28/04/2016, 15:26
(Última modificación: 28/04/2016, 15:27 por Uzumaki Eri.)
—Eri, tranquila. No pasa nada —Afirmó, intentando que la joven de cabellos azules dejase de gimotear, o eso es lo que entendió la muchacha, sin embargo, volvió a repetirlo —. Eri, de verdad que no pasa nada. No llores más, por favor. No me gusta verte así
''P-pero si me acabas de conocer... ¡Ay! S-se preocupa por mí, eso es... Muy bonito...'' Su mente voló por unos segundos, los cuales, en la fachada de la chica se pudo apreciar una tímida sonrisa y, además, como las lágrimas dejaban de salir de sus ojos con rapidez, a la misma velocidad con la que la sonrisa de la joven se ensanchaba.
-Está... Bien, Datsue-san, gracias - agradeció.
Un carraspeo salió del joven del moño, entonces comenzó a relatar su historia.
—Lo de mi derrota en el torneo… En fin, la versión corta es que me dejé chantajear... Así es. Mi contrincante me ofreció un diamante para dejarme ganar y yo… acepté, pero nos descubrieron en mitad del combate y nos descalificaron a ambos.
La boca de Eri se formó en una perfecta ''o'', ¡vaya! Por eso todo el revuelo que escuchó sobre no-se-qué de un intento de soborno o chantaje, ¡pero no se esperaba que fuera él! Vaya, que podría haber sido cualquiera, pero... Jobar, ella no era la que se encontraba con esa gente, ¡eso era la bomba! Sus ojos brillaban ante el relato que estaba llevando a cabo el Uchiha, creyéndose hasta la última palabra que saliese por su boca.
—Así que ya ves… Ahora soy el hazmerreír de todo el mundo. Bueno, salvo de mi propia Villa. A mis camaradas no les hizo pizca de gracia, ni mucho menos. Pero supongo que me he ganado su odio a pulso. Pero, ¿sabes qué? Lo volvería hacer. Sí, no me importa tener que cargar a la espalda con todo el odio de mi propio pueblo. No si con eso consigo salvar a Chips.
» Chips es mi perro. Apenas tiene un año, pero está muy débil. Sus huesos no terminan de formarse, y cualquier golpecillo le provoca fracturas, pero hay un veterinario muy famoso en el País del Agua, llamado Doctor Milagro, que dice poder salvarle… Por eso acepté el dinero. ¡Para poder salvar a mi Chips! Y si por ello tengo que ser odiado y apartado de mi propia Villa… ¡Que así sea! Para mi habrá merecido la pena.
Los ojos de la peliazul se volvieron a inundar, ¡qué injusta era la vida con este pobre chico y su más pobre perro! ¿Por qué el salario de los shinobi era tan bajo? ¡Era injusto! Y Chips muriéndose... ¡Encima ahora él era el hazmerreír de todos los Dojos, y una deshonra para su villa! Eri se limpió las lágrimas con la manga de su túnica, y miró detenidamente al Uchiha, entonces su corazón de rompió de nuevo. ¡Se notaba que sufría por su pequeño cachorro! ¿Es que la gente de los Dojos no tenía sentimientos?
-D-datsue-san... - Susurró entre hipos. -¡Es una injusticia! No te dejaste chantajear, ¡es que Chips es mucho más importante para ti que tu propio honor! - Afirmó asintiendo repetidas veces. -Yo no creo que seas el hazmerreír, es un acto de amor y cariño hacia tu cachorro, y si no piensan así, ¡son unos monstruos descorazonados! - hizo un puchero al aire, claramente disgustada.
''Imagínate que Mike estuviese así, suerte que tengo dinero...''
Como si de una bombilla se tratase, la mente de Eri hizo click.
-Hey, hey, Datsue-san - llamó, tirando de su manga. -¿Necesitaría Chips más ayuda? ¡Yo puedo ayudarte con todo! Por un animal herido haría lo que sea... Porque soy una ninja médico, ¿sabes? - declaró, llevándose un dedo a su pecho. -Por eso puedo ayudarte, ¡y no te preocupes, yo te admiro por lo que hiciste, Datsue-san!
''P-pero si me acabas de conocer... ¡Ay! S-se preocupa por mí, eso es... Muy bonito...'' Su mente voló por unos segundos, los cuales, en la fachada de la chica se pudo apreciar una tímida sonrisa y, además, como las lágrimas dejaban de salir de sus ojos con rapidez, a la misma velocidad con la que la sonrisa de la joven se ensanchaba.
-Está... Bien, Datsue-san, gracias - agradeció.
Un carraspeo salió del joven del moño, entonces comenzó a relatar su historia.
—Lo de mi derrota en el torneo… En fin, la versión corta es que me dejé chantajear... Así es. Mi contrincante me ofreció un diamante para dejarme ganar y yo… acepté, pero nos descubrieron en mitad del combate y nos descalificaron a ambos.
La boca de Eri se formó en una perfecta ''o'', ¡vaya! Por eso todo el revuelo que escuchó sobre no-se-qué de un intento de soborno o chantaje, ¡pero no se esperaba que fuera él! Vaya, que podría haber sido cualquiera, pero... Jobar, ella no era la que se encontraba con esa gente, ¡eso era la bomba! Sus ojos brillaban ante el relato que estaba llevando a cabo el Uchiha, creyéndose hasta la última palabra que saliese por su boca.
—Así que ya ves… Ahora soy el hazmerreír de todo el mundo. Bueno, salvo de mi propia Villa. A mis camaradas no les hizo pizca de gracia, ni mucho menos. Pero supongo que me he ganado su odio a pulso. Pero, ¿sabes qué? Lo volvería hacer. Sí, no me importa tener que cargar a la espalda con todo el odio de mi propio pueblo. No si con eso consigo salvar a Chips.
» Chips es mi perro. Apenas tiene un año, pero está muy débil. Sus huesos no terminan de formarse, y cualquier golpecillo le provoca fracturas, pero hay un veterinario muy famoso en el País del Agua, llamado Doctor Milagro, que dice poder salvarle… Por eso acepté el dinero. ¡Para poder salvar a mi Chips! Y si por ello tengo que ser odiado y apartado de mi propia Villa… ¡Que así sea! Para mi habrá merecido la pena.
Los ojos de la peliazul se volvieron a inundar, ¡qué injusta era la vida con este pobre chico y su más pobre perro! ¿Por qué el salario de los shinobi era tan bajo? ¡Era injusto! Y Chips muriéndose... ¡Encima ahora él era el hazmerreír de todos los Dojos, y una deshonra para su villa! Eri se limpió las lágrimas con la manga de su túnica, y miró detenidamente al Uchiha, entonces su corazón de rompió de nuevo. ¡Se notaba que sufría por su pequeño cachorro! ¿Es que la gente de los Dojos no tenía sentimientos?
-D-datsue-san... - Susurró entre hipos. -¡Es una injusticia! No te dejaste chantajear, ¡es que Chips es mucho más importante para ti que tu propio honor! - Afirmó asintiendo repetidas veces. -Yo no creo que seas el hazmerreír, es un acto de amor y cariño hacia tu cachorro, y si no piensan así, ¡son unos monstruos descorazonados! - hizo un puchero al aire, claramente disgustada.
''Imagínate que Mike estuviese así, suerte que tengo dinero...''
Como si de una bombilla se tratase, la mente de Eri hizo click.
-Hey, hey, Datsue-san - llamó, tirando de su manga. -¿Necesitaría Chips más ayuda? ¡Yo puedo ayudarte con todo! Por un animal herido haría lo que sea... Porque soy una ninja médico, ¿sabes? - declaró, llevándose un dedo a su pecho. -Por eso puedo ayudarte, ¡y no te preocupes, yo te admiro por lo que hiciste, Datsue-san!
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)