persecución en los tejados a solo dos. RE: Campos festivos - Riko - 22/08/2017 — ¡Hagámoslo!...Pero a lo seguro, los seguiremos en la calle…de otra forma nos verían, yo te guiare. El Hyuga parecía plenamente seguro de ser capaz de seguir a los hombres sin necesidad de subir a los tejados, por lo que no les verían, pero claro, ellos tampoco verían a los hombres de violeta, pero aún así Riko se fió y salió corriendo tras su compañero, alcanzándolo rápidamente y viendo como sus ojos habían cambiado, unas venas estaban profundamente marcadas alrededor de éstos. «¿Qué será eso?» Mientras avanzaban fueron capaces de escuchar lo que parecía una pelea, escuchaban sonidos de metal chocando, incluso les llegaron a caer un par de shurikens desde lo alto del tejado, por lo que siguieron corriendo, aunque no se fueran a meter en la pelea, por lo menos podrían proteger si alguien se veía involucrado por casualidad. De repente, del cielo cayó uno de los hombres, abatido, y el Senju quería saber qué estaba pasando, dado que no podía ver nada. — ¿Ves algo? ¿Qué esta pasando ahí arriba, Hazegawa? RE: Campos festivos - Hazegawa - 23/08/2017 — ¡Tu Traición es imperdonable!... te sentenciamos a morir. — Acompañado de una risotada bastante mal hecha, parecida al llanto de una Hiena el ahora contrincante del pelonchas sacaba de su guarda objetos una especie de explosivo, que lanzo hacia su contrincante seguido de un Kunai, su objetivo era que el mismo impactara en el explosivo para detonarlo. — ¡Tsk…estás loco! — Fue lo que alcanzo a decir el pelonchas antes de que se detonara el explosivo gracias al Kunai, alcanzo a cruzar sus brazos en un intento por protegerse de la explosión. — ¡Esto no pinta bien...a un lado! — Alcanzo a decir el Ojiblanco lanzándose al suelo, llevándose consigo a su compañero peliplateado segundos antes de que la mitad del techo de la vivienda donde hace momentos el par de Shinobi se encontraban batallando. Más de la mitad del techo se había ido con la explosión y el resto había caído sobre la vivienda, las llamas habían comenzado a consumir el hogar gracias a los restos con llamas que habían caído dentro de la misma, del interior un par de mujeres alcanzaron a salir después el estruendo de la explosión, pero en su rostro no había más que terror. — ¡Mis pequeños están adentro, por favor ayudadme! — Dijo la mujer mayor cuyo rostro mostraba la desesperación en estado puro, pero le era imposible remover una pesada parte del techo que no le permitía acceder a la vivienda nuevamente, el humo comenzaba a ser notable desde ese punto. Haze a pesar de haber estado en el suelo se había movido unos milímetros debido a la explosión, observo impotente como el causante de la explosión se marchaba fugazmente entre los tejados, pero también mediante su Dōjutsu vio al par de pequeños en el interior de la vivienda, tenia frente a si una decisión importante, ir tras el causante de todo esto o tratar de ayudar a los pequeños en la vivienda. «"Que debo hacer…"» Sus manos temblaban levemente, nunca antes estado en una situación de tal calibre donde vidas dependían de sus actos. RE: Campos festivos - Riko - 23/08/2017 Riko oía hablar a los hombres que estaban recorriendo los tejados de las casas, combatiendo entre ellos pero no conseguía entender nada, al menos hasta que su acompañante se lanzó al suelo, llevándose al peliblanco con él. — ¡Esto no pinta bien...a un lado! El Senju yacía tirado en el suelo mientras gran parte del tejado salía por lo aires como si tal cosa, y aquellos dos hombres estaban luchando sin importarles lo que pudieran hacer al resto y eso era un gesto despreciable, estaban poniendo en peligro vidas inocentes y Riko, en cuanto se puso de pie se dispuso a subir al tejado a frenar aquella locura pero... — ¡Mis pequeños están adentro, por favor ayudadme! El uzunés entonces cambió completamente de objetivo, en ese momento lo único que tenía en mente era rescatar a los niños que se encontraran dentro del edificio. — ¡¿Puedes verlos?! ¡Dime dónde están! — Le gritó el peliblanco a Hazegawa que parecía que se había quedado paralizado y sin esperar respuesta salió disparado hacia el interior, esperando que el amenio le gritase la ubicación de los pequeños, si no, lo tendría que averiguar por sí mismo. RE: Campos festivos - Hazegawa - 23/08/2017 « ¡Debo hacer algo! » Aquel pensamiento estallo en su mente como un rugido, la voz del peliplateado fue el segundo estruendo que alcanzo a escuchar, diviso rápidamente a los críos que estaban en la cocina arrinconados mientras se abrazaban entre si, en medio del pánico y temor que puede causar una situación de tal talante. — ¡En la cocina, segunda puerta a la derecha!— Le grito en respuesta al Uzugakureño, dejando caer su pesada mochila sobre el suelo, la situación era apremiante ya que las llamas comenzaban a consumir la casita. — ¡Entra por el techo, tratare de despejar la entrada! — Dijo corriendo hacia la entrada donde las vigas de madera del techo habían caído bloqueando la salida, frunció el ceño al ver el bloqueo y solo se le ocurrió algo. Físicamente no podría hacer nada para levantar la viga, no lograría levantarla por lo que no le quedaba de otra que reventarla, aun con cierto nerviosismo concentro cierta cantidad de chakra para dirigirla directo hacia su mandíbula, sin mediar palabra hizo el sello de la serpiente, y en el primer destello de electricidad. Disparo la lanza hacia la viga de madera causando un gran estruendo, pero despejando la entrada. RE: Campos festivos - Riko - 23/08/2017 — ¡En la cocina, segunda puerta a la derecha! ¡Entra por el techo, tratare de despejar la entrada! Era todo lo que necesitaba oír, rápidamente subió al edificio, visualizando momentáneamente a los hombres que habían causado aquello, pero no podía pararse ahora, rápidamente se introdujo por el agujero que se había creado en el techo del edificio, tapándose la nariz y boca con el brazo y echando un rápido vistazo, tratando de visualizar a los niños. No tardó demasiado en hacerlo, apenas unos segundo y rápidamente se dirigió hacia ellos a toda velocidad. — No os preocupéis, ¿vale? Os voy a sacar de aquí y voy a llevaron con vuestra mamá, ¿si? Pegaos a mi y no os separéis. — Les indicó el uzunés, tratando de mostrar una tranquilidad máxima para no asustar aún más a los pequeños. Rápidamente se dirigió hacia la salida, que Hazegawa le había dicho que despejaría y, efectivamente estaba más o menos limpia, por lo que, con los niños por delante, el peliblanco salió del edificio. — Será mejor que nos alejemos lo máximo posible de aquí, el edificio no tiene muy buena pinta. — Le aseguró al Hyuga. RE: Campos festivos - Hazegawa - 24/08/2017 —Coincido contigo, es hora de pirarse…—Dijo volviendo al punto donde dejo su bolso, colocándoselo rápidamente para preparar la huida, aunque nunca se espero que aquella madre cuyos hijos salvaron hace poco ahora yacía abrazando a sus pequeñines, incluyendo al uzunés todo en un gran abrazo del oso, mientras la fémina lagrimeaba de alegría. Haze soltó una risilla al ver la escena, los cuatro estaban cubiertos de hollín y antes de que pudieran marchar estaban rodeados por una multitud, al momento en el que peliblanco salió con los críos la multitud le dedico un aplauso estruendoso, mientras se alejaban por precaución. El Ojiblanco se abrió paso entre la multitud, haciéndole un gesto con la cabeza al peliblanco para que le siguiese, trato de echar memoria y retomar hacia la fortaleza de los senju. RE: Campos festivos - Riko - 26/08/2017 —Coincido contigo, es hora de pirarse… Riko asintió y ambos se dispusieron a continuar con su camino después de todo aquello, pero, para sorpresa del peliblanco, la madre de los críos le pilló y le dio un abrazo de esos que se notan que son de felicidad, de puro agradecimiento que le abarcó tanto a él como a sus dos hijos, en un momento que cualquiera habría considerado como bonito. — Bueno, no hace falta esto, ha sido un placer poder ayudar. — Dijo el chico, aún prisionero por los brazos de la mujer. Cuando le soltó, los dos genin continuarían su camino sin prisa ninguna. — Oye, ¿y cómo es que puedes ver a través de muros y eso? — Preguntó curioso, ya le había picado la curiosidad mientras perseguían a los que luchaban en el tejado, pero que hubiera sido capaz de indicarle donde se encontraban los niños le había confirmado que aquello era lo que podía hacer. RE: Campos festivos - Hazegawa - 26/08/2017 — ¿Te has pillado una bastante mayorcita eh? — Dijo soltando una risotada una vez estuvieran unas calles alejados del sitio de la acción, escucho la pregunta que le formulo el peliblanco y simplemente miro el cielo, aunque fue por puro instinto ya que con su Dōjutsu activado no necesitaba girar la mirada para poder observar. —Es el Dōjutsu de mi clan, tenemos un rango de visión mayor al de las personas comunes. — Dijo sin revelar más detalles, haciendo un sello con sus manos deshizo el Byakugan de sus cuencas, para el ya era común pasar largos ratos con su Dōjutsu activado, aunque ampliar y enfocar era algo que no había practicado mucho, puesto que no se le había presentado la oportunidad de utilizar la habilidad a diario. — ¿Crees que sigan vivos?…los sujetos que causaron la explosión en el tejado. — Pregunto estando al lado del peliblanco, frunciendo el ceño un poco denotando que aquello dos sujetos le habían incordiado y su mero recuerdo, le molestaba levemente. RE: Campos festivos - Riko - 26/08/2017 — ¿Te has pillado una bastante mayorcita eh? El peliblanco no pudo evitar reír al unísono que su compañero. — He salvado a sus hijos... es normal — Dijo Riko en tono orgulloso, no todos los días se conseguía una hazaña como aquella, y no dudaría en contárselo a Akiko en cuanto la viera. —Es el Dōjutsu de mi clan, tenemos un rango de visión mayor al de las personas comunes. Riko miró al Hyuga, algo había intuido cuando el otro había hecho un sello y las venas de alrededor de los ojos se marcaron muchísimo, pero aún así no tenía ni idea de dónde provenía ese poder pero tenía claro que, para el trabajo de shinobi, era algo muy útil, por lo que asintió, no quería preguntar más, al fin y al cabo, era algo que no le iba a contar, y menos siendo de diferentes aldeas. — ¿Crees que sigan vivos?…los sujetos que causaron la explosión en el tejado. El uzunés recapacitó, quizás uno de los dos hombres no siguiera vivo, pero sin duda, el que había lanzado la bomba sí, sería muy torpe si no fuera capaz de esquivar su propio ataque, y no parecía tan torpe, desde luego. — Pues no sé por qué me da que nos cruzaremos con esos hombres en algún otro momento, la verdad... — Aceptó el peliblanco. — Mira, ahí está mi casa, ¿cómo se llamaba la mujer a la que andabas buscando? RE: Campos festivos - Hazegawa - 26/08/2017 Al llegar al a casa del peliblanco Haze pensó fugazmente en el estatus de la familia del peliblanco basándose en como era su casa, el tamaño indicaba posición y aquello podría serle útil en un futuro. — ¿Tienes hermanas Riko-chan? — Dijo en tono de broma, palmeándole el hombro. —Si alguien de tu familia conoce a la Abuela Tedaya, y nos dicen donde podríamos ubicarla sería perfecto, nos ahorraría mucho trabajo. — Le explico al peliblanco, relajando los brazos llevándolos tras la nuca, echando mano a su reloj de bolsillo, observo la hora y noto que era la hora del almuerzo, indudablemente sus ojos estaban conectados con su estomago, el cual lanzo un rugido. « Rayos…tengo hambre,esos pastelitos bajos en grasa no ayudan... » —La Abuela Tedaya es alguien muy importante para nosotros, para mí y mis hermanos. — Hizo la acotación, aunque él y Nahima no eran en lo absoluto parecidos, después de todo eran huérfanos unidos por la desgracia. —Me preocupa que existan sujetos como el de hace un rato, pululando por ahí…de no estar nosotros ahí, esos pequeños no lo cuentan— Se llevo la mano al mentón pensativo, quizás debería encargarse de la cuestión personalmente pero no sin antes comer algo. |