6/05/2016, 10:39
(Última modificación: 17/05/2016, 13:07 por Uzumaki Eri.)
— Más te vale avisarme cuando abras esa tienda para ir allí todos los días. — Dijo el de rastas, con una sonrisa en la cara. — Aunque... Me podría como una bola. — El chico infló sus mofletes, haciendo que Eri dejase escapar una sonrisa mientras se llevaba una mano a la boca, intentando ocultarla en vano.
-Haríamos peleas de sumo, no te preocupes por ello - respondió la joven siguiendo la broma mientras le empujaba con su dedo índice de forma suave.
Luego, respecto al hotel, el joven repitió el nombre que había pronunciado con dificultad la huérfana, maldita altura y sus malditas consecuencias. Suspiró, había algo en aquel nombre que no le daba buena espina, ¡y eso que no era un pez! Sin embargo, no había que juzgar un libro por su portada, así que, junto a Riko, se encaminó hacia el hotel con el susodicho nombre. El trayecto no fue largo, y antes de que pudiesen ver con claridad la fachada del edificio, Eri se adelantó corriendo, ¡hacía demasiado tiempo que no se duchaba!
Pero la vista la dejó helada.
-Eh... Erm... - gesticuló con la boca, mientras señalaba el lugar cubierto por neones típicos de Amegakure - lugar en el que nunca había estado, pero había oído de él -, y...Cómo decirlo... ¡Muchas mujeres con poca ropa y hombres con caras de pervertidos! ¿Así? Sí, creo que está bien así. Eri corrió de vuelta hacia donde estaba Riko para detener su marcha, ¡no podía permitir que él, siendo tan joven, presenciase tal escena! -¡Riko-niisan! ¿Por qué no vamos a tu hotel? Creo que será lo mejor, ¿sabes? - exclamó, nerviosa, mientras jugaba con sus dedos.
-Haríamos peleas de sumo, no te preocupes por ello - respondió la joven siguiendo la broma mientras le empujaba con su dedo índice de forma suave.
Luego, respecto al hotel, el joven repitió el nombre que había pronunciado con dificultad la huérfana, maldita altura y sus malditas consecuencias. Suspiró, había algo en aquel nombre que no le daba buena espina, ¡y eso que no era un pez! Sin embargo, no había que juzgar un libro por su portada, así que, junto a Riko, se encaminó hacia el hotel con el susodicho nombre. El trayecto no fue largo, y antes de que pudiesen ver con claridad la fachada del edificio, Eri se adelantó corriendo, ¡hacía demasiado tiempo que no se duchaba!
Pero la vista la dejó helada.
-Eh... Erm... - gesticuló con la boca, mientras señalaba el lugar cubierto por neones típicos de Amegakure - lugar en el que nunca había estado, pero había oído de él -, y...Cómo decirlo... ¡Muchas mujeres con poca ropa y hombres con caras de pervertidos! ¿Así? Sí, creo que está bien así. Eri corrió de vuelta hacia donde estaba Riko para detener su marcha, ¡no podía permitir que él, siendo tan joven, presenciase tal escena! -¡Riko-niisan! ¿Por qué no vamos a tu hotel? Creo que será lo mejor, ¿sabes? - exclamó, nerviosa, mientras jugaba con sus dedos.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)