27/04/2016, 04:36
—Kazuma... no debiste arriesgarte tanto —dijo entonces, medio regañándole y medio agradeciéndole el esfuerzo—. Con que hayas venido aquí es suficiente. Es una lástima que te perdieras mi gran pelea, pero bueno, tampoco fue del otro mundo.
Con aquellas palabras sintió como si sus disculpas hubiesen sido aceptadas. Librarse de aquel cúmulo de culpabilidad le hizo sentirse más ligero, lo suficiente como para permitir que de sus labios se escapara una sonrisa.
—Al final hemos acabado bien machacados los dos… —comentó, sin poder evitar sonreír un poco—. Tenemos que estar decentes para la final, no me la pienso perder.
Quizás Juro decía lo de machacar en forma metafórica, pero en el caso de Kazuma había sido más literal de lo que hubiese querido. El caso era que no se había roto nada vital, pero el impacto de la técnica de Eri hizo que todos sus órganos se desplazaran de la posición que les correspondía. El médico no tuvo más opción que abrirlo y comenzar a acomodar sus viseras como si fueran sacos de arroz. Por un instante le pareció gracioso mencionarle aquello al pelo negro, pero con dos damas presentes parecía algo un poco... Grotesco.
—Sí, el último combate promete que será algo para recordar… —Admitió él, pues era consciente del nivel que debían de tener las finalistas.
»Por cierto, abajo hay una especie de plaza para silla de ruedas —mencionó de repente, pues una idea acababa de presentársele—. ¿Quiere ir y dar un paseo? Digo, para hablar y tomar un poco de aire fresco.
Ciertamente les hacía falta el salir de aquellas habitaciones y respirar un poco de aire que no oliera a medicinas. Kazuma ya se lo había planteado antes, pero no le hacía mucha ilusión el salir a dar vueltas solo y sin tener con quien hablar. En última instancia podía conversar con Bohimei, pero seguramente terminaría poniendolo de mal humor.
Con aquellas palabras sintió como si sus disculpas hubiesen sido aceptadas. Librarse de aquel cúmulo de culpabilidad le hizo sentirse más ligero, lo suficiente como para permitir que de sus labios se escapara una sonrisa.
—Al final hemos acabado bien machacados los dos… —comentó, sin poder evitar sonreír un poco—. Tenemos que estar decentes para la final, no me la pienso perder.
Quizás Juro decía lo de machacar en forma metafórica, pero en el caso de Kazuma había sido más literal de lo que hubiese querido. El caso era que no se había roto nada vital, pero el impacto de la técnica de Eri hizo que todos sus órganos se desplazaran de la posición que les correspondía. El médico no tuvo más opción que abrirlo y comenzar a acomodar sus viseras como si fueran sacos de arroz. Por un instante le pareció gracioso mencionarle aquello al pelo negro, pero con dos damas presentes parecía algo un poco... Grotesco.
—Sí, el último combate promete que será algo para recordar… —Admitió él, pues era consciente del nivel que debían de tener las finalistas.
»Por cierto, abajo hay una especie de plaza para silla de ruedas —mencionó de repente, pues una idea acababa de presentársele—. ¿Quiere ir y dar un paseo? Digo, para hablar y tomar un poco de aire fresco.
Ciertamente les hacía falta el salir de aquellas habitaciones y respirar un poco de aire que no oliera a medicinas. Kazuma ya se lo había planteado antes, pero no le hacía mucha ilusión el salir a dar vueltas solo y sin tener con quien hablar. En última instancia podía conversar con Bohimei, pero seguramente terminaría poniendolo de mal humor.
![[Imagen: aab687219fe81b12d60db220de0dd17c.gif]](https://i.pinimg.com/originals/aa/b6/87/aab687219fe81b12d60db220de0dd17c.gif)