Ecos del pasado - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: Base de datos del rol (https://ninjaworld.es/foro-base-de-datos-del-rol) +--- Foro: Historia, acontecimientos y ambientación (https://ninjaworld.es/foro-historia-acontecimientos-y-ambientacion) +---- Foro: Tramas pre-reset 2017 (https://ninjaworld.es/foro-tramas-pre-reset-2017) +---- Tema: Ecos del pasado (/tema-ecos-del-pasado) |
RE: Ecos del pasado - Uzumaki Eri - 20/09/2015 Eri lanzó una mirada asesina al rubio portador del sharingan, acababa de cometer un error grave al haber insinuado algo así, aunque no sabía con exactitud a quién se refería, pero no había estado bien. Yuna, por su parte, mostró una débil sonrisa y bajó su cabeza, posando su mirada en sus huesudas manos mientras estas jugaban entre sí, parecía nerviosa. La kunoichi de cabellos azulados posó una de sus manos sobre las de la mujer, pero cuando la joven quiso susurrar unas palabras de disculpa por el acto del rubio, la mujer de cabellos canos habló. -Verás, mi querido muchacho... - Habló lo más clara posible, sin levantar la vista. - Creo que tienes una idea equivocada de mí. - Terminó, mirando a Nabi. Eri suspiró, no recordaba a Yuna hablar así a nadie, siempre fue comprensiva y buena con los niños del orfanato, además de que a ella siempre la cuidó, no tanto como un familiar, o como una madre, pero intentaba cuidarlos a todos por igual siempre dentro de lo ordenado por el jefe de dicho lugar, él era el verdadero culpable de todo, y esos pensamientos hacían a Eri fruncir el ceño y cerrar el puño con fuerza. '' Estúpido jefe con sus estúpidas reglas y su estúpido orfanato...'' - Sin embargo, estás en todo tu derecho, ya que en aquel lugar no se te dio un buen trato, y eso que eras el más veterano allí. - Prosiguió, cuando Mike se subió sobre sus piernas queriendo ser acariciado por la mujer, que acató la orden gustosa. -Por lo cual, si necesitáis preguntar algo, preguntad, ya luego si se puede y me permitís, resolveré mis dudas y os daré lo que vine a daros. - Se ofreció, con otra sonrisa. Las arrugas de su cara se acentuaban cuando formaba esa curva con los labios, y Eri se preguntó que cuántos años tenía, ya que cuando trabajaba en la gran casa era mucho más joven, sin embargo parecía que había pasado un siglo para esa mujer que estaba sentada a su derecha. Miró a Nabi, no sabía si debía preguntar algo a la mujer o no, pero no sabía se debía hacerlo ahora, o después de que el Uchiha volviese a preguntar, así que, de perdidos al río, fue ella la primera. ''¡Las damas primero!'' Pero cuando su boca se abrió, nada saldría de ella, quedándose en blanco totalmente. Qué estúpida, mejor guardaría silencio y dejaría a los mayores hablar. RE: Ecos del pasado - Inuzuka Nabi - 22/09/2015 El Uchiha escuchó en silencio las suposiciones y las excusas que le soltaba aquella mujer. Su presencia le hacia recordar el rencor que habia acumulado durante aquellos años hacia ella y sobretodo hacia el director, pero no iba a saltarle al cuello por dos razones, porque en parte era tan victima como complice y porque él era incapaz de hacerle daño a un simple ciudadano de a pie, desarmado y sin intenciones de hacerle daño. La mujer le comentó que tenia una idea equivocada de ella, una media sonrisa ironica se posó en los labios del rubio. Él sabia perfectamente quien era ella y de lo que era culpable. Sabia que ella habia sabido desde mucho antes lo que iba a pasar, y no avisó a la kage porque confiaba en poder convencer al director. Sabia que no era la primera vez que pasaba eso y que podria no haber sido la última. Por muchas excusas, y por muy buenas que fueran, no iba a cambiar la idea que el shinobi tenia de ella. Le habia jodido la vida, y no solo eso, sino que a Eri parecia darle igual. Pero prefirió dejar la mierda escondida hasta que consiguiera lo que queria. No espero nada de ti, lo único que quiero saber es donde esta. Las excusas ya se las daras a tu biografo, a mi no me interesan. Hiciste lo que hiciste, y esos actos tienen consecuencias. ¿Quieres disculparte? ¿Quieres liberar tu cargo de conciencia? Ves a las tumbas de todos los niños que murieron y pidele perdon a sus familias. Se cruzó de brazos y apoyó la espalda en el sillon, esperando la reacción de las dos mujeres que le acompañaban en aquella habitación. Mike por su parte, saltó de la mujer a los brazos de Eri, esperando ser cogido, si la muchacha no reaccionaba el animal se chocaria contra ella y esta caeria de espaldas contra el acolchado sofa. La expresión de Nabi no reflejaba nada, estaba completamente serio, como siempre. Aunque en sus ojos se veia que estaba expectante, seguramente planeando salir por patas si la mujer finalmente le decia donde estaba aquel hijo de puta. RE: Ecos del pasado - Uzumaki Eri - 22/09/2015 Eri volvió a mirar al joven ahora con una mirada llena de dolor. ¿Cómo podía haber dicho algo así? No, definitivamente ese no era el Nabi que conoció, él no habría dicho algo así, ¿o sí? Estaba muy confusa en ese momento, incluso cuando Mike la placó contra el sofá y ella no alcanzó a abrazarlo para que no impactase contra su pecho seguía pensativa. Confusión, pensamientos, confusión... ¿Quién era el chico que se encontraba frente a ella? -¿Te estás escuchando? - Le recriminó, levantándose del sofá tan bruscamente que el can saltó al suelo antes de impactar el mismo contra él. Aún así la kunoichi de cabellos azules no pareció darse cuenta, mientras se mordía el labio con tanta fuerza que la sangre ya comenzaba a brotar de él. Yuna de nuevo posó su mirada en el suelo, mientras apretaba los dedos de sus manos en la fina tela de su vestido, revolviéndolo. Eri cerró el puño y bajó la mirada, ocultándola con su flequillo. - ¡Sabes lo que hizo Yuna por protegernos, nos cuidó y hasta dejó de comer para poder darnos comida que llevarnos a la boca! Toda la desgracia del orfanato no fue más que idea del superior, ¡no de ella! ¿Qué podría haber hecho? ¿Eh? - Chilló, mientras pequeñas lágrimas se formaban en sus ojos y amenazaban en desplazarse por las mejillas hinchadas de la joven. - Puede que esos niños que mencionas fueron vendidos ilegalmente, puede que algunos llevasen mejor vida, como llevé yo, o puede que otros incluso estén mejor así, bajo tierra, ¡descansando en paz! - Siguió hablando, con el mismo tono que había elevado anteriormente. -Pero... ¿Y qué hay de las segundas oportunidades para quién las merece? Más vale tarde que nunca, ¿sabes, Uchiha? - Siguió hablando, ya sin pensar en lo que salía por entre sus labios, con las lágrimas bailando libremente por su cara. - Yuna intentó todo por nuestra seguridad... Pensó en nosotros. ¿Y tú qué estás haciendo ahora mismo? ¿Buscar una venganza que no te llenará en lo más mínimo? - Soltó la bomba, tal cual. Entonces subió su rostro y le miró a los ojos firmemente, llena de ira y dolor. - Pues adelante, ve y acaba con su vida, ¡pero olvídate de la mía! - Y con ello dio media vuelta, abrió la puerta y se fue dando un portazo. Acompañada de la lluvia y sus pensamientos contradictorios más las maldiciones interiores que se lanzaba por ser tan bocazas y hablar antes de pensar, corrió por las calles de la Villa Oculta del Remolino, en busca de un lugar lejos de la casa del portador del sharingan. Estaba segura de que no la seguiría, pero aún así se quería alejar lo más posible, para calmar el dolor de su pecho y dejar de llorar. Así cuando llegó al campo de entrenamiento sin quererlo ni saberlo, se acercó a uno de los árboles que allí se encontraba y se subió a una de las ramas, donde el agua le llegaba de forma escasa. '' Que te jodan, Uchiha.'' Por otra parte, la mujer de cabellos canos había recogido al can del suelo, intentando en vano calmar al perro ya que cuando vio a la kunoichi de cabellos azules salir corriendo comenzó a ladrar y a lanzar gemidos de tristeza hacia la puerta. Miró a Nabi con una sonrisa triste, dejó un paquete del tamaño de su mano que traía en su pequeña bolsa sobre la mesa del rubio y añadió. - Le encontrarás donde le viste por última vez, volvió cuando dejaron de buscarle. - Confesó. - Daba igual cuantas veces intentase ayudaros, mi amor por aquel hombre sin sentimientos era mayor que cualquier acción lógica, ¡qué equivocada estaba! El amor nos hace débiles, joven. - Dijo más para ella que para él, mientras caminaba hacia la puerta. - Pero también llena huecos que el odio y el rencor no pueden llenar. - Giró el pomo de la puerta, y antes de abandonar la sala, susurró. - Cuídate, Nabi-kun, voy al cementerio a orar por los chicos a los que no pude salvar. - Dejó al perro en el suelo, y se fue. El sonido de la puerta al cerrarse suavemente sería lo último que escuchase Nabi antes de quedarse solo en su casa, con la compañía del perro Mike, quien lo miraba con el hocico fruncido. RE: Ecos del pasado - Inuzuka Nabi - 23/09/2015 EL muchacho, que se encontraba mirando la situación apoyado en su sillon, pudo ver como la mirada de la peliazul se clavaba en él, aunque parecia que estuviera viendo algún tipo de escena grotesca que le producia un sentimiento combinado de asco y desaprobación. Se levantó ofendida del sofa, y poco tardo en empezar a soltarle un discurso sobre lo buena que era Yuna y el asco que le daba la persona en la que él, se habia convertido. Por la mente del rubio pasaba la idea de que la chica estaba obviando algo muy importante. Obviaba el hecho de que él era lo que era por lo que habia tenido que vivir, él nunca habia querido convertirse en un ser frio y solitario, y ella, estaba defendiendo a una de las personas que pudo haber evitado su degeneración, su transformación a un ser menos humano. Tenia contra argumentos para la peliazul a patadas, podria haber destrozado su discurso en apenas unos segundos, pero calló. Al acabar lo que tenia que decir, y haberlo llamado Uchiha de forma despectiva, se marchó por la puerta con los ojos llenos de ira y repugnancia dirigida hacia el rubio. No contenta con lo que ya habia conseguido, Yuna decidió intentar darle lecciones de moral al Uchiha, que lejos estaba de callarse cuando Eri no estaba. Escudarse en el amor es lo más bajo. El amor no nos hace debiles, eso es una tonteria inventada por debiles para no sentirse mal. Es lo que mueve el mundo, el amor por tu hogar, por tus amigos, por tu pareja. Si de verdad le hubieras amado, lo hubieras detenido antes de que hiciera algo de lo que se pudiera arrepentir, pero no lo hiciste, lo dejaste pasar. Hay pocas cosas peores que hacer algo malo y es no hacer nada cuando estas viendo que alguien hace algo malo. Finalmente, la mujer se iria dejandole al chucho antes de salir por la puerta. Quien se quedaria ahi mismo gruñiendole triste a la puerta y arañandola de vez en cuando dejando claro que queria salir. Nabi suspiro y se levantó para echarse en su sofa. De cara a la puerta. Habia poco más que pudiera hacer, con la pierna como la tenia y la cabeza hecha papilla. ¿Debia salir a buscar a Eri? ¿Querra ella hablar con él? De todas formas tenia que tirarle a Mike, no se podia quedar allí, era alergico a los perros llorones y este estaba batiendo records. Dejó de arañar la puerta para lloriquear dando vueltas por la habitación. Seria mejor esperar a que se le enfriaran los pensamientos a la muchacha, ademas no sabia a donde habia ido. ¿Qué debia hacer? RE: Ecos del pasado - Uzumaki Eri - 23/09/2015 Después de estar casi dos horas sentada bajo el árbol, sus huesos comenzaban a quejarse por la falta de actividad y el daño que estaban recibiendo por el agua de la lluvia, así, la kunoichi del remolino bajó del árbol y tomó dirección a su casa, con un paso lento, aún con la lluvia cayendo sobre ella. Tenía la pequeña esperanza de que él saliese a buscarla, pero después de una hora allí, recordó que tenía la pierna en bastante mal estado, así que desechó su deseo de la búsqueda del rubio, intentando también desechar su estúpido recuerdo de la cabeza. Pero le resultaba jodidamente difícil. Una vez en su casa, cerró con llave la puerta y fue directa a su cama, quitándose toda la ropa llena de barro y agua. Porque llevaba su ropa, la ropa del Uchiha, y eso hacía que se sintiese peor a medida que pasaba el tiempo mirando el símbolo del clan. Una vez desnuda se metió en su cama y se tapó con sus sábanas hasta la cabeza, comenzando a llorar de nuevo. No iba a volver a hablarle, no quería saber nada de él. Que llevase a cabo su venganza contra el jefe del orfanato y que se convierta en el mejor shinobi de Uzushio, así se alegraría por él y ella saldría de su vida en toda totalidad. Sin embargo el dolor de su pecho no se iba, acababa de crear un vacío en él que era imposible de llenar. ''Estúpido Uchiha, estúpido Nabi...'' Y así, el día que decidió recordar cosas de su pasado fue el día que arruinó su presente. |