¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Versión para impresión +- NinjaWorld (https://ninjaworld.es) +-- Foro: Uzushiogakure (https://ninjaworld.es/foro-uzushiogakure) +--- Foro: Costas del Remolino (https://ninjaworld.es/foro-costas-del-remolino) +--- Tema: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi (/tema-entre-la-espada-y-la-pared-usa-kawarimi) |
¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 25/04/2019 Plac. Plac. Plac.
Hacía sol. De esos que queman si no te echas protección solar. De esos que te hacen cobijarte bajo una sombra, como si buscases refugio en una tormenta, o de los que te obligan a refrescarte en la orilla cada cinco minutos. Estaban en Ascua, al fin y al cabo. Y estaban en Uzu. Plac. Plac. Plac.
Eran las tres de la tarde y la playa estaba a rebosar. Llena de civiles. Llena de ninjas retirados. Algún que otro de descanso. Unos pocos que aprovechaban su día libre para seguir torturando su cuerpo y volverse más fuertes. Mejores. Plac, plac, plac.
Uno de estos últimos se encontraba luchando contra sí mismo, literalmente, cerca de la orilla. Allí donde la arena estaba humedecida y el suelo era más firme y liso. Había dibujado un gran círculo a su alrededor con un palo, cual círculo de lucha en sumo, e intercambiaba golpes con su Kage Bunshin empuñando un arma de lo más peculiar. ¡Plac, plac, plac!
—¡La estás blandiendo mal, joder! —¡Es que es muy pesada! —¿Pesada? ¡Que llevas dos meses levantando pesas, pedazo mierda! ¿Cómo que pesada? —B-bueno… Es que tengo que acostumbrarme al Ōkunai. Además, ¡ni que tú la empuñases bien! —¡No cambies de tema de conversación! Que estamos hablando de ti, no de mí. ¡Siempre haces igual, macho! Los dos chicos siguieron refunfuñando por un rato, aprovechando para recuperar algo de aliento. Estos chicos vestían ambos un bañador rojo, con un cordón de un azul oscuro. Tenían la bandana de Uzu anudada al brazo derecho, y los ojos iluminados por el Sharingan. Al lado, fuera del círculo, reposaba una bolsa de playa. RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Sasaki Reiji - 27/04/2019 Plac. Plac. Plac.
Todavía no había salido el sol cuando la canción de la forja empezó a sonar. Los primeros días, el ruido del martillo golpeando el acero era tan solo un ruido molesto e inevitable, pero conforme pasaban los días y las horas, tu cerebro se acostumbraba tanto al sonido, que empezaba a disfrutarlo como si fuera una canción. O quizás... Solo era demasiado temprano como para que el cerebro funcionase como debería. Plac. Plac. Plac.
Quizás todo hubiese sido mas sencillo con un clon. Dos tú golpeando el acero de forma ritmica. Si, el trabajo saldría muchísimo más rápido, sin embargo... Para alguien como yo, soñar si quiera en la posibilidad de hacer un clon ya era algo inalcanzable. Lo dicho. Mi cerebro no funcionaba del todo bien. Plac, plac, plac.
No sabía cómo mi padre se había acostumbrado a ese sonido hasta el punto de que parecía no escucharlo. Quizás era el esfuerzo para sobrellevarlo lo que le había dejado totalmente calvo. A mi me gustaba mi pelo... ¡Plac, plac, pla...
El sonido del martillo de mi padre cesó de repente. Algo le había hecho levantar la cabeza del trabajo, y al darme cuenta de que algo en la melodía estaba fallando, y que en ese momento yo estaba tocando un sólo de martillo, pare de golpe y levante la cabeza. —Nos vamos a la playa, soltad esos martillos, y no quiero escuchar ninguna queja Apoyada en el marco de la puerta que conectaba la casa familiar con el negocio familiar, se encontraba una figura femenina ataviada con ropa de playa, un sombrero de paja con una flor amarilla y unas gafas de sol. Es figura era mi madre, y en aquella casa, mandaba ella y nadie la contradecía. A su lado, con ma cabeza agachada, una de las criadas vestida con un yukata marrón, sostenía entre sus manos una cesta de mimbre. Ma verdad es que desentonaba totalmente con la apariencia de mi madre, pero la cesta que sostenía, era una señal de que todo estaba preparado. Como para quejarse... De hecho, mi padre, levanto su otra calva del asiento sin mediar palabra, y fue a cambiarse. Yo también hice lo mismo. De tal palo, tal astilla. Pero esperaba no quedarme sin pelo en la cabeza. Me vestí con un bañador azul con estampado de palmeras blancas y una camisa naranja con florea de color verde. Antes de darnos cuenta, estábamos vestidos y en frente de la costa. Menuda imagen. Los tres llevábamos los brazos al descubierto, por lo que podía verse el tatuaje que llevábamos. La Mafia en la playa. Sobretodo por que la criada, que seguía con su Yukata marrón, desentonaba totalmente con la temática playera. Encima y por si fuera poco, la pobre mujer no solo tenia que cargar con la cesta, si no que además, cargaba con las toallas y la sombrilla. Yo no podía sentir mas vergüenza. O quizás si, pero ni quería. Fue la pobre mujer del Yukata la que busco el sitio adecuado y coloco las toallas en la arena así como la sombrilla. Todo un espectáculo que no pasó desapercibido, pero a mis padres, pareció no importarles en absoluto. Suspiré mientras me sentaba sobre la toalla bajo la sombrilla, y agachaba la cabeza para no ver a nadie. Por que si no los ves, ellos a ti tampoco. ¿Verdad? RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 27/04/2019 Verdad. Al menos, una buena parte de las veces. Datsue seguía enfrentándose a sí mismo, y cada vez la pelea se iba caldeando más y más. —Pff… Mírate, eres un puto blandengue. ¡Coge el arma como se merece, hostia! ¡No puedes ni a dos manos! —No empieces, eh. No empieces —dijo el Datsue real. Pero el clon no desistió. Le miró de arriba abajo, con cara de asco. —Mírate… ¡Mírate! ¡No me extraña que Aiko te dejase por otro! ¡Vaya fiasco que estás hecho! —Hijo de… ¡¡HIJO DE PUTA!! Datsue rugió. Un grito de guerra. Un paso, dos pasos, y le rebanó el puto pescuezo a aquel cretino. O lo hubiese hecho, si no se hubiese apartado en el último momento dejándole un regalo en forma de zancadilla. Se dio de bruces contra la arena, levantándola y salpicando con ella a varias personas. Entre ellos a un joven chico bajo una sombrilla. —¡JIA JIA JIA! Oh, Datsue, Datsue, ¿cómo puedes caer en tu propia trampa? Se llama táctica de desestabilización, amigo mío. ¡Parece mentira! ¡JIAAA JIA JIA JIA JIA! —Mira, te metes tú táctica de mierda y tu risita de imitación por el culo. ¿¡Vale!? —Hizo que desapareciese en una nube de humo—. ¡Y a tomar por culo tanta tontería, hombre ya! RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Sasaki Reiji - 27/04/2019 Yo quería a mis padres. De verdad que los quería. Lo juro. Sin embargo en aquel momento solo podía... Sentir verguenza. Se habían metido en el agua y se estaban comportando como adolescentes recién enamorados. Que no me parecía mal pero... —Tierra trágame. Era solo una frase hecha inocente. Unas simples palabras sin nada mas, sin embargo... Sin embargo un montón de arena cayo sobre mi, sobre la criada que estaba cuidando de las cosas y si no hubiese sido por ella, también habría caído sobre la comida. —¡QUE SOLO ERA UNA!... Frase hecha... Me giré casi enfurecido para encarar al culpable, sin embargo, al ver su cara, al reconocer de quien se trataba, no solo baje el tono se voz, si no que además agache la cabeza y me di la vuelta esperando que no me hubiera reconocido. Si no puedes verlos ellos a ti tampoco. Y por algún motivo, no quería volver a verlos. No sólo a él. También a todos aquellos con los que colaboré aquel día del torneo. Pero en este caso, a él era a quien menos quería ver. —Sakura-chan, creo que es hora de comer Dije a la criada rápidamente mientras volvía a mi sitio, para hacer como que no le había visto. —Pero señorito Reiji... —No pasa nada, yo tengo hambre Por favor, dioses de Oonido, si de verdad existis, que no me haya reconocido... RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 28/04/2019 Saben los dioses que Datsue no era bueno recordando nombres. Pero, dígase una cosa en su favor: jamás olvida una voz, menos un rostro. Por eso, cuando oyó a alguien gritar justo cuando cayó levantando una ola de arena, se quedó pensativo. ¿Dónde la había escuchado? ¿Cuándo? Porque sabía que la había escuchado antes, y algo le decía que había sido en un momento importante. Sudoroso y sin aliento, al Uchiha le tomó unos largos momentos levantarse, enterrando la punta de la hoja en la arena para usar el Ōkunai a modo de bastón. Peinó las primeras toallas hasta detenerse irremediablemente en la persona que sin duda estaba buscando. Tendría unos quince años, de figura esbelta y un pelo liso y oscuro que llevaba recogido en una coleta alta. Unos mechones le caían a ambos lados del rostro, desde el flequillo. Muchos dirían que lo que más destacaba de esta persona eran sus ojos, verdes como un campo de trigo en el atardecer. Pero Datsue discrepaba. Datsue pensaba que era su sonrisa. Por no hablar de sus… «Joder… ¡Está tremenda!» Datsue no era de los que creían en el amor a primera vista, pero se encontró a sí mismo con una falta de aliento que nada tenía que ver con el cansancio del entrenamiento. Era preciosa. Era guapísima. Y aún sin conocerla sabía que era una chica de una personalidad arrebatadora. Esas cosas se sabían. Se veían. Y, hablando de ver… «Oh… ¡Mierda!» La chica acababa de pillarle mirándola embobado. «¡Rápido! ¡Disimula! Haz como que estás buscando a alguien… De hecho, ¡qué coño! ¡Si estabas buscando a alguien!» Rápidamente se arrepintió de esto. ¡Tenía que haberle echado huevos! ¡Saludarla! ¡Sonreírle al menos! «Qué imbécil… ¡Qué imbécil!» Por suerte, la fortuna no le había dejado del todo del lado. Y es que, contra todo pronóstico, sí encontró una cara conocida. La oportunidad perfecta para que el disimulo se convirtiese en realidad. —¿Reiji? ¿Eres tú, compañero? ¡Ya me había parecido oírte! —exclamó, sonriente, mientras se acercaba a él—. ¿Qué tal todo? ¡No nos vemos desde el Chuunin, joder! —«Eso, eso. Grita para que te escuche y vea que realmente solo estabas buscando a un viejo conocido...» RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Sasaki Reiji - 28/04/2019 —¿Reiji? ¿Eres tú, compañero? ¡Ya me había parecido oírte! Definitivamente los dioses de Oonido me odiaban. Eso, o alguna anciana rara, misteriosa y siniestra me había echado una maldición cuando era un bebe, por que mi mala suerte, empezando por mis nulas habilidades de shinobi, rozaba lo inexplicable y sobrenatural. — ¿Qué tal todo? ¡No nos vemos desde el Chuunin, joder! Tenia dos opciones: Ignorarlo o mentirle. La primera era un tanto complicado, ya que había alzado la voz y todos los miraban. Aunque lo peor de todo no eran los gritos, era que llevaba una jodida arma en la mano, y parecía que buscaba a alguien para cargarselo. Mi segunda opción era la mejor, sin embargo, mis habilidades para contar mentiras eran igual de buenas que para hacer una técnica con mas de dos sellos: Nulas. Pero no tenia más remedio que intentarlo. —¿Tu...quien eres?¿Nos conocemos de algo? No se a que te refieres, yo solo soy el hijo de un herrero... Como había dicho, mis dotes de mentiroso no eran las mejores, de hecho, me di cuenta tarde de haber mencionado que mi padre era herrero aquel día que conocí a Datsue. Solo rezaba para que su memoria fuese igual de mala que mis capacidades. ¿Pero para que rezaba realmente? Si al fin y al cabo, los dioses me odiaban. RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 28/04/2019 Hubo un momento en que hasta lo dudó. Hasta dudó de si realmente aquel chico no era más que un tipo jodidamente parecido al Reiji que él había conocido. Pero había algo en su manera de hablar… Era… Era como cuando Akame mentía. Pero, aún así, estaba tenso. Si realmente se había confundido, y la chica que había visto estaba prestando atención, quedaría todavía más en ridículo. —¿Cómo que no eres…? —Entonces cayó en la cuenta—. Claro que eres un hijo de herrero. ¡De los Sasuki! ¡Saski! Digo… ¡Sasaki! RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Sasaki Reiji - 29/04/2019 —¿Cómo que no eres…? —La voz de datsue se detuvo un segundo antes de disparar tres flechas al aire—. Claro que eres un hijo de herrero. ¡De los Sasuki! ¡Saski! Digo… ¡Sasaki! Al menos acerto una, quizás por suerte, quizás simplemente lo recordó en el momento adecuado. Todo aquello era un problema. Había dejado la bandana para tener una vida normal, y no quería tener que dar explicaciones, pero por algún motivo, no quería tener que darle explicaciones a él. —Emmm si, Sasaki, Sasaki Reiji, pero...¿Tu quien eres? ¿Nos conocemos?—La bola de nieve que venía rodando hacia mi parecía cada vez mas grande y lo peor era que la culpa la tenia yo, pero tenia que continuar con mi "estrategia".—¿Eres un cliente habitual o algo? ¿Lo conoces tu Sakura-chan? Le pregunté a la criada para meterla en el mismo fregado, aunque las consecuencias solo las iba a pagar yo, por que, al fin y al cabo, ella no iba a mentir, solo a contestar a mi pregunta. —No señorito Reiji, a mi este chico no me suena...— Dijo con voz tímida la muchacha. Yo mientras pensaba algo. Cierto, no era muy inteligente, pero en un momento de "peligro" como aquel, quizás pudiera sacar a relucir aunque fuese una táctica ruin y cobarde. Si, ¡eso era! —Pero mas importante que quienes somos... ¿Por que vas por ahí con un arma en la mano en un lugar turístico? Asustas a la gente, mira como te esta mirando esa chica Distracción. O mejor dicho, centrar la atención en un tema diferente. Quizás eso funcionase. Aunque no las tenía todas conmigo... RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 30/04/2019 Datsue lo estaba flipando. Era la primera vez en su vida que alguien no le reconocía tras conocerse. Y no era como si se hubiesen cruzado medio minuto un día en una cafetería, precisamente. Sino que habían luchado codo con codo contra la revuelta kusareña. Se habían cubierto las espaldas. Habían sido... camaradas. Pero el muy cabrón incluso dijo que iba asustando a la gente, haciendo alusión a una chica. Precisamente a aquella chica. Datsue no se atrevió a mirarla. Sabía que ya era una batalla perdida. «Asco de vida...» —Pero, ¿qué me cuentas, compañero? —dijo, arisco—. Si aquí vienen muchos shinobis a entrenar. Mira, no sé si te llevaste un golpe en la cabeza y te olvidaste de todo, o… —Ah, ya entendía—. Es por Hanabi, ¿verdad? Te echó la bronca por delatar que era el jinchuuriki a media Kusa, y te ordenó que tuvieses más cuidado para la próxima. ¡Coño, a ver empezado por ahí! Pero que estamos dentro de la Villa, hombre, y no hace falta que hagas como que no me conoces. ¡No pasemos de un extremo al otro! Sí, tenía que ser aquello. Era imposible que no se acordase de él. Imposible. RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Sasaki Reiji - 30/04/2019 Había un dicho, del que ni quería acordarme en aquel momento, que hablaba de lo mal que podían terminar las mentiras. En mi caso, muy mal, por que siempre fui un pésimo mentiroso. —Pero, ¿qué me cuentas, compañero? Si aquí vienen muchos shinobis a entrenar. Tenia razón, pero bueno, yo tenia que intentarlo. Y si, le había distraído del tema principal durante unos hermosos momentos, sin embargo mi alegría no duro mucho. —Mira, no sé si te llevaste un golpe en la cabeza y te olvidaste de todo, o... Es por Hanabi, ¿verdad? Te echó la bronca por delatar que era el jinchuuriki a media Kusa, y te ordenó que tuvieses más cuidado para la próxima. ¡Coño, a ver empezado por ahí! Pero que estamos dentro de la Villa, hombre, y no hace falta que hagas como que no me conoces. ¡No pasemos de un extremo al otro! Quizás... ¡Si! Quizás la mejor solución era seguirle el rollo. En parte no era mentira del todo. Yo había ido a hablar con Hanabi y no al revés, y tampoco hablamos sobre eso, si no sobre mi renuncia, pero bueno... Pequeños detalles insignificantes sobre los que no tenia ganas de hablar con nadie. —E...Eso es, me has pillado. Estaba practicando, pero a ti es difícil pillarte ¿Verdad? Perdona eh, tenia que intentarlo. Sinceridad ante todo, decían... No seria la mía. RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 30/04/2019 Vaya, ¡así que era eso! No había muchas más opciones, la verdad. O le estaba tomando el pelo —cosa que por un momento pensó y ya empezaba a palpitarle la vena de la frente—, o se había llevado tal golpazo en la cabeza que tenía amnesia. —Joder, ¡cómo te pasas tío! Vale que aquello fue una cagada… Pero mira, al final lo iban a saber igual. No te tortures, tío —¡Hacer como si no le conociese! A menudos extremos llegaban los Gennins de hoy en día para redimirse—. Siento habérselo dicho a Hanabi —dijo, sincero—. No era mi intención dejarte en mal lugar, pero no podía ocultar que Kusa podía conocer mi identidad y me preguntó directamente por el responsable. No podía mentirle. RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Sasaki Reiji - 30/04/2019 —Joder, ¡cómo te pasas tío! Vale que aquello fue una cagada… Pero mira, al final lo iban a saber igual. No te tortures, tío. Lo peor de todo era que, aquella cagada, no me torturaba en absoluto. Por no decir que ni siquiera me acordaba de ello hasta que Datsue había sacado él tema para salvar mi mentira. Unas veces los dioses te escupían y otras te sonreían. —. Siento habérselo dicho a Hanabi. No era mi intención dejarte en mal lugar, pero no podía ocultar que Kusa podía conocer mi identidad y me preguntó directamente por el responsable. No podía mentirle. Esa era información que yo no tenia. No hasta ese momento. Tampoco es que importara, por que tampoco tuvo ninguna repercusión. O quizás no la tuvo por que yo mismo entregué mi bandana. Sin embargo, con esta información, y si yo hubiese sido otro tipo de persona, podría haber hecho a Datsue sentirse culpable, aunque tarde o temprano hubiese descubierto la verdad. Sin embargo, yo era buena gente, o solía serlo. —No te preocupes por eso, tampoco fue para tanto. —Mentí de nuevo. —De todos modos no se para que practico, si esto ya no podrá volver a repetirse... No me dí cuenta, eso se me había escapado sin querer, y era una información que no quería dar. Me tapé la boca, pero no a tiempo. Distracción. Había que recurrir de nuevo y rápidamente a la distracción. —Oye, ¿no querrás comer algo? Estábamos a punto de comer ¿Por que no te sientas y comes con nosotros? RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 30/04/2019 ¿Qué no volvería a repetirse? ¿A qué se refería con eso? ¿Y por qué se tapaba la boca como si hubiese hablado de más? Iba a saciar su curiosidad —o a intentarlo preguntando—, cuando el joven shinobi se le adelantó ofreciéndole comida. —Pues… —Tras un duro entrenamiento, llevarse algo a la boca nunca venía mal—. Te lo agradezco, Reiji. ¿Qué me ofreces? Estoy siendo muy estricto con la dieta, así que no sé si lo que tienes se ajustaría a mi plan… de hoy. ¿Si era algo rico en proteínas o hidratos? Eso se adaptaba perfectamente. Si lo era en grasas, ya podía ir dándose media vuelta, antes de que el apetito se impusiese a la fuerza de voluntad. RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Sasaki Reiji - 2/05/2019 —Pues… ¡Bien! Táctica de distracción versión dos: Éxito rotundo. Yo había hablado de mas, pero parecía que el hambre iba a estar por encima de la curiosidad, al menos de momento. Por lo pronto, me había librado de las preguntas a las que no quería contestar. —Te lo agradezco, Reiji. ¿Qué me ofreces? Estoy siendo muy estricto con la dieta, así que no sé si lo que tienes se ajustaría a mi plan… de hoy. —Pues en realidad la comida la han preparado la madre de Sakura, así que no tengo ni idea de lo que han traído... Sakura era la hija mayor de una pareja de sirvientes que vivían en nuestra casa. La madre era una mujer de unos cuarenta y cinco años que se dedicaba principalmente a la cocina. Su marido se dedicaba a cuidar del jardín y del estanque de los peces y Sakura, junto a su hermana, se ocupaban de otras tareas del hogar. Por lo que, si alguien sabía lo que había para comer era ella. —Lo que si es seguro es que estará muy bueno —No se preocupe —Dijo la muchacha mirando a Datsue, y claramente no sabía su apellido, por lo que no se dirigió a él mas que con la mirada. —Aunque el señorito Reiji ya no sea un shinobi, todavía sigue entrenando todas las mañanas, por lo que mi madre todavía prepara... No llegue a tiempo. Cuando quise taparle la boca ya lo había dicho. Mis reflejos no eran tan bueno, ni mi cuerpo lo suficientemente ágil para llegar a tiempo. Además, tampoco era adivino como para saber lo que iba a decir. Había estado todo el rato evitando el tema a propósito, y en un segundo... En un segundo todo se vino a bajo. Ahora si quería que me tragara la tierra de verdad. Por un momento creí que los dioses volvían a estar de mi parte. Era evidente que no. RE: ¿Entre la espada y la pared? Usa Kawarimi - Uchiha Datsue - 2/05/2019 No importaba si sabía bien o no. Lo único que importaba era si se adaptaba a su dieta hipercalórica. Quería coger peso, sí, pero peso en forma de músculo. Y en músculo de calidad. La muchacha que le acompañaba quiso tranquilizarle, asegurando que a pesar de que Reiji ya no era un shinobi, su madre todavía le preparaba… una comida en condiciones, supuso Datsue. Y es que Reiji había corrido a taparle la boca para impedir que siguiese hablando. La mente del Uchiha tardó unos largos segundos en encajar las piezas y en entender verdaderamente las palabras de Sakura. —¿¡C-cóooomooooo!? ¿Qué ya no eres shinobi? —preguntó, con el rostro desencajado por la sorpresa—. Pero, ¿qué ha pasado, Reiji? |