Solsticio de sangre - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: País de la Tormenta (https://ninjaworld.es/foro-pais-de-la-tormenta) +--- Foro: Tierras de Llovizna (https://ninjaworld.es/foro-tierras-de-llovizna) +---- Foro: Yachi (https://ninjaworld.es/foro-yachi) +---- Tema: Solsticio de sangre (/tema-solsticio-de-sangre) |
RE: Solsticio de sangre - Amedama Daruu - 2/11/2020 Daruu miraba fijamente la mano de Yota con un nada disimulado estupor. «¿¡Pero qué hace este ahora!?» El mayordomo no tardó en venir a arreglar el estropicio que su compañero de misión había causado. Daruu se apartó ligeramente para facilitarle el trabajo. Hada le dio al Hyūga la localización de la casa de Negoba, pero se negó en rotundo a establecer un toque de queda. El amejin estuvo a punto de contestar, pero fue interrumpido por Yota, y luego la conversación derivó a otro lugar. «Esta demente es capaz de sacrificar a los suyos por la celebración de una fiesta... no sé si está puesto a dedo o si en Yachi se elige al alcalde democráticamente, pero si es el primer caso creo que Dragón Rojo se equivocó de objetivo.» «De cualquier forma, Yui sabrá de esto en cuanto vuelva a la aldea.» RE: Solsticio de sangre - Sasagani Yota - 4/11/2020 Rápidamente Hada llamó a su mayordomo o lo que fuera el tal Aru para arreglar el estropicio que acababa de crear. Pude sentir como Eri y Daruu observaban sorprendidos, incluso a mi se me ruborizaron las mejillas, muerto de la jodida vergüenza. Me levanté para que aquel hombre pudiese limpiar los restos de cristal y secar el zumo desperdigado por la mesa. — Lamento lo sucedido, y-yo... no sé qué me ha pasado Era una mentira, claro, en realidad era muy consciente de lo que había pasado. En cualquier caso, la reunión seguía adelante y Hada seguía con los detalles, recalcando que los cuerpos de las víctimas desaparecidas no habían sido hallados y que se negaba en rotundo a establecer un toque de queda, no en la fiesta de la cosecha esa. Tuve que llevarme una mano al mentón, confuso. «Es demasiado arriesgado...» — ¿Qué sabemos de Waka-san? — pregunté al sentir la mirada de Hada como si esperase algo de mí — Yo podría ir a mirar a la tienda donde sucedió su desaparición para ver si hay alguna pista o algo así. además, creo que sería bueno poder hablar con su mujer o sus hijos... no sé, algún familiar. Alguien cercano, vaya Aquel hombre fue el primero, quizás el asesino o agresor o como se le pudiese llamar dejase más cabos sueltos la primera vez que la segunda o la tercera. RE: Solsticio de sangre - Sama-sama - 7/11/2020 —¿Qué sabemos de Waka-san? —preguntó el de Kusagakure—. Yo podría ir a mirar a la tienda donde sucedió su desaparición para ver si hay alguna pista o algo así. además, creo que sería bueno poder hablar con su mujer o sus hijos... no sé, algún familiar. Alguien cercano, vaya. Pero Hada negó con la cabeza, sombría. —El señor Kuro no tiene familia conocida. Era un antiguo soldado, ahora retirado después de sufrir una grave lesión que le impidió seguir con su oficio, y al parecer sólo se debía a cultivar y vender sus calabazas. Pero encontrarás su casa y su tienda junto a los campos de cultivo que hay al oeste del pueblo. En ningún lugar crecen las calabazas como allí —añadió, con una suave sonrisa. Entonces entrelazó los dedos sobre la mesa y los miró a todos con intensidad—. Por favor, tened cuidado ahí fuera. No tenemos ni idea de lo que está pasando, pero... La cosa no pintaba bien, nada bien. Y la siguiente luna llena se acercaba a un ritmo vertiginoso, coincidiendo, precisamente, con la Fiesta de la Cosecha de la que tan orgulloso se sentía el pueblo de Yachi. RE: Solsticio de sangre - Uzumaki Eri - 8/11/2020 Eri escuchó con atención como Hada les informaba a cada uno sobre los tres desaparecidos. Miró a sus compañeros, tragó saliva y puso ambas manos sobre la mesa. —Gracias por toda la información, Hada-san; es muy importante para nosotros —agradeció, primeramente, la Uzumaki, luego se giró a Daruu y a Yota—. Deberíamos ir a investigar, lo que no sé... Bueno —se rascó la mejilla—. ¿Nos separamos y luego comentamos lo que hayamos descubierto? ¿O vamos todos juntos? —preguntó. »Si nos separamos, yo tengo un sello para informarnos desde lejos. Recordó el Sello de la Hermandad. RE: Solsticio de sangre - Sasagani Yota - 10/11/2020 —El señor Kuro no tiene familia conocida. Era un antiguo soldado, ahora retirado después de sufrir una grave lesión que le impidió seguir con su oficio, y al parecer sólo se debía a cultivar y vender sus calabazas. Pero encontrarás su casa y su tienda junto a los campos de cultivo que hay al oeste del pueblo. En ningún lugar crecen las calabazas como allí Hada había empezado con la explicación sobre el que parecía ser un agricultor solitario en Yachi. Vamos, lo que viene siendo una víctima perfecta. Por favor, tened cuidado ahí fuera. No tenemos ni idea de lo que está pasando, pero... — Espero que pronto sepamos qué diantres pasa aquí —Gracias por toda la información, Hada-san; es muy importante para nosotros Entonces fue la uzujin la que intervino mientras yo le daba las últimas vueltas a lo que acababa de decir Hada. ¿Nos separamos y luego comentamos lo que hayamos descubierto? ¿O vamos todos juntos? »Si nos separamos, yo tengo un sello para informarnos desde lejos. — ¿Un sello? — pregunté dirigiendo la mirada a la pelirroja — Comprenderás que tenga mis reservas si no te explicas un poco más RE: Solsticio de sangre - Amedama Daruu - 12/11/2020 «¿Un sello, eh? Interesante...», pensó Daruu. Sintió un pequeño cosquilleo en la nuca. —¿Un regalo de Datsue, Eri? —sonrió Daruu—. Si vamos a hablar de técnicas, mejor que salgamos fuera. —Daruu se dirigió a Hada e hizo una pequeña reverencia tras levantarse—. Gracias por la ayuda, señora Hada. Debemos marcharnos para acabar con el problema más pronto que tarde. El Hyūga no esperó a que sus compañeros le siguieran, pero aguardaría su llegada a una distancia prudencial de la casa del alcalde. No levantaba el ojo de aquél guardia cabrón que sin duda le habría lanzado una maldición silenciosa. O en voz alta. RE: Solsticio de sangre - Sama-sama - 15/11/2020 Hada inclinó la cabeza, afable y visiblemente preocupada. —No hay de qué. Por favor, me gustaría ser la primera en conocer cualquier información que recabéis. Lo último que querríamos es dispersar el terror por todo Yachi, bastante tienen ya... —solicitó, antes de que los tres shinobi abandonaran la mansión. No preguntó nada acerca del sello del que hablaba la kunoichi de Uzushiogakure ni indagó más de la cuenta, prefería dejar trabajar a los shinobi de forma libre. Con todo dicho, Eri, Yota y Daruu abandonaron el lugar bajo la afable atención del mayordomo, que les acompañó hasta la puerta. Allí, y tal y como sospechaba Daruu, Natsu, el guardia con el que se había enfrentado hacía unos pocos minutos le miró con muy mala cara. No fue así con su compañera, que, tensa como una estaca, se ruborizó con una tonta risilla. —A... ¡Adiós, Amedama! ¡Espero que nos veamos de nuevo! —exclamó, agitando el brazo sobre la cabeza. —¿Puedes dejar de hacer el ridículo, Mai? Él... ¡AY! Su compañero acababa de llevarse un sonoro golpetazo. RE: Solsticio de sangre - Uzumaki Eri - 17/11/2020 Eri inclinó la cabeza y se despidió de Hada, sintiéndose algo mal por haber desconfiado de ella. No obstante, quería intentar, por todos los medios, hacer bien esta misión por sobre todas las cosas. Así pues, abandonó el lugar junto con sus dos compañeros guiados por el mayordomo de la solicitante. Arqueó una ceja ante la vivencia después, ya que la acompañante del guardia, ¿Mai? Había dicho adiós a Daruu de forma un tanto... Efusiva. Igualmente, fuera de las puertas de la mansión y un tanto más alejados de allí, Eri habló con sus compañeros. —Si nos vamos a separar, lo mejor es estar comunicados por si acaso necesitamos decirnos algo urgente, para ello, tengo un sello... Creado por Datsue —informó, por si las moscas—, que nos permite hablar a distancia entre los tres: yo os lo coloco y, gastando un poco de chakra por el sello, podemos comunicarnos sin problema —explicó rápidamente—. ¿Qué me decís? ¿Lo usamos? RE: Solsticio de sangre - Amedama Daruu - 17/11/2020 Daruu se encogió de hombros y se acercó a Eri. Se dio la vuelta, se sujetó la coleta con ambas manos y tras recogerla un poco la echó hacia un lado. Allí, junto al ideograma 糸, había escrito un pequeño número nueve. —Ponlo bajo el que ya tengo —dijo—. ¿Se pueden tener varios, por cierto? ¿No habrá problemas? No tengo ni idea de cómo funciona esto. Yo lo uso y ya está. RE: Solsticio de sangre - Sasagani Yota - 19/11/2020 Sin más que charlar o añadir, Hada nos invitó a que empezáramos con la búsqueda de pistas e información que a ellos se les podría haber pasado de largo. Cada uno de los ninjas íbamos a investigar cada una de las 3 desapariciones conocidas hasta la fecha para agilizar el proceso lo máximo posible. Fuera nos encontramos de nuevo el par de guardias y la muchacha volvió a derretirse al ver el amejin pasar mientras el otro trataba de hacerla entrar en razón. Yo pasaba de largo, con las manos en los bolsillos del chaleco y sin prestar demasiada atención. En el exterior, Eri insistió en aquel sello que mencionó hacía unos instantes en la sala donde nos reunimos con la alcaldesa. — Ah, ¿que ya tienes uno? Me mostré sorprendido cuando Daruu, al apartarse su coleta desveló un sello, al parecer el mismo del que hablaba Eri, pero por o que decía no era de la pelirroja el sello que lucía, igual fuese de Datsue, el auténtico creador de aquella cosa. — Vale, ¿me puedes explicar ya de qué va esto? No es que no quiera que me lo pongas, simplemente no sé qué hace ni como funciona ni nada... Por lo que dices es una especie de comunicador que funciona con chakra, ¿no? ¿qué rango de conexión tiene? ¿cuanto dura? Empezaba a ponerme nervioso cuando mi mente iba un poco más allá. — Además... Si por lo que sea la Morikage descubre que una uzujin me ha marcado me gustaría poder explicarle porque antes de que entre en cólera RE: Solsticio de sangre - Uzumaki Eri - 19/11/2020 A Eri no le sorprendió que Daruu tuviera uno, es más; creía haber escuchado a Datsue hablar con él a través de él, por lo que sus ojos se posaron en el kusajin. Quien, al parecer, sí que se hallaba sorprendido porque el amejin tuviera uno. — Vale, ¿me puedes explicar ya de qué va esto? No es que no quiera que me lo pongas, simplemente no sé qué hace ni como funciona ni nada... Por lo que dices es una especie de comunicador que funciona con chakra, ¿no? ¿qué rango de conexión tiene? ¿Cuánto dura? Antes de comenzar a explicarle la funcionalidad del sello para tranquilizar a su compañero de misión, éste prosiguió: —Además... Si por lo que sea la Morikage descubre que una uzujin me ha marcado me gustaría poder explicarle porque antes de que entre en cólera. —Tranquilo, Yota, yo te explicaré todo —intentó conciliar ella. No le apetecía empezar una guerra campal allí mismo cuando había vidas en juego—. Esto —se señaló uno de los que ella tenía—, te permite hablar con aquellos que tienen el mismo número de sello que el tuyo, activándolo con un poco de chakra. Tiene la misma función que un comunicador: hablas a distancia con tus compañeros. Ellos te escucharán a ti, no lo que se encuentra a tu alrededor ni nada por el estilo, y dura... —sopesó su respuesta—. Unos meses, pero si quieres, puedo retirártelo una vez termine la misión, soy experta en Fūin... »Si quieres, Daruu y yo podemos hacerte una demostración, yo me coloco un sello a mí —Eri hizo una secuencia de sellos y se lo colocó al lado del que acababa de enseñar, con el número seis de subíndice—. Se lo coloco a Daruu —hizo lo propio con su compañero amejin—. Y ahora, si Daruu quiere hablarme a mí por el sello, solo tiene que activarlo. Tomó aire. —¿Algo más? RE: Solsticio de sangre - Amedama Daruu - 19/11/2020 Eri ignoró su pregunta y se centró en explicarle a Yota el funcionamiento del sello. Daruu ignoró la de Yota y arrugó el morro, pero no dijo nada. Se dejó hacer y se colocó bien el pelo. Eri sugirió hacer una demostración. En los labios de Daruu se reflejó, por un momento, una ligera sonrisa. —Vale, pero para probarlo bien deberíamos estar algo más lejos —dijo—. Si no, podría ocurrir como con los micrófonos: un acople. ¿Sabéis lo que es? —Se encogió de hombros—. Bueno, da igual. El caso, voy a alejarme un poco y lo probamos. El Hyūga se dio la vuelta y se ocultó tras un callejón cercano, apartándose lo suficiente. Rio en una pequeña carcajada silenciosa antes de aclararse la voz. —¡¡Sasagani Yota!! ¿¡Qué haces perdiendo el tiempo en Yachi!? —La voz de Kintsugi salió por el sello comunicador de Eri—. ¡¡Creía que te había dicho que quería todos los retretes de Kusagakure como una patena!! —Hizo una pausa—. ¡¡Con la lengua!! RE: Solsticio de sangre - Sama-sama - 22/11/2020 Eri le colocó el Sello de Comunicación a Daruu, quien se alejó momentáneamente para hacer una curiosa demostración de su funcionamiento... con cierto toque original. El escuchar de repente la voz de su Morikage debió causarle un verdadero shock emocional a Yota, porque se quedó congelado en el sitio como si acabara de ver el fantasma del mismísimo Moyashi Kenzou frente a él. Ahora era el momento de decidir. El de Kusagakure se enfrentaba a dos elecciones: Si quería tener ese mismo sello para comunicarse con sus compañeros o si debían pasar directamente a la acción. RE: Solsticio de sangre - Uzumaki Eri - 23/11/2020 Eri no se esperaba que Daruu hiciera una demostración tan pintoresca: la voz de la Morikage resonó por su sello y ella pegó un brinco, asustándose por un momento al pensar que algo había fallado con el sello, pero no era así: Daruu estaba modificando su voz para que se pareciera a la suya. Y Yota parecía en shock por ello. —¿Yota...? —intentó llamar su atención—. Y... bueno, ¿quieres el sello? Luego te lo quitaría, solo lo que dure la misión... —insistió. RE: Solsticio de sangre - Amedama Daruu - 24/11/2020 Daruu se aclaró la garganta. Fue perfectamente audible por el sello de Eri. —Mientras nuestro amigo el aracnófilo se decide, yo marcho a investigar ya la casa de Negoba —dijo, y cortó la comunicación. «Vamos a ver... una familia de gatos callejeros, ¿eh?» · · · —Por última vez, Yuki... ¡te digo que te necesito de verdad! —dijo Daruu, pero su amigo seguía dándole la espalda. —¿Nya sí? ¿Y desde nyace cuánto que nyo me invocas? —contestó el gato blanco, indignado. Si no hubieran estado en un tejado, quizás la gente se habría quedado mirando. Bueno, quizás se les hubieran quedado mirando igual, pero no había nadie en las calles. A juzgar por la relación de los chiquillos de antes, por miedo. Con razón. «Ojalá la alcaldesa también lo entendiese tan bien.» —Es verdad, Yuki. Lo siento, de verdad. Pero ya te lo he dicho, hay gente muriendo. ¡Por favor! ¿Podemos hablar de esto más tarde! El gato se giró y se le quedó mirando con aquellos dos ojos azules. —Vale. ¿Qué querías que hiciese, entonces? Daruu señaló la casa en la cima de la colina. —Según Hada, Negoba salía a menudo a alimentar a una familia de gatos callejeros que viven cerca de su casa. Búscalos y trata de hablar con ellos. Intenta sacarles algo de información. —Mientras el gato saltaba del tejado y corría en dirección a la colina, Daruu echó la vista hacia arriba, hacia la casa. El Hyūga activó su Byakugan y registró su interior. |