27/06/2016, 14:49
Riko estaba completamente ilusionado con la idea de ir a comer a aquel asador del que tanto le habían hablado. La carne para él era como las zanahorias para los conejos, o el pescado para los gatos, era un manjar de los dioses, ya fuera carne de vaca, cordero, cerdo... Podría pasarse toda la vida alimentándose a base carne y sería el hombre más feliz del mundo, por lo que esperaba que a su acompañante le hiciera al menos, algo de ilusión ir allí.
—No estaría mal la verdad. Espero que no nos perdamos, este lugar es más grande de lo que parece—
Aquello era cierto, pero más o menos sabía la zona en la que se encontraba, no estaba muy lejos del estadio en el que se estaban disputando todos los combates del torneo, por lo que llegar hasta allí no supondría ningún problema, simplemente tendrían que preguntar a algún lugareño para asegurar donde estaba situado exactamente el restaurante.
La idea de volver para cerciorarse del estado de salud del viejo Cheng les parecía bien a ambos, de todas formas, no dejaba de ser en parte culpa de Riko, por lo que éste se encontraba algo mal por el pobre anciano, mientras que Mitsuki estaba preocupada por él, no en vano, era ella a la que más conocía de los dos.
— Perfecto, pongámonos en marcha entonces. — Dijo el joven de rastas, con el entusiasmo de un niño pequeño cuando abre los regalos de su cumpleaños. — Vamos por aquí y así hago algo de turismo, que todavía no he visto toda la ciudad, ¿te parece? — Dijo el muchacho, deteniéndose en un cruce y señalando el camino de la derecha, en el cual podía verse de fondo el estadio al que se tenían que dirigir.
—No estaría mal la verdad. Espero que no nos perdamos, este lugar es más grande de lo que parece—
Aquello era cierto, pero más o menos sabía la zona en la que se encontraba, no estaba muy lejos del estadio en el que se estaban disputando todos los combates del torneo, por lo que llegar hasta allí no supondría ningún problema, simplemente tendrían que preguntar a algún lugareño para asegurar donde estaba situado exactamente el restaurante.
La idea de volver para cerciorarse del estado de salud del viejo Cheng les parecía bien a ambos, de todas formas, no dejaba de ser en parte culpa de Riko, por lo que éste se encontraba algo mal por el pobre anciano, mientras que Mitsuki estaba preocupada por él, no en vano, era ella a la que más conocía de los dos.
— Perfecto, pongámonos en marcha entonces. — Dijo el joven de rastas, con el entusiasmo de un niño pequeño cuando abre los regalos de su cumpleaños. — Vamos por aquí y así hago algo de turismo, que todavía no he visto toda la ciudad, ¿te parece? — Dijo el muchacho, deteniéndose en un cruce y señalando el camino de la derecha, en el cual podía verse de fondo el estadio al que se tenían que dirigir.
![[Imagen: tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif]](https://78.media.tumblr.com/ef716a7a224d02d15153150120153d79/tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif)
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