16/05/2016, 20:10
—Lo primero fue completar mi entrenamiento ninja y desarrollar todo tipo de técnicas y habilidades necesarias para la defensa personal y para servir de guardaespaldas. No tengo la experiencia que tendría un Jōnin, pero estoy cercana a ese nivel, en cuanto a habilidad combativa se refiere.
— Hmmm...
Katsue había alzado las cejas en una mueca de sorpresa. Desde luego, no imaginó que alguien como ella pudiese tener tanto nivel en habilidades combativas, más aún sin ser ninja en el sentido estricto de la palabra. Aun así, dudó en lo de la experiencia. Algo así solo se conseguía haciendo misiones.
A pesar de ese pensamiento, se contuvo y no la interrumpió.
—El resto de lo que me enseñaron fueron cosas más normales, como modales y administración —dijo entonces —. También recibí cursos diversos, tales como el de supervivencia, el de medicina y el de cocina.
La chica soltó lo último sin darle mucha importancia, aunque Katsue pudo percibir una leve sonrisa. Aunque no lo quisiese admitir - ¡Esa chica parecía la modestia pura! - parecía orgullosa de sus habilidades.
— Vaya vaya... eres una caja de sorpresas — comentó, dando una leve palmada al aire — Tienes la habilidad de toda una ninja, una verdadera superviviente... y no tienes que jugarte la vida en misiones para demostrarlo... Muchos dirían que eres afortunada.
A pesar de la fragilidad de sus palabras, Katsue prestó mucha atención a su receptora, como si estuviese esperando algo en respuesta...
____________________________________________________________________________________
Tras escupir todo el relato, Juro se recostó, como si se hubiese librado de un gran peso de encima que le oprimiese. Ahora sentía más que nunca su maltratado cuerpo, como si sus heridas se hubieran reabierto.
—Cielos… A pesar de todo parece que fue una pelea donde aprendiste mucho. — aseguró, con la misma expresión de siempre.
Juro no supo que había estado esperando en respuesta, pero eso le tranquilizó. Simplemente dejó escapar otra vez su jovial sonrisa. Parecía saber siempre lo mejor de cada situación, aunque se tornase a mal.
— Tienes razón... — mencionó, torciendo la sonrisa — Aunque no sea de gusto admitirlo, soy más consciente de mis debilidades ahora que de mis puntos fuertes.
Miró levemente al cielo. No se consideraba alguien dramatico, ni alguien que daría la vida por entrenar cada minuto de tiempo. Solo tenía un objetivo, y nunca se había puesto un tiempo límite para hacerlo. Pero quizás tenía que esforzarse un poco más. Solo acelerar las cosas un poco más.
— Pero pienso mejorar, esto no ha terminado... — elevó el puño hacia el aire, como si quisiese alcanzar el cielo, o golpear una nube, quien sabe — Pienso cumplir mi objetivo...
— Hmmm...
Katsue había alzado las cejas en una mueca de sorpresa. Desde luego, no imaginó que alguien como ella pudiese tener tanto nivel en habilidades combativas, más aún sin ser ninja en el sentido estricto de la palabra. Aun así, dudó en lo de la experiencia. Algo así solo se conseguía haciendo misiones.
A pesar de ese pensamiento, se contuvo y no la interrumpió.
—El resto de lo que me enseñaron fueron cosas más normales, como modales y administración —dijo entonces —. También recibí cursos diversos, tales como el de supervivencia, el de medicina y el de cocina.
La chica soltó lo último sin darle mucha importancia, aunque Katsue pudo percibir una leve sonrisa. Aunque no lo quisiese admitir - ¡Esa chica parecía la modestia pura! - parecía orgullosa de sus habilidades.
— Vaya vaya... eres una caja de sorpresas — comentó, dando una leve palmada al aire — Tienes la habilidad de toda una ninja, una verdadera superviviente... y no tienes que jugarte la vida en misiones para demostrarlo... Muchos dirían que eres afortunada.
A pesar de la fragilidad de sus palabras, Katsue prestó mucha atención a su receptora, como si estuviese esperando algo en respuesta...
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Tras escupir todo el relato, Juro se recostó, como si se hubiese librado de un gran peso de encima que le oprimiese. Ahora sentía más que nunca su maltratado cuerpo, como si sus heridas se hubieran reabierto.
—Cielos… A pesar de todo parece que fue una pelea donde aprendiste mucho. — aseguró, con la misma expresión de siempre.
Juro no supo que había estado esperando en respuesta, pero eso le tranquilizó. Simplemente dejó escapar otra vez su jovial sonrisa. Parecía saber siempre lo mejor de cada situación, aunque se tornase a mal.
— Tienes razón... — mencionó, torciendo la sonrisa — Aunque no sea de gusto admitirlo, soy más consciente de mis debilidades ahora que de mis puntos fuertes.
Miró levemente al cielo. No se consideraba alguien dramatico, ni alguien que daría la vida por entrenar cada minuto de tiempo. Solo tenía un objetivo, y nunca se había puesto un tiempo límite para hacerlo. Pero quizás tenía que esforzarse un poco más. Solo acelerar las cosas un poco más.
— Pero pienso mejorar, esto no ha terminado... — elevó el puño hacia el aire, como si quisiese alcanzar el cielo, o golpear una nube, quien sabe — Pienso cumplir mi objetivo...
Hablo / Pienso
Avatar hecho por la increible Eri-sama.
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Sellos implantados: Hermandad intrepida
- Juro y Datsue : Aliento nevado, 218. Poder:60