20/04/2016, 21:39
—Algún día lo comprenderás —respondió, haciéndose el interesante—. Y ese día te acordarás de mí —añadió, guiñándole un ojo.
¿Comprender? ¿Que se había caído del cielo y no de los árboles? ¡Pero si ella misma era la que se había caído! ¿Cómo lo iba a saber él? Hombre... Acordarse de él... Eso era otra cosa, pero quizás no por comprender el enigma que le había dejado en un principio descolocada, sino porque era una persona que ya conocía de antes, ¡y al que ayudó, ni más ni menos! Y eso significaba que había hecho algo bien, ante tal afirmación asintió, orgullosa de sus pensamientos.
''Eso sí, no se ha enterado que le he estado acosando un poco.''
—¡Así es! —exclamó mientras la deleitaba con una sonrisa, ¡entonces no se había equivocado, era él! Algo en su interior comenzó a florecer, una alegría que no había experimentado en un tiempo—.Tú me salvaste en aquella ocasión, ahora déjame devolverte el favor —Mierda, le había vuelto a pillar, ¿dónde se había dejado el disimulo? ¿Con Mike? Suspiró y se dejó ayudar por el chico, ¡tampoco tenía nada que perder! O sí, pero era demasiado inocente para pensar en aquellas cosas, el caso es que ni si quiera llevaba mucho dinero encima, solo sus armas ninjas —. ¿Hacia dónde te dirigías? Por cierto, soy Datsue. Uchiha Datsue.
Uchiha Datsue.
Uchiha.
Datsue.
-¡E-Eres e-l Uchiha de Takigakure! - exclamó llevándose una mano a la boca, claramente desconcertada. Sí, sabía que era un shinobi, pero no pensaba que sería un Uchiha, o sí, pero aquel día fue todo tan confuso que no se había detenido a pensar en el apellido de nadie, ¡jopetas! ¿Pero de dónde salía toda esta gente? -Erhm... Y-yo... I-iba a los Dojos del Combatiente... - contestó de forma automática, aún con cara embobada, sin dejar de mirar directamente a los orbes del joven, que se encontraban cerca del rostro de la kunoichi.
''...'' Su cabeza estaba llena de abanicos Uchiha por todos lados, luego imágenes de aquella noche en la que logró salvar a alguien, ¡y ahora ese alguien le estaba ayudando a ella! Qué cosas tenía la vida...
-G-gracias, pero, ¡no hace falta que me ayudes! - se excusó intentando alejarse del chico -.Aunque... Si puedo decirte que soy Mizumi Eri... - algo estúpida se sentía, ya que estaba negando su ayuda, pero se presentaba, eso era una contradicción para ella. ¡Pero es que estaba tan nerviosa que no sabía qué hacía ni qué decía! Solo esperaba que el joven de nombre Datsue no la tomase por loca...
¿Comprender? ¿Que se había caído del cielo y no de los árboles? ¡Pero si ella misma era la que se había caído! ¿Cómo lo iba a saber él? Hombre... Acordarse de él... Eso era otra cosa, pero quizás no por comprender el enigma que le había dejado en un principio descolocada, sino porque era una persona que ya conocía de antes, ¡y al que ayudó, ni más ni menos! Y eso significaba que había hecho algo bien, ante tal afirmación asintió, orgullosa de sus pensamientos.
''Eso sí, no se ha enterado que le he estado acosando un poco.''
—¡Así es! —exclamó mientras la deleitaba con una sonrisa, ¡entonces no se había equivocado, era él! Algo en su interior comenzó a florecer, una alegría que no había experimentado en un tiempo—.Tú me salvaste en aquella ocasión, ahora déjame devolverte el favor —Mierda, le había vuelto a pillar, ¿dónde se había dejado el disimulo? ¿Con Mike? Suspiró y se dejó ayudar por el chico, ¡tampoco tenía nada que perder! O sí, pero era demasiado inocente para pensar en aquellas cosas, el caso es que ni si quiera llevaba mucho dinero encima, solo sus armas ninjas —. ¿Hacia dónde te dirigías? Por cierto, soy Datsue. Uchiha Datsue.
Uchiha Datsue.
Uchiha.
Datsue.
-¡E-Eres e-l Uchiha de Takigakure! - exclamó llevándose una mano a la boca, claramente desconcertada. Sí, sabía que era un shinobi, pero no pensaba que sería un Uchiha, o sí, pero aquel día fue todo tan confuso que no se había detenido a pensar en el apellido de nadie, ¡jopetas! ¿Pero de dónde salía toda esta gente? -Erhm... Y-yo... I-iba a los Dojos del Combatiente... - contestó de forma automática, aún con cara embobada, sin dejar de mirar directamente a los orbes del joven, que se encontraban cerca del rostro de la kunoichi.
''...'' Su cabeza estaba llena de abanicos Uchiha por todos lados, luego imágenes de aquella noche en la que logró salvar a alguien, ¡y ahora ese alguien le estaba ayudando a ella! Qué cosas tenía la vida...
-G-gracias, pero, ¡no hace falta que me ayudes! - se excusó intentando alejarse del chico -.Aunque... Si puedo decirte que soy Mizumi Eri... - algo estúpida se sentía, ya que estaba negando su ayuda, pero se presentaba, eso era una contradicción para ella. ¡Pero es que estaba tan nerviosa que no sabía qué hacía ni qué decía! Solo esperaba que el joven de nombre Datsue no la tomase por loca...
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)