22/06/2016, 12:20
—¡Espera un segundo! — Escuchó la voz de Datsue mientras seguía intentando mantener su cabeza fuera del agua, al igual que el del mismo señor con una dificultad indescriptible, ¡era demasiada frustración no poder con otra persona que necesitaba ayuda! Entonces una luz, seguramente acto de Datsue, o la luz de la esperanza que venía a rescatarles iluminó el interior del pozo.
Miró hacia arriba, para encontrarse con los ojos de Datsue abiertos de par en paz, observando la posición de la kunoichi, o, mejor dicho, al lado de la kunoichi. Eri bajó la mirada, y lo que se encontró hizo que por un instante dejase el cuerpo medio sin vida del anciano flotar por sí solo. —No... No me digas que... — alcanzó a decir mientras tomaba de nuevo el brazo del anciano. ¡Eso era un cadáver, una persona muerta! Ay Kami-sama, ¿terminarían así ellos? No, ella tenía mucha vida por delante, jopetas.
Con una rapidez casi inhumana se pegó con mano libre y sus pies a la pared y trepó hasta el lugar donde se encontraba el Uchiha arañando el techo de tierra con desesperación. ''Me cago en la leche con chocolate, ¡es demasiado dura! O gruesa... ¡Madre mía! ¿Qué hacemos? Datsue no puede solo...'' La joven comenzó a sudar frío, asustada, aterrorizada, y cada vez aferrándose más al cuerpo del hombre con el que cargaba. ''Espera...''
Una idea rozó su mente, y su mirada, mientras, divagó hasta el fondo, en el que ya ni se veía el sello por donde salía el agua, y lo que vió le heló la sangre... Unos cabellos negros flotaban cerca del otro cadáver... Un cuerpo de un tamaño muy pequeño. —Oh... No... — Eri sintió que echaría el poco desayuno que había tomado aquella mañana, y unas lágrimas se instauraron en sus ojos... ¿Es que acaso ese era el cruel destino que les aguardaba?
Fuera lo que fuese, no estaba dispuesta a morir así.
Se echó al anciano al hombro para sujetarse con su mano diestra en la pared, y poco a poco fue acumulando chakra en su interior, para canalizarlo todo en su puño izquierdo. La técnica era muy básica, dominada ya por la pequeña de cabellos azules; sin embargo, la cantidad de chakra iba a ser desorbitada para así asegurarse de que pudieran hacer un boquete a la tierra... O algo... Solo esperaba que funcionase.
Además, después de eso, podría colapsar.
—¡Hiyaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! — Chilló con una voz muy aguda mientras su puño izquierdo impactaba contra la pared de tierra que les separaba del mundo exterior.
Miró hacia arriba, para encontrarse con los ojos de Datsue abiertos de par en paz, observando la posición de la kunoichi, o, mejor dicho, al lado de la kunoichi. Eri bajó la mirada, y lo que se encontró hizo que por un instante dejase el cuerpo medio sin vida del anciano flotar por sí solo. —No... No me digas que... — alcanzó a decir mientras tomaba de nuevo el brazo del anciano. ¡Eso era un cadáver, una persona muerta! Ay Kami-sama, ¿terminarían así ellos? No, ella tenía mucha vida por delante, jopetas.
Con una rapidez casi inhumana se pegó con mano libre y sus pies a la pared y trepó hasta el lugar donde se encontraba el Uchiha arañando el techo de tierra con desesperación. ''Me cago en la leche con chocolate, ¡es demasiado dura! O gruesa... ¡Madre mía! ¿Qué hacemos? Datsue no puede solo...'' La joven comenzó a sudar frío, asustada, aterrorizada, y cada vez aferrándose más al cuerpo del hombre con el que cargaba. ''Espera...''
Una idea rozó su mente, y su mirada, mientras, divagó hasta el fondo, en el que ya ni se veía el sello por donde salía el agua, y lo que vió le heló la sangre... Unos cabellos negros flotaban cerca del otro cadáver... Un cuerpo de un tamaño muy pequeño. —Oh... No... — Eri sintió que echaría el poco desayuno que había tomado aquella mañana, y unas lágrimas se instauraron en sus ojos... ¿Es que acaso ese era el cruel destino que les aguardaba?
Fuera lo que fuese, no estaba dispuesta a morir así.
Se echó al anciano al hombro para sujetarse con su mano diestra en la pared, y poco a poco fue acumulando chakra en su interior, para canalizarlo todo en su puño izquierdo. La técnica era muy básica, dominada ya por la pequeña de cabellos azules; sin embargo, la cantidad de chakra iba a ser desorbitada para así asegurarse de que pudieran hacer un boquete a la tierra... O algo... Solo esperaba que funcionase.
Además, después de eso, podría colapsar.
—¡Hiyaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! — Chilló con una voz muy aguda mientras su puño izquierdo impactaba contra la pared de tierra que les separaba del mundo exterior.
![[Imagen: ksQJqx9.png]](https://i.imgur.com/ksQJqx9.png)