Este foro utiliza cookies
Este foro utiliza cookies para guardar tu información de inicio de sesión si estás registrado, y tu última visita si no lo estás. Las cookies son pequeños documentos de texto guardados en tu ordenador; las cookies establecidas por este foro sólo pueden ser utilizadas en este mismo sitio y no poseen riesgos de seguridad. Las cookies de este foro también llevan un registro de los temas que has leído y cuándo fue la última vez que los leíste. Los administradores NO tienen acceso a esta información, sólo TU NAVEGADOR. Por favor confirma si aceptas el establecimiento de estas cookies.

Se guardará una cookie en tu navegador sea cual sea tu elección para no tener que hacerte esta pregunta otra vez. Podrás cambiar tus ajustes sobre cookies en cualquier momento usando el link en el pie de página.
Otoño-Invierno de 221

Fecha fijada indefinidamente con la siguiente ambientación: Los ninjas de las Tres Grandes siguen luchando contra el ejército de Kurama allá donde encuentran un bastión sin conquistar. Debido a las recientes provocaciones del Nueve Colas, los shinobi y kunoichi atacan con fiereza en nombre de la victoria. Kurama y sus generales se encuentran acorralados en las Tierras Nevadas del Norte, en el País de la Tormenta. Pero el invierno está cerca e impide que cualquiera de los dos bandos avance, dejando Oonindo en una situación de guerra fría, con pequeñas operaciones aquí y allá. Las villas requieren de financiación tras la pérdida de efectivos en la guerra, y los criminales siguen actuando sobre terreno salpicado por la sangre de aliados y enemigos, por lo que los ninjas también son enviados a misiones de todo tipo por el resto del mundo, especialmente aquellos que no están preparados para enfrentarse a las terribles fuerzas del Kyuubi.
#76
Perfecto. ¡Perfecto! —repitió Datsue, conteniendo a duras penas la emoción. Por muy cruel y duro que sonase, sí, estaba emocionado por poder cumplir su misión… asesinando a un hombre. Más tarde le entrarían remordimientos, y llegado el momento, puede que incluso le diese pena. Pero por ahora solo pensaba en su objetivo—. Creo que podría hacer una transformación bastante convincente del monje que vino a recibir a Iekatsu. —No solo su imagen, sino que había oído su voz. Su forma de expresarse—. Y sino alguno que me encuentre por ahí dentro…

Datsue sabía, como siempre sucedía, que no sería tan sencillo. Que algo se torcería en el último momento y tendría que tirar de improvisación. Pero no valía la pena malgastar energía pensando en ello.

Venga, vamos allá —dijo, levantándose y caminando hacia la entrada del templo, con porte regio y paso tranquilo, mientras iba preparando mentalmente qué decir para que le dejasen pasar.
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder
#77
Mientras los dos muchachos deshacían el camino andado en dirección al pequeño sendero que llevaba hasta la entrada del templo, Akame no pudo evitar fijarse en la forma tan diferente de andar que tenían. Su compadre Datsue caminaba con paso seguro, recto, con porte galante y una forma de pisar que parecía dar a entender que todo lo que alcanzaba la vista estaba bajo su dominio. Desprendía un carisma arrollador, una personalidad magnética a la que era difícil resistirse. Él, sin embargo, parecía un junco mecido por el viento; delgaducho, apaleado y siempre ligeramente encorvado. No imponía, ni daba miedo, y no solía suscitar en los demás algo mucho mejor que indiferencia o simple cordialidad.

Sacudió la cabeza. No podía distraerse con aquellos pensamientos.

Subieron por las escaleras que daban acceso al templo y atravesaron las puertas correderas de papel de arroz —abiertas de par en par en ese momento— para internarse en el santuario.

Por dentro, el edificio era tan austero como podía pensarse desde fuera. La primera sala era bastante amplia, con algunas estatuas de dioses menores repartidas en sus cuatro esquinas y una mesa alargada en el centro. El suelo era de madera y había algunas ventanas por las que se filtraba la intensa luz de medidodía.

En torno a la mesa, en el suelo, se encontraban sentados el monje que les había recibido, el señor Iekatsu y la dama Tome. Bebían té de unas parcas tazas de cerámica y conversaban en voz baja, quizás debido al respeto que le tenían a aquel lugar sagrado o simplemente porque la garganta del viejo noble no daba para más. Ni siquiera parecieron advertir la presencia de los ninjas. Entonces...

¡Él! ¿¡Qué hace él aquí!?

El grito provino del otro extremo de la sala, donde junto al marco de una puerta corredera doble se hallaba una figura para todos conocida; era Makoto Masaru, aunque mucho más limpio, peinado y aseado. Vestía un kimono blanco distintivo de los monjes del lugar, y en su rostro se podía ver la palpable sorpresa que le había invadido al encontrarse allí a su antiguo captor.

¡Ha venido a por mí! ¿No es cierto? ¡Decidme! —inquirió, dirigiéndose al anciano monje.

Éste le dedicó un comentario cargado de aprensión.

Os pido que me digáis, Oonoji-sama —le corrigió, severamente, su ahora maestro—. Y no, nuestro noble invitado no ha venido aquí en busca de ti, Makoto Masaru-san, sino de nuestras bendiciones y a presentar sus respetos a los dioses que moran en este templo... Podrías aprender de su ejemplo, ahora que has decidido dedicar el resto de tus días a vestir ese kimono blanco.

El antes noble y ahora religioso, despojado de todos sus títulos y propiedades, tragó con dificultad aquella reprimenda que, en otros tiempos, le habría valido para ordenar que le dieran una buena paliza a quien osara dirigirla contra él.

Sí, Oonoji-sama. Os pido disculpas por mis actos, he sido imprudente y descortés con vos y con nuestro invitado —respondió Masaru, inclinándose en una profunda reverencia.

Akame lo había observado todo desde el otro lado de la sala, junto a Datsue. «Estás de suerte, Masaru-san, no tendrás que soportar las regañinas de este viejo mucho más tiempo...» Luego el Uchiha miró a izquierda y derecha, tratando de identificar el lugar.

A ambos lados de la entrada se extendían sendos pasillos, que rodeaban la sala principal y probablemente daban a las estancias de los monjes, cocinas y demás habitaciones necesarias para garantizar la supervivencia de los habitantes del templo. Por pura cuestión de perspectiva, el jōnin dedujo que si seguían el pasillo y rodeaban por completo la mitad de la sala central, acabarían en el huerto trasero.
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

¿Eres nuevo en el rol? ¡Echa un vistazo a mi Compendio de Buenas Prácticas!
Responder
#78
Por suerte, ningún monje gruñón vino a detener su entrada al templo, encontrándose con las puertas abiertas de par en par para él. Literal y metafóricamente. Dentro, todo era tan austero como aparentaba por fuera. El ambiente ni siquiera estaba sobrecargado con esas hierbas aromáticas que algunos templos tanto le gustaban poner. Tampoco había demasiados elementos en los que perderse: algunas estatuas de dioses repartidos entre las cuatro esquinas; una mesa en el centro —donde estaban Iekatsu, Tome y el objetivo de su Henge—, y poco más.

Makoto irrumpió en escena casi al instante, asustado y sorprendido al reconocer a los nuevos invitados. Tan sorprendido como Datsue, que había abierto la boca de par en par y no daba crédito a lo que veía. O eso interpretó él, al menos, de una manera que esperaba convincente.

Más convincentes fueron las palabras de su maestro, no obstante, al que el Uchiha trató de analizar. Cada palabra, cada gesto… Necesitaba no solo imitar su imagen y su voz, sino hacer una representación fidedigna de su ser si quería tener alguna posibilidad para engatusar a Makoto.

En un momento dado, su vista se desplazó por los pasillos que tenía a cada lado. Tal y como estaba hecho el templo, imaginaba que rodearían todo el edificio por dentro hasta dar al otro lado, justo a la puerta por la que había salido Makoto.

«De primeras mejor disimular un poco. Se supone que vengo para rezar, y como me cuele por uno de los pasillos con él delante va a ser un cantazo».

No muy seguro de cómo hacerlo, y tras lanzarle una mirada a su Hermano, el Uchiha se dirigió a una de las estatuas de los Dioses, arrodillándose frente a ella y bajando la mirada. Esperaría un poco, a ver si Makoto se iba y podía ir luego a buscarle con la transformación hecha. De no ser el caso…

«Tendría que buscar otro en quien hengearme…»
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder
#79
Al ver a Datsue internarse en la sala, Akame dudó por un momento. Los tres personajes que tomaban té no parecieron advertir su presencia, pero Makoto Masaru sí que le vió... Y en su rostro se dibujó la ira más primitiva. «Intuye que hemos venido aquí a por él», supo el Uchiha. Aun así, se esforzó por disimular cualquier emoción relacionada con su verdadero cometido y simplemente caminó con calma hasta colocarse al lado de su compadre. Se arrodilló y realizó una profunda reverencia.

¿Has visto su cara? El muy hideputa seguro que se lo espera... Vamos a tener que ser extra cuidadosos, no podemos fallar ni delatarnos —susurró el jōnin, aprovechando su postura de rezo para que nadie excepto Datsue pudiera escucharle.

Mientras, el sonido de los pasos del antiguo noble se perdió por el pasillo del lado derecho; Akame dedujo que, probablemente, su habitación se encontraría en ese lado del templo.

¿Te vas a hengear en el viejo?

Pasada la tensa situación, el señor Iekatsu, la dama Tome y el maestro del santuario reanudaron su queda conversación. Por lo que los muchachos pudieron escuchar desde su posición, sólo hablaban de la historia de Amaterasu y Tsukiyomi, en la que el regente de Rōkoku parecía especialmente interesado.
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

¿Eres nuevo en el rol? ¡Echa un vistazo a mi Compendio de Buenas Prácticas!
Responder
#80
¿Has visto su cara?

Por supuesto que la había visto. Era la cara de un hombre que no iba a bajar la guardia ni por un segundo. Datsue, no obstante, no cambió su semblante. Permaneció callado, con los ojos cerrados y las manos entrelazadas, como si realmente estuviese rezando.

Era curioso lo mucho que se agudizaban el resto de sentidos cuando uno cerraba los ojos, privándose del más utilizado. Sus oídos, en concreto, captaron los pasos de Makoto saliendo de la sala.

Plac, plac, plac. «Va por el pasillo de la derecha. Perfecto». Todavía tenía un gran problema que resolver, que era averiguar en qué habitación había entrado. ¿En el baño? ¿La cocina, buscando la compañía de otros monjes para verse más seguro? ¿O su propia habitación? «Problema a problema, intrépido. No te precipites».

¿Te vas a hengear en el viejo?

Datsue asintió con la cabeza. Era quien tenía autoridad sobre Makoto y, posiblemente, sobre el resto de monjes. Sin duda era la mejor opción. Volvió a echarle un vistazo rápido. Tanto él como Tome y Iekatsu parecían no haber advertido su presencia, y era mejor que siguiese siendo así. Era hora de moverse.

Lo has oído tú también, ha ido por la derecha, ¿verdad? —preguntó en un murmullo apenas audible, para asegurarse—. Creo que lo mejor será que me cuele por dicho pasillo, me hengee en el viejo y lo busque. Tú… ¿Tú qué vas a hacer mientras? —Si Akame le acompañaba en su forma normal, sería sospechoso cuanto menos.
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder
#81
Akame asintió ligeramente cuando su compadre le pidió confirmación; el objetivo se había ido hacia el lateral derecho del edificio.

Sí, no hay duda. Yo voy a salir por donde hemos entrado, doy un rodeo y me escondo en el huerto —susurró otra vez el Uchiha—. Llévale hacia allí. De todos modos... —Akame se incorporó en ese momento, pero justo antes de ponerse en pie, musitó—. Ponte el maldito comunicador.

Aquella obra de la tecnología más puntera era una auténtica maravilla, un artefacto que les permitía a los Hermanos llevar su "conexión" natural a otro nivel. Ya lo habían usado otras veces, pero —por el motivo que fuese— ambos parecían tener una molesta tendencia a olvidarse de encenderlo. Incluso aunque habían acordado ya un canal de antemano, que usaban por defecto —el canal seis—, muchas veces se les olvidaba de primeras, colocárselo.

Dicho y hecho, el jōnin realizó una última reverencia a la estatua del dios al que le había estado rezando —diosa, en este caso, pues se trataba de Uzume— y se dio la media vuelta. Deshizo el trayecto a paso tranquilo, y una vez fuera del templo se desvió hacia el lateral izquierdo. Mientras caminaba distraídamente, sacó su comunicador avanzado y se lo colocó en la oreja izquierda; entonces activó el dispositivo, y lo colocó en la frecuencia del canal seis.

Dio un rodeo con aire distraído, pero siempre alerta por si observaba a algún monje que pudiera entorpecerles. Para su suerte, no se cruzó con nadie en su camino, y logró llegar hasta el huerto trasero del santuario.

No divisó a nadie allí —«probablemente están todos descansando tras el almuerzo»—, de modo que simplemente se colocó junto a la entrada trasera del santuario, bajo una ventana. Realizó unos sellos y su figura se difuminó en el ambiente, adoptando una capa de chakra translúcida que le volvía a todas luces invisible.

«Ahora... A esperar».
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

¿Eres nuevo en el rol? ¡Echa un vistazo a mi Compendio de Buenas Prácticas!
Responder
#82
Joder, era verdad. No sabía cómo lo hacía, pero siempre se olvidaba de poner el maldito comunicador. Pese a que en semanas posteriores el Uchiha cambiaría la ubicación de aquel objeto tan vital —pasándolo a un pergamino guardado en el portaobjetos—, en aquel momento lo llevaba sellado en la oreja derecha.

No obstante, todavía no era el momento de sacarlo. No allí, al menos, en medio del templo. Se levantó junto a su Hermano y caminó con calma, tratando de no hacer ruido, hasta la entrada. Una vez allí, volteó la cabeza como si tan solo quisiese curiosear la arquitectura del interior del templo —y no comprobar que nadie le estaba observando— y tras asegurarse se coló por el pasillo derecho.

Una vez allí, si se veía solo y resguardado de miradas indiscretas, liberaría al fin su comunicador de la oreja, colocándolo en su oído. «Canal seis… Aquí está». Acto seguido, y tras mirar nuevamente a un lado y a otro para asegurarse que nadie le sorprendía —la precaución, primero y siempre—, visualizaría la imagen del monje en su mente. Su rostro arrugado y viejo. Su kimono negro. Su cabeza rapada…

Perro, Jabalí, Carnero… ¡Pluf! Y Uchiha Datsue ya no era el Intrépido, sino al que le gustaba que le llamasen como Oonoji-sama. Tratando de imitar su paso, Datsue recorrió el pasillo con calma. «Hmm… ¿Qué puta puerta será?»
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder
#83
El menor de los Hermanos del Desierto llevó a cabo su plan tal y como lo había imaginado en su mente. Sin embargo, al llegar al pasillo que recorría el lateral derecho del templo, se encontró con la primera dificultad; ¿cuál sería la puerta tras la que había desaparecido Masaru?

Un vistazo rápido le reveló que había un total de cuatro, tres de una sola hoja y otra doble corredera. Se podía asumir que la grande llevaría a algún lugar común, como una biblioteca o las cocinas, mientras que las otras correspondían a las habitaciones de los monjes. ¿Estaría su objetivo en una de ellas?

Además, se le presentaba un inconveniente adicional; una vez transformado en el sabio del santuario, podía darse la extraña situación de cruzarse con alguien en ese pasillo y que, después, esa misma persona pasara por la sala central y "le viera" tomando el té con los invitados. Debía ser cuidadoso.

En su oído, Datsue escuchó la voz del otro Uchiha.

«Estoy en posición, repito, estoy en posición. ¿Dónde te encuentras?»
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

¿Eres nuevo en el rol? ¡Echa un vistazo a mi Compendio de Buenas Prácticas!
Responder
#84
Cuatro puertas. Una de ellas de doble corredera. La primera que desechó, pues tenía pinta de dar a una cocina, biblioteca o sala común. Lo último que quería era encontrarse con un grupo de monjes. Por muy bueno que fuese su disfraz, todavía no se había empapado de las tradiciones y costumbres de aquel templo. Ni conocía a ninguno. Su artificio se tambalearía en cuestión de segundos.

Con suerte, Makoto estaría en una de las otras tres habitaciones. Con mucha suerte, no la compartiría con nadie.

Entonces oyó la voz de su Hermano.

En el pasillo —murmuró, a modo de respuesta—. Cuatro puertas, tres de ellas habitaciones —le informó—. ¿Alguna forma de confirmarme la posición del objetivo desde el exterior? —preguntó en un susurro, esperanzado—. Quizá haya alguna ventana desde la que se pueda ver… —sugirió.

No obstante, Uchiha Datsue había aprendido a no ser ningún iluso. Se preparó para que la respuesta fuese negativa, y no se quedó de brazos cruzados. Se acercó a la primera puerta simple, con mucho cuidado de no hacer ningún ruido, y pegó su oreja en ésta. Quizá podría escuchar algo…
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder
#85
Akame aguardó, paciente y observador, amparado por el jutsu que le hacía invisible al ojo de casi cualquier transeúte que pudiera pasar por el huerto. A los pocos momentos escuchó la voz de Datsue a través del comunicador; y lo que oyó no le gustó en absoluto.

Joder, Datsue-kun, yo ya estoy apostado aquí. Si me muevo, perderé mi camuflaje.

Las palabras llegarían a su compadre, que en ese momento se encontraba pegando la oreja a la primera puerta sencilla del pasillo. Por suerte para él, el papel de arroz era sumamente fino —en aquel santuario no debían valorar mucho la privacidad— y se podía oír perfectamente lo que ocurría al otro lado. Que, en ese caso, era...

Un ronquido. O varios, más bien. Quien fuera que estuviese en aquella habitación, se encontraba durmiendo a pierna suelta. ¿Sería Makoto Masaru?
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

¿Eres nuevo en el rol? ¡Echa un vistazo a mi Compendio de Buenas Prácticas!
Responder
#86
Como era de esperar, la ayuda no vendría a buscarle. Tendría que sacarse las habichuelas por sí mismo.

Así pues, trató de oír lo que había al otro lado de la puerta. Lo que oyó fue de los más esclarecedor: ronquidos. Y de varios. Aquello significaba que, para su desgracia, las habitaciones eran compartidas.

«No creo que Makoto se pusiese a echar la siesta nada más vernos…». Volvió a mirar a un lado y a otro para asegurarse que no le pillaba nadie por sorpresa, y avanzó hasta la siguiente puerta. Con el mismo procedimiento —con pasos lentos y medidos para no hacer ruido—, pegó su oreja a ella, tratando de captar algún sonido.
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder
#87
Cauto, el jōnin disfrazado se cercioró de que no había nadie más en el pasillo —así era— y luego avanzó hacia la segunda puerta. El papel de arroz demostró, otra vez, no ser la mejor materia para aislar compartimentos privados cuando Datsue fue capaz de distinguir una sola voz detrás de la puerta.

... maldición... Ellos... seguro, seguro... ¿...el viejo?

Era una voz sumamente parecida a la de Masaru, pero Datsue no llegaba a identificarla completamente con la del antiguo noble. Cuando cesó la retahíla, el Uchiha pudo oír una serie de ruidos sumamente extraños, como si alguien estuviese arrastrando algo por el suelo, acompañado de alguna maldición pronunciada entre dientes.
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

¿Eres nuevo en el rol? ¡Echa un vistazo a mi Compendio de Buenas Prácticas!
Responder
#88
«¡Es él! No, espera… Joder, tiene una voz clavada, pero no…». No, no era Makoto, ¿pero y si era alguien hablando con él? Creyó oírles hablar de un viejo —debían estar refiriéndose a Iekatsu—, y parecían nerviosos. Luego, se oyó un ruido extraño, como el de algo arrastrándose por el suelo. Acompañado de maldiciones. Monjes maldiciendo...

Todo era demasiado sospechoso. «¡A la mierda, me la juego!»

Tocó a la puerta —con suma delicadeza al ser de papel de arroz, no fuese a romperla—, y tratando de contener los nervios y aparentar tranquilidad la abrió con lentitud. Y lo que entró dentro fue…
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder
#89
... la figura de Makoto Masaru, agachado junto al hueco que quedaba entre la pared de madera de la habitación y su cama, que había despegado ligeramente de la misma. El recién iniciado, al verse sorprendido, se agarró la rodilla y fingió una mueca de dolor. Un truco demasiado barato para los ojos de Datsue, que incluso en aquellas carnes de viejo maestro y sin el Sharingan, supo distinguir perfectamente su mentira.

Todavía haciendo como si le doliese la rodilla, fruto de una caída fortuita, el nuevo monje se puso en pie y realizó una profunda reverencia.

Oonoji-sama, ruego me disculpe. Estaba arreglando mi habitación y tropecé torpemente —se excusó, sin mirar al anciano. Sólo después levantó la cabeza—. Escuche, maestro, sobre lo ocurrido con nuestros invitados... Sepa que estoy profundamente arrepentido, y le pido disculpas de nuevo. Todavía no termino de habituarme a mi nuevo hogar, y a veces parece que las fauces del Yomi todavía están abiertas para mí, esperando recibirme...

No había mentira en aquello; Masaru realmente era consciente del peligro que corría desde que aquellos dos ninjas habían llegado con el señor Iekatsu.
Diálogo - «Pensamiento» - Narración

Mangekyō utilizado por última vez: Flama, Verano de 220

¿Eres nuevo en el rol? ¡Echa un vistazo a mi Compendio de Buenas Prácticas!
Responder
#90
«Pero, ¿qué cojones…?»

Efectivamente, en la habitación estaba Makoto. Solo. ¿De dónde había oído entonces la otra voz? ¿O es que acaso los nervios le habían jugado una mala pasada y, en realidad, se había tratado solamente de Makoto hablando consigo mismo?

Fuese como fuese, estaba claro que le había pillado haciendo algo indebido. La reacción de Makoto no pudo ser más patética, fingiendo un golpe en la rodilla y apretando los dientes del dolor con demasiada exageración. Estaba claro que, como antiguo noble que era, no estaba acostumbrado ni a fingir ni a mentir. Y es que, cuando uno pertenece a la alta sociedad, no necesita excusarse en nada. Ni esconder nada ante los plebeyos. Debido o indebido, ellos eran la ley.

Comprendo tu aprehensión, pero espero que esto no vuelva a repetirse, Makoto Masaru-san —¿Lo habría dicho así el verdadero monje? Datsue tenía claro que, cuanto menos hablase, mejor que mejor. Cada palabra era una oportunidad nueva para cagarla y ser descubierto—. El huerto necesita de tus labores, acompáñame.

Sin esperar respuesta, Datsue dio media vuelta en su disfraz y caminó con pasos lentos pero firmes —tratando de imitar los de Oonoji— a lo largo del pasillo, en dirección al huerto. Una gota de sudor bajó por su espalda. Como justo saliese ahora otro monje al pasillo…

Contuvo las ganas de andar más rápido. «Venga, ¡tú puedes!». Faltaba poco, muy poco… y Akame a buen seguro sabía que iban para allí. Después de todo, había oído toda la conversación por el comunicador.
[Imagen: ksQJqx9.png]

¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado



Grupo 0:
Datsue y Uchiha Raito, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 1:
Datsue y Reiji, (Ascua, 220), Poder 80 e Inteligencia 80

Grupo 2:
Datsue y Aiko, (Entretiempo, 220), Poder 100 e Inteligencia 80

Grupo 5:
Datsue y Uzumaki Kaia, (Bienvenida, 221), Poder 100 e Inteligencia 80
Responder



This forum uses Lukasz Tkacz MyBB addons.