21/04/2016, 22:09
Yota se acercó cerca de él sin reparos. Juro se puso en tensión, pero no se movió del sitio. Esperó la respuesta, por muy imprudente que fuese.
-Eso es, un favor- contestó, sin nada que ocultar -Pase lo que pase, cuando volvamos a casa tenemos que ir a tomar unos dangos y conocernos mejor, ¿Vale?-
A Juro le costó entender las palabras en un primer momento. ¿Hablaba en serio? ¿No era ninguna estrategia para distraerle y atacarle por sorpresa?
Yota se acercó aún más, quedando a una distancia más bien escasa. Mucho menor de lo que le gustaría para combatir, claro. Movió el puño, paralelo a su cuerpo, en dirección hacia él. Sin embargo, lo hizo con tal lentitud que no pudo considerarlo un ataque, a pesar de la tensión con la que veía el acercamiento.
-¿Qué dices?-
“Lo dice en serio…” – pensó, asombrado.
Se había expuesto totalmente a él, y sin embargo, no parecía tener miedo. ¿Confiaba tanto en él, por ser del a misma aldea? Para él habría sido algo inconcebible. Pronto, se sintió avergonzado de haber pensado mal de él. Después de todo, parecía ser un buen tipo.
- Hecho, me encantará cumplirlo cuando todo esto termine – exclamó, con una gran sonrisa – Es como una promesa, así que hay que hacerla, gane quien gane.
Extendió el puño con lentitud mientras lo decía, y lo chocó con poca fuerza contra el de Yota, tal y como supuso que debía hacerlo. No sabía quien era Yota, ni de lo que era capaz. No tenía ni idea de sus habilidades, ni de su potencia, ni de sus armas.
Lo único que sabía es que parecía ser un buen tipo. Totalmente contrario a su sentido de la desconfianza, en ese mismo momento, eso le bastó.
El acuerdo estaba sellado.
-Eso es, un favor- contestó, sin nada que ocultar -Pase lo que pase, cuando volvamos a casa tenemos que ir a tomar unos dangos y conocernos mejor, ¿Vale?-
A Juro le costó entender las palabras en un primer momento. ¿Hablaba en serio? ¿No era ninguna estrategia para distraerle y atacarle por sorpresa?
Yota se acercó aún más, quedando a una distancia más bien escasa. Mucho menor de lo que le gustaría para combatir, claro. Movió el puño, paralelo a su cuerpo, en dirección hacia él. Sin embargo, lo hizo con tal lentitud que no pudo considerarlo un ataque, a pesar de la tensión con la que veía el acercamiento.
-¿Qué dices?-
“Lo dice en serio…” – pensó, asombrado.
Se había expuesto totalmente a él, y sin embargo, no parecía tener miedo. ¿Confiaba tanto en él, por ser del a misma aldea? Para él habría sido algo inconcebible. Pronto, se sintió avergonzado de haber pensado mal de él. Después de todo, parecía ser un buen tipo.
- Hecho, me encantará cumplirlo cuando todo esto termine – exclamó, con una gran sonrisa – Es como una promesa, así que hay que hacerla, gane quien gane.
Extendió el puño con lentitud mientras lo decía, y lo chocó con poca fuerza contra el de Yota, tal y como supuso que debía hacerlo. No sabía quien era Yota, ni de lo que era capaz. No tenía ni idea de sus habilidades, ni de su potencia, ni de sus armas.
Lo único que sabía es que parecía ser un buen tipo. Totalmente contrario a su sentido de la desconfianza, en ese mismo momento, eso le bastó.
El acuerdo estaba sellado.