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Un timo para olvidar - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: Base de datos del rol (https://ninjaworld.es/foro-base-de-datos-del-rol) +--- Foro: Historia, acontecimientos y ambientación (https://ninjaworld.es/foro-historia-acontecimientos-y-ambientacion) +---- Foro: Tramas pre-reset 2017 (https://ninjaworld.es/foro-tramas-pre-reset-2017) +---- Tema: Un timo para olvidar (/tema-un-timo-para-olvidar) |
RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 22/01/2016 A Kunie no pareció agradarle en demasía la idea de Datsue, pero terminó aceptando, finalmente, con un escueto asentimiento. Era lo único que necesitaba. Sus manos viajaron rápidas y precisas a su portaobjetos, de donde sacó dos hilos shinobi que ataría con suma rapidez. Luego, se agachó junto a la mesa y, con sumo cuidado de no despegar el sello, levantó un poco la esquina del papel para atar el hilo. Al levantarse, descubrió a Kunie quitándose la ropa. —La hostia… —murmuró. Al menos una sorpresa agradable. - Te sugiero que hagas lo mismo. - apuntó, dirigiéndose al Uchiha, tras volver a ponerse la ropa del revés. —Claro, claro… —farfulló, con el rabillo del ojo todavía contemplando su cuerpo, que quitaría el aliento a más de un hombre. Se quitó la yukata y la volvió del revés, haciendo lo mismo con su camisa interior, y se vistió de nuevo tal y como había hecho Kunie. Por su forma de actuar, esta tía no es la primera vez que se mete en problemas… Seguro que ha hecho el truquito de la ropa más de una vez. La silueta de la kunoichi se confundió con la oscuridad de la noche al salir afuera, y Datsue giró sobre sí mismo para recoger el hilo, que había dejado sobre la mesa. Entonces, se detuvo. Un momento. Se le acababa de ocurrir una idea fantástica. Se deslizó como una gacela tras la barra y cogió una de las botellas. Entonces, vacío su contenido sobre el camarero. —Si te sirve de algo, lo siento —dijo con voz apenada. Claro, ahora debe sentirse mucho mejor el hombre, no te jode. Apartando aquel pensamiento de la cabeza, tomó varias botellas más, atrapándolas entre sus brazos y el torso, y empezó a vaciar una mientras caminaba, formando un río serpenteante que empapó los tres cadáveres restantes, desembocando finalmente en la mesa. Dejó las botellas restantes bajo el sello explosivo y tomó el hilo, el cual envolvió alrededor del pomo de la puerta. Salió del bar y, con la cabeza y medio cuerpo dentro todavía y la puerta semicerrada, tiró del hilo para tensarlo lo máximo que se atrevió. —Listo —sentenció, satisfecho por su trabajo, cerrando la puerta tras de sí. Entonces miró a Kunie—. ¿Tienes algún sitio donde alojarte esta noche? —La pregunta bien podría parecerle a Kunie simple preocupación, un gesto caballeresco para ofrecerle la mano por si la muchacha no tenía donde caerse muerta. Nada más lejos de la realidad. Era el propio Datsue quien no tenía donde caerse muerto. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Akame - 22/01/2016 ¿Por qué tarda tanto este chico?, se preguntó para sí la kunoichi. Cada segundo que pasaba a merced del frío glacial que invadía las calles de Notsuba era poco menos que una tortura. Se cruzó de brazos, frotándose la camisa como pudo para intentar entrar en calor. Imágenes, sonidos, olores y recuerdos de lo sucedido se entrelazaban en su cabeza, componiendo una sinfonía insoportable. Estaba acostumbrada a esas cosas, pero bien temía que aquella sensación la seguiría teniendo incluso diez años más tarde, después de haber matado a mil hombres. Sacudió la cabeza, como si aquellos pensamientos fuesen piojos o chinches que podía quitarse imitando a un perro. El sonido de la puerta al cerrarse la sacó de sus pensamientos. Kunie se giró y tuvo ante sí a Datsue, con las manchas de sangre de sus ropas bien ocultas, tal y como ella le había sugerido. Entonces reparó en un detalle, un pequeño pero llamativo detalle en el que, por alguna razón, no se había fijado hasta ese preciso momento. Sus ojos... ¿Qué significa esto? - ¿Tienes algún sitio donde alojarte esta noche? - preguntó el Uchiha. - Sí, tengo una habitación en un hostal de la ciudad. - respondió ella con cierta desgana. Acababa de reparar en lo cansada que la había dejado la breve aventura tabernaria.- Supongo que tú tampoco tendrás problemas, teniendo en cuenta la fortuna que te has embolsado hoy. Quédate con mi parte, no la necesito. - añadió, antes de que él pudiera decir nada.- Será mejor que nos esfumemos. Empezó a caminar a paso ligero, perdiéndose entre las sombras del callejón. Tenía la vaga esperanza de que Datsue la siguiera, pero tampoco podía estar completamente segura. Al fin y al cabo, ¿qué le ataba a ella? Ahora que ambos se habían ayudado mutuamente, con resultados inesperados, podían seguir su camino por separado. Sin embargo, Kunie había quedado intrigada con el chico. Quería saber más de él, de su historia, de qué llevaba a un shinobi de Takigakure recién graduado a buscarse la vida estafando a paletos por las calles de Notsuba. Y, claro, luego estaban aquellos ojos del color de la sangre. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 22/01/2016 - Sí, tengo una habitación en un hostal de la ciudad. - respondió ella con cierta desgana-. Supongo que tú tampoco tendrás problemas, teniendo en cuenta la fortuna que te has embolsado hoy. Quédate con mi parte, no la necesito. - añadió, antes de que él pudiera decir nada.- Será mejor que nos esfumemos. —Así que hemos matado a cuatro hombres por algo que no necesitabas —murmuró, sin saber si le oiría—. Bien. Aquella tipa atraía los problemas como la miel a las abejas. Lo más prudente hubiese sido tomar la dirección contraria a ella. Lo más sensato, correr y no mirar atrás. Sin embargo, la siguió. Porque se dio cuenta de una cosa: era justo lo que necesitaba. —¿Y cómo es que una kunoichi de Takigakure se dedica a estas chapuzas de timos? ¿Es que no te pagan bien las misiones? —preguntó intrigado, poniéndose a su altura. Que las misiones tenían una recompensa de mierda era algo que no hacía falta que le aclarase, pues él lo sabía muy bien, pero ante la afirmación de la kunoichi de que no necesitaba el dinero, una pequeña sospecha empezó a asomar en su mente—. ¿O simplemente es por diversión? Con el rabillo del ojo, comprobó que a sus espaldas la calle seguía vacía. Parece que nos vamos a librar de esta. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Akame - 22/01/2016 - Así que hemos matado a cuatro hombres por algo que no necesitabas. - mumuró el Uchiha.- Bien. Kunie se detuvo. Sabía que no debía picar el anzuelo. Volvió la vista hacia Datsue y lo observó de arriba a abajo. Flacucho, con ropas gastadas y el ingenio bien entrenado. Kunie había visto a mucha gente con dinero, y aquel chico no encajaba en ninguno de los arquetipos que ella conocía. - Sólo los ricos y los que no tienen absolutamente nada rechazan tanto dinero cuando tienen la oportunidad de cogerlo sin más. - replicó con un tono tan suave que sonaba incluso amable.- Así que, primero, he matado a cuatro hombres porque tú la cagaste. - apostilló, sin modular ni un ápice la dulzura de su voz.- Y segundo, espero que me invites a jugar al shōgi y tomar té de importación en los jardines de tu finca mientras tus sirvientes tocan un poco de música, como agradecimiento por haberte salvado el pellejo. Sin esperar contestación por parte de Datsue, se dio media vuelta y empezó a caminar, con intención de alejarse cuanto antes de la taberna. No pudo contener una sonrisa cuando oyó los pasos del Uchiha, veloces, que la seguían. Kunie todavía tenía muchas cosas que quería preguntarle al chico, y la perspectiva de poder hacerlo la llenaba de entusiasmo. Ambos siguieron andando en dirección al hostal, fundiéndose con las sombras del entramado de callejones, mientras hablaban. - ¿Y cómo es que una kunoichi de Takigakure se dedica a estas chapuzas de timos? ¿Es que no te pagan bien las misiones? ¿O es simplemente por diversión? Kunie suspiró, resignada. Lo cierto era que ni ella misma sabía por qué se sentía atraída por el peligro. Quizá fuera cosa de la edad. O quizá hubiese una razón más profunda. - ¿Quieres que te diga la verdad? No lo sé. - admitió, con desgana.- Supongo que cuando un perro pasa toda la vida en una cuadra, rodeado de caballos, al final termina por acostumbrarse al olor de la paja reseca y las boñigas del tamaño de un puño. Tal vez incluso le coja el gusto a relinchar. La kunoichi notó una punzada de dolor en el pecho, muy cerca del corazón. Sin darse cuenta, en su rostro se había dibujado el reflejo sombrío de tiempos más difíciles... Y eso no le gustaba. Trató de sonreír de nuevo, y mientras se esforzaba por recordar la dirección exacta del hostal, decidió ser ella quien hiciera las preguntas. - ¿Por qué no me cuentas el motivo de que tus ojos hayan cambiado de color? Seguro que es una historia de lo más interesante. Me he fijado al salir de... ese sitio. ¿Es el homólogo Uchiha a mearse encima cuando tenéis miedo? - agregó, con una risita. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 22/01/2016 Datsue hizo un ademán, como cortando el viento, ante la réplica de Kunie, que volvía a echarle en cara haberla fastidiado en la partida. Cada cual más tozudo, aquella era una discusión que no conduciría a ninguna parte. - Y segundo, espero que me invites a jugar al shōgi y tomar té de importación en los jardines de tu finca mientras tus sirvientes tocan un poco de música, como agradecimiento por haberte salvado el pellejo. —Claro —esbozó una media sonrisa—. Salvo por lo del té de importación. Y lo del jardín —añadió—. Aunque la partida estará un poquito desbalanceada, ¿no crees? Con eso de que puedes meterte en mi coco —señaló, apuntando con el dedo su sien. ¿Cómo demonios lo hará? Pronto, la conversación que mantenían se rebajó en tensión. Ya no era un intercambio de golpes y estocadas, en la que cada cual buscaba la réplica perfecta que silenciase a su rival. Ahora, más bien, parecía que estaban… charlando. Simplemente charlando. - ¿Quieres que te diga la verdad? No lo sé. - admitió, con desgana ante la pregunta del Uchiha- Supongo que cuando un perro pasa toda la vida en una cuadra, rodeado de caballos, al final termina por acostumbrarse al olor de la paja reseca y las boñigas del tamaño de un puño. Tal vez incluso le coja el gusto a relinchar. Datsue alzó una ceja ante la ilustrativa metáfora. —Suena a que hayas tenido una infancia de mierda —dedujo el Uchiha, cuyo peor trauma era haberse quedado sin sus cereales favoritos una noche que tenía antojo. Bueno, eso y el abandono de su padre biológico, pero era algo de lo que no tenía recuerdos. Vio una sombra en el rostro de la kunoichi, rápidamente camuflada por una sonrisa. Parecía que no le hacía mucha gracia hablar del asunto y, viéndolo venir, cambió de tema: - ¿Por qué no me cuentas el motivo de que tus ojos hayan cambiado de color? Seguro que es una historia de lo más interesante. Me he fijado al salir de... ese sitio. ¿Es el homólogo Uchiha a mearse encima cuando tenéis miedo? - agregó, con una risita. Datsue se carcajeó brevemente. —Sí, algo así —admitió, sin perder la sonrisa—. Es el dōjutsu de nuestro clan. Una técnica ocular, vaya. Nos permite… ver las cosas como realmente son. Aunque preferiría poder meterme en la cabeza de la gente, la verdad —admitió en seguida—. Antes, en la taberna… —su semblante volvió a ensombrecerse—. Estabas controlando a ese tío, ¿verdad? ¿Cómo es eso posible? RE: Un timo para olvidar - Uchiha Akame - 22/01/2016 - Suena a que hayas tenido una infancia de mierda. - respondió el Uchiha sin mucho tacto Pero lo cierto era que Datsue tenía razón. O al menos en parte, porque algo tan suave como 'de mierda' no hacía justicia a lo que Kunie había tenido que pasar en Shinogi-to. No quería hablar de eso, y no creo que nadie pudiese culparla. Como mejor pudo cambió el tema de conversación. —Sí, algo así —admitió el Uchiha, sin perder la sonrisa—. Es el dōjutsu de nuestro clan. Una técnica ocular, vaya. Nos permite… ver las cosas como realmente son. Aunque preferiría poder meterme en la cabeza de la gente, la verdad —admitió en seguida—. Antes, en la taberna… —su semblante volvió a ensombrecerse—. Estabas controlando a ese tío, ¿verdad? ¿Cómo es eso posible? Kunie torció los labios en una mueca de desagrado. Sí, era cierto, y no le gustaba que Datsue se hubiese dado cuenta. Aunque, ¿quién no lo habría hecho? He sido descuidada, demasiado descuidada, y ahora este Uchiha conoce mi técnica secreta. Maldita sea... No tenía sentido negarlo, pues Datsue había podido comprobar con todo lujo de detalles como un tipo se levantaba, cual muerto viviente, y asesinaba a sangre fría a sus dos camaradas y a un hombre inocente. No había muchas personas en Onindo que estuvieran dispuestas a hacer algo así sin un motivo realmente bueno. De modo que la kunoichi se limitó a soltar y suspiro de resignación y contestar lo más lacónicamente que pudo. - Supongo que no tiene sentido negarlo. Sí, digamos que... 'tomé prestado' su cuerpo un rato. - hizo una pausa, como esperando comprobar si el Uchiha se daba por satisfecho.- Todos tenemos nuestros recursos. Tú tienes esos 'Ojos de la Verdad', y yo mis trucos. Siguieron caminando un poco más hasta llegar a una calle más ancha que las demás. Estaba indudablemente mejor iluminada, tanto por las farolas que flanqueaban la calzada como por la luz que salía de puertas y ventanas aquí y allá. El hostal estaba al final de la vía, torciendo un par de calles a la izquierda. - Bueno, ¿vas a contarme algo de tí? - interrogó la chica.- Llevamos un rato hablando y todavía no sé ni de dónde eres. No pareces un ricachón mimado, así que dime, ¿qué problema tienes para andar estafando a paletos en esta ciudad? RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 22/01/2016 - Supongo que no tiene sentido negarlo. Sí, digamos que... 'tomé prestado' su cuerpo un rato. –Pero mientras lo tomas prestado, no puedes controlar el tuyo, dedujo el Uchiha, que había visto como el cuerpo de la kunoichi caía inconsciente - Todos tenemos nuestros recursos. Tú tienes esos 'Ojos de la Verdad', y yo mis trucos. El Uchiha asintió. Por el momento, él sabía más de las habilidades de ella que al revés, y eso siempre era bueno. El callejón oscuro y estrecho se ensanchó para dar paso a una callejuela mucho mejor iluminada y, porque no decirlo, limpia. Sus pasos, sin embargo, siguieron resonando solitarios y aislados, como prueba irrefutable de que eran los únicos que permanecían despiertos en la madrugada o, al menos, los únicos que tenían el valor suficiente como para darse un paseo a aquellas horas de la noche. - Bueno, ¿vas a contarme algo de tí? - interrogó la chica.- Llevamos un rato hablando y todavía no sé ni de dónde eres. No pareces un ricachón mimado, así que dime, ¿qué problema tienes para andar estafando a paletos en esta ciudad? Datsue decidió al fin revelarle su procedencia. ¿Qué sentido tenía ocultárselo, cuando podrían cruzarse cualquier día por la Aldea? —Soy de Taki, como tú —Y, como queriendo probar sus palabras, sacó a relucir su bandana ninja por unos breves instantes, ocultándola de nuevo en el portaobjetos—. Y, como te dije en su momento, siempre pago mis deudas. Por eso estoy aquí —aseguró—. ¡20.000 ryos, nada menos! —exclamó con pena—. Eso es lo que debo. Bueno, no yo, pero… En fin, es complicado. El caso es que hice mis sumas y para llegar a esa cantidad, con la mierda de salario que nos dan a los Gennins por cada misión, y descontando los gastos para renovar el armamento, comida, luz y demás mierda… Y contando además que la deuda se incrementa a cada mes que pasa por los intereses… Total, que tenía que buscar alternativas —terminó por resumir—. Así que por eso me dirijo hacia Shinogi-to. Allí haré el golpe perfecto —aseguró, y su mirada se encendió junto a sus palabras—. Un timo de los grandes, de los buenos. Uno de los que marcan época, y no la chapuza que me has obligado a hacer —terminó apostillando. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Akame - 24/01/2016 —Soy de Taki, como tú —Y, como queriendo probar sus palabras, sacó a relucir su bandana ninja por unos breves instantes, ocultándola de nuevo en el portaobjetos—. Kunie no pudo evitar apretar los dientes con una mueca de rabia. ¿Cómo he podido ser tan estúpida de no saber que estaba con un shinobi de mi propia Aldea?. Podría parecer que la procedencia de Datsue era irrelevante en todo lo que habían pasado aquella noche, pero para Kunie, era como una derrota. Su maestro siempre le recordaba de forma incansable que un buen ninja debía saber más acerca de los que le rodean que ellos mismos. A todos los efectos, el Uchiha le había ganado la mano y por mucho. Sin embargo, no estaba dispuesta a admitirlo y, así, no dijo nada. . Y, como te dije en su momento, siempre pago mis deudas. Por eso estoy aquí —aseguró—. ¡20.000 ryos, nada menos! —exclamó el Uchiha, con pena—. Eso es lo que debo. Bueno, no yo, pero… En fin, es complicado. El caso es que hice mis sumas y para llegar a esa cantidad, con la mierda de salario que nos dan a los Gennins por cada misión, y descontando los gastos para renovar el armamento, comida, luz y demás mierda… Y contando además que la deuda se incrementa a cada mes que pasa por los intereses… Total, que tenía que buscar alternativas —terminó por resumir—. Así que por eso me dirijo hacia Shinogi-to. Allí haré el golpe perfecto —aseguró Datsue, y su mirada se encendió junto a sus palabras—. Un timo de los grandes, de los buenos. Uno de los que marcan época, y no la chapuza que me has obligado a hacer —terminó apostillando. Si la kunoichi había sentido intriga, expectación, sorpresa o enfado por el monólogo de su acompañante, todo quedó eclipsado. Kunie pasó por cada uno de aquellos sentimientos. Intriga, de cómo podían los padres de Datsue haber contraído semejante deuda. Expectación, mientras el chico le relataba sus andanzas intentando reunir el dinero. Enfado, cuando, siendo él un vulgar engañaviejas, se atrevió a tachar su magnífico plan de 'chapuza'. Nada de eso importó, porque cuando Datsue aseguró que su plan era dar un golpe legendario en Shinogi-to, la chica estalló en carcajadas. Ni siquiera tuvo lugar de recordarse que estaban solos en la calle a las tantas de la madrugada. Simplemente tuvo que reír, y reír, y reír hasta que se quedó sin una pizca de aire en los pulmones. Trató de parar, pero al hacer acopio de aire, otra nueva carcajada se le vino a los labios. Encorvó la espalda, atrapándose el vientre con ambas manos como si fuera a explotar. Siguió riendo un rato más a carcajada limpia hasta que por fin se detuvo, limpiándose los ojos llorosos. - Ay... Ay... Perdona, de verdad... - trató de disculparse sin romper a reír otra vez.- Pero es que... Ay... Ha sido buenísimo. Por un momento me pareció que habías dicho que pensabas dar un gran golpe en Shinogi-to... Tardó unos momentos en recobrar completamente la seriedad. Con la manga de su camisa se secó los ojos y la cara, empapados en lágrimas de risa. - ¿Has estado alguna vez? Me imagino que no. - añadió, tajante.- Te ahorraré el viaje, Datsue-san. Comparado con Shinogi-to, el tipo más duro de Notsuba es una puta niñera. He visto de qué pasta estás hecho y, créeme, no es lo tuyo. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 28/01/2016 Datsue se vio obligado a parar ante el ataque de risa de su compañera, que montó un escándalo con sus carcajadas. Al principio no le dio más importancia. Se limitó a alzar una ceja, impertérrito, mientras esperaba con paciencia a que se le agotase la risa. Pero toda paciencia tenía un límite, y el ceño fue arrugándose a medida que ésta se agotaba. - Ay... Ay... Perdona, de verdad... - trató de disculparse sin romper a reír otra vez.- Pero es que... Ay... Ha sido buenísimo. Por un momento me pareció que habías dicho que pensabas dar un gran golpe en Shinogi-to... —Ajá —dijo con voz monocorde. No quería darle el gusto de mostrar su irritación. Kunie tardó unos momentos en recobrar completamente la seriedad. Con la manga de su camisa se secó los ojos y la cara, empapados en lágrimas de risa. - ¿Has estado alguna vez? Me imagino que no. - añadió, tajante.- Te ahorraré el viaje, Datsue-san. Comparado con Shinogi-to, el tipo más duro de Notsuba es una puta niñera. He visto de qué pasta estás hecho y, créeme, no es lo tuyo. Datsue no se tenía por un tipo arrogante, al menos no para ser un Uchiha, pero incluso a él le tocó en su orgullo aquellas últimas palabras. Y le tocó porque eran verdad. Siempre pensó que se reiría a carcajadas del peligro, que cuando se encontrase en una situación adversa se crecería y saldría adelante. Pero lo cierto es que había actuado como un cobarde: asustado, sin atreverse a atacar a aquel hombre y, en definitiva, superado. Una cosa era estudiar en la Academia a cómo combatir y desenvolverse en los problemas por los que todo ninja tiene que pasar, y otra muy distinta ponerlo en práctica en una situación real. Cuanto antes lo asimilase, mejor: no estaba preparado para su viaje a Shonogi-to. —Tienes razón —admitió Datsue, serio, sin un ápice de ironía en el tono de su voz—. Por eso vas a venir conmigo —Más que una petición, parecía que le estaba informando—. ¿No decías que te excitaba el riesgo? —preguntó, recordando lo que le había dicho telepáticamente mientras estaban con su particular timo. Un timo para olvidar—. Pues nada puede ser más excitante que mi viaje a Shinogi-to... RE: Un timo para olvidar - Uchiha Akame - 3/02/2016 De todas las cosas que Datsue podía haber dicho era justo esa la única que Kunie no se esperaba. Creía que el Uchiha le respondería con su habitual sorna, no queriendo darse por vencido en el duelo dialéctico que parecía entablarse cada vez que conversaban. - Tienes razón. - admitió Datsue, serio, sin un ápice de ironía en el tono de su voz.- Por eso vas a venir conmigo. La kunoichi abrió tanto la boca que creyó que se le iba a desencajar la mandíbula. Se quedó así, en aquella ridícula pose, unos cuantos segundos. Era incapaz de asimilarlo. ¿Habla en serio? El viento nocturno sopló un momento con más fuerza, como si quisiera añadir dramatismo a la curiosa escena. El frío que le subió por la espalda la devolvió a la realidad, forzándola a reaccionar. Pero, ¿qué debía decir? Shinogi-to era la fuente de su pasado, un pozo de maldad y negrura que le traía a la mente todo tipo de dolorosos recuerdos. - No puedes hablar en serio... - balbuceó.- ¿Es que no me has escuchado? Se hizo el silencio de nuevo. Kunie se mantenía en aquella postura incómoda, casi marmórea, mientras en su cabeza se amontonaban cientos de recuerdos, imágenes, sonidos y olores. Todos le daban vueltas dentro del cráneo, como si fuese una ensaladera. Pero, sobre todos aquello, permanecían los nombres. Eran los reyes de la jerarquía emocional dentro de su mente. Muchos nombres, algunos más sólidos y sangrientos que otros, como el acero de una espada bañada en color carmesí. Hida, 'Shibōkuma', 'Katame', Akira... La mayoría no eran nombres en sí, sino apodos, pero lo que contaba no era su forma. Era aquello que representaban. Hombres. Y, de entre todos, uno resonaba con fuerza. Shishio. Kunie apretó los dientes, y sus manos se cerraron inconscientemente para formar dos pequeños puños de apariencia delicada. - ¿Y qué gano yo? RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 3/02/2016 Una sonrisa se formó en los labios del Uchiha al ver la cara desencajada de la kunoichi. No le extrañaba, se lo había soltado muy de golpe. Pero con chicas como aquella no valía la pena irse por las ramas. - No puedes hablar en serio... - balbuceó.- ¿Es que no me has escuchado? —Precisamente porque te he escuchado —respondió de forma lacónica. Una ráfaga de viento arrastró las hojas caídas de la calle y sacudió las ropas de ambos, mientras el silencio se instauraba de forma inexorable entre ellos dos a la espera de la pregunta inevitable. Era la pregunta que, tarde o temprano, Kunie tendría que hacer, y el cerebro de Datsue ya estaba pensando en una respuesta convincente antes incluso de oírla: - ¿Y qué gano yo? No le pasó desapercibido la forma en que antes había apretado los dientes. Era como si… Como si le trajese malos recuerdos. Por sus palabras de antes, parece que ya ha estado en Shinogi-to… ¿Le pasaría algo? Sin atreverse a preguntar, Datsue optó por responderle. —¿Aparte de mi inestimable compañía? —se permitió bromear—. Es difícil de decir, al menos hasta que comprenda tus motivaciones —explicó, mientras se rascaba la nuca—. Te ofrecería un porcentaje de los beneficios en caso de tener éxito, pero antes rechazaste tu parte del dinero… Dijiste que te gustaba el peligro y el riesgo, pero por la cara que has puesto veo que no te agrada mucho volver a Shinogi-to… Porque ya has estado allí, ¿verdad? —La pregunta casi era una afirmación. Entonces suspiró. Era difícil hacerle una oferta a alguien sin saber en qué demonios estaba interesado. Es como si un cliente estuviese ciego sin que yo lo supiese, y entonces le ofreciese un libro. O ofreciese una caja de cigarrillos a un ex-fumador. Obviamente, ambos me mandarían a la mierda. Aunque con el segundo ejemplo todavía tendría una oportunidad… Volvió a suspirar. Menudo dolor de cabeza—. Creo que todo sería más fácil si me dijeses lo que querrías a cambio por hacerme de… guía. Podría pasarme una hora ofreciéndote cosas y no acertar ni de lejos. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Akame - 7/02/2016 Pese a que Datsue sonreía con suficiencia, la kunoichi no era capaz de seguirle el juego. No en ese momento, y, definitivamente, no en aquel terreno. Ella era consciente de que su actitud la estaba delatando por completo. Un chico tan avispado como Datsue ya se habría dado cuenta. Pero, ¿qué podía hacer? Las palabras del Uchiha habían arrojado sal sobre heridas tan antiguas y profundas que quizá nunca llegaran a cicatrizar. Hida, Shibōkuma, Katame, Akira, Sorato... Shishio. Un sonido la sobresaltó. Parecía lejano, pero extrañamente perceptible a pesar de ello. Kunie se quedó en vilo unos instantes, desconcertada, con la mirada perdida en el infinito. Reconocía aquel sonido. Poco a poco fue haciéndose más audible y estruendoso, hasta que las risas de media docena de hombres resonaron en su cabeza tan fuertes como el atronar de un cañón. Eran ellos, los dueños de aquellos nombres y muchos otros, los que reían a carcajadas en su cabeza. Reconocía sus risotadas como si las hubiera estado escuchando desde el primer día de su vida. Apretó más los puños, ajena al mundo real que en aquel momento no importaba para ella. - ¿Qué es lo que quiero? La pregunta había salido de sus labios, pero ella juraría no haberla formulado. No, aquellas palabras habían escapado como pájaros enjaulados que por fin ven una oportunidad. En su huída, la devolvieron a la realidad. Kunie alzó la vista, clavando sus ojos ambarinos en la figura del Uchiha. ¿Qué es lo que quiero?. Era una pregunta condenadamente buena. Demasiado buena como para que la respuesta fuese suya. - Quiero ver a alguien. - contestó con tono ausente.- Un viejo amigo. Y durante el camino no hablaremos de mí. ¿Hay trato? La kunoichi notó una sensación cálida y pegajosa en las manos. Aflojó los puños y sintió el tacto inconfundible de la sangre. RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 7/02/2016 Cuanto más la observaba, más creía que sus sospechas eran más bien una certeza. Aquella chica había estado en Shinogi-to y, para bien o para mal, su estancia allí la había dejado marcada. Permanecieron un rato en silencio: ella con la mirada perdida, y él sin atreverse a romperlo. - ¿Qué es lo que quiero? Un escalofrío recorrió su cuerpo. Su tono de voz había cambiado. Era mucho más… frío. Tragó saliva y se obligó a mantenerle la mirada. - Quiero ver a alguien. - contestó con tono ausente.- Un viejo amigo. Y durante el camino no hablaremos de mí. ¿Hay trato? Ahora era Datsue el que no sabía qué responder. Se dio cuenta que aquella chica estaba envuelta por un halo de misterio mucho más tenebroso del que habría creído en un primero momento. ¿Un viejo amigo? Por el tono de su voz más bien parece lo contrario… ¿Pero qué le importaba a él mientras le ayudase en su propósito? Nada, y sin embargo… Kunie había impuesto como única condición no hablar sobre ella, y esa simple cláusula del contrato no hacía sino incrementar su curiosidad sobre lo que le había pasado. ¿Sería capaz de controlar su boca? —Es el mejor trato que me han propuesto en la vida —aseguró. Entonces le ofreció la mano para sellar el acuerdo—. Hay trato. ¿Estaría haciendo lo correcto? RE: Un timo para olvidar - Uchiha Akame - 7/02/2016 Kunie se quedó un rato mirando la mano que el Uchiha le tendía, absorta. No pensaba en el trato, ni en Datsue, ni en el gran golpe que él quería llevar a cabo. Todavía pensaba en los nombres. Aquellos nombres que no eran sólo nombres. Hida, Shibōkuma, Katame, Akira, Sorato... Alargó el brazo derecho hacia la mano tendida de Datsue. Sintió el toque de su piel, cálido pero duro como la piedra. Él notaría el calor viscoso de la sangre que Kunie se había hecho de tanto apretar los puños. Shishio. Todo su cuerpo se estremeció. Kunie parpadeó varias veces, como si acabara de despertar de un profundo sueño. Miró de arriba a abajo al chico que tenía ante él, y se sintió estúpida por haber confiado tan a la ligera en alguien de quien sabía tan poco. No parece mal chico. Justo después frunció los labios, reprimiéndose con severidad. El mundo estaba lleno de gente que no parecía mala, y eso no las hacía mejores. De repente notó una ráfaga de aire gélido que se le metía por los pliegues de la ropa y le helaba hasta los huesos. Perdida en sus recuerdos, casi se había olvidado del frío que hacía en aquella calle. Se frotó los brazos, tratando de volver a dibujar en su rostro aquella sonrisa que le servía tan bien. - Creo que es hora de que me vaya. Mi maestro estará preocupado, lleva sin saber de mí desde esta tarde. - mintió, pues sabía que Kishō nunca la perdía totalmente de vista.- ¿Cuándo tienes pensado salir hacia... ese sitio? RE: Un timo para olvidar - Uchiha Datsue - 7/02/2016 Primero notó algo cálido. Luego, al ver la sangre que cubría su piel tras el apretón de manos, abrió los ojos, atónito. Esta chica… Pasó de la sangre a las pupilas de ella, y entonces sintió un escalofrío, quizá producto del gélido viento que acababa de soplar. ¿Había hecho bien en invitarla a acompañarle? ¿Qué sabía de ella, aparte de la espeluznante sangre fría que mostraba para asesinar a cualquier desconocido? ¿Y acaso no era él un desconocido? ¿Qué pasaría si, por algún motivo, él fuese un inconveniente para su objetivo? ¿Trataría de matarle también? Pero se supone que es una compañera de Aldea… Joder, qué complicada es la vida shinobi. Mejor será que me ande con cuidado. - Creo que es hora de que me vaya. Mi maestro estará preocupado, lleva sin saber de mí desde esta tarde. Datsue asintió, conforme. Así que un maestro… - ¿Cuándo tienes pensado salir hacia... ese sitio? —Mañana al mediodía —respondió, sin darle demasiadas vueltas. A Datsue no se le podía considerar una persona madrugadora, ni de lejos, y le gustaba tomarse su tiempo para desayunar... y para que repose la comida—. ¿Estarás lista? Parecía que sus caminos se iban a separar... por el momento. |