29/06/2016, 15:03
En un punto de la conversación, la peliazul recordó rápidamente el trato que habían hecho, hacía no mucho rato, los batidos de chocolate blanco. Riko los tenía completamente en cuenta, además, ya conocía un sitio en el que los servían, aunque se había quedado con las ganas de probarlo.
— No te preocupes, no me olvido. — Dijo el rastas llevándose el dedo índice a la sien.
Y la carrera comenzó, pillando claramente desprevenida a Eri, que echo a correr momentos después de lo que lo hizo Riko, que gracias a eso, sacó algo de ventaja, aunque no mucha, puesto que la joven se quedo a apenas unos pocos metros de él.
—¡Hey, espérame! ¡No estaba preparada!—
Riko escuchó las palabras de su compañera detrás suya y giró la cabeza para mirarla, con una amplia sonrisa.
— ¡Se sienteeeeeeeeeeeee! — Y siguió corriendo, saltando de tejado en tejado, y deseando llegar ya al hotel, pues las piernas le iban a fallar de un momento a otro.
No mucho tiempo después ya se encontraban ambos allí, en la puerta del hotel, Riko sentado con las piernas flexionadas, recuperando el aliento que le faltaba y Eri, con las manos en las rodillas haciendo exactamente lo mismo que el de rastas.
— Sí, eso parece. — Sonrió el joven. — Bueno, pues ya hemos llegado Eri-chan, me da que voy a irme a mi habitación a darme una duchita de agua fría para relajarme un poquito. — Dijo Riko incorprándose. — Hasta aquí llega nuestro encuentro, y esperemos que haya un próximo, ¿no? — Alegó el joven con una amplia sonrisa y después de la despedida, se internó en el hotel y se dirigió al ascensor.
— No te preocupes, no me olvido. — Dijo el rastas llevándose el dedo índice a la sien.
Y la carrera comenzó, pillando claramente desprevenida a Eri, que echo a correr momentos después de lo que lo hizo Riko, que gracias a eso, sacó algo de ventaja, aunque no mucha, puesto que la joven se quedo a apenas unos pocos metros de él.
—¡Hey, espérame! ¡No estaba preparada!—
Riko escuchó las palabras de su compañera detrás suya y giró la cabeza para mirarla, con una amplia sonrisa.
— ¡Se sienteeeeeeeeeeeee! — Y siguió corriendo, saltando de tejado en tejado, y deseando llegar ya al hotel, pues las piernas le iban a fallar de un momento a otro.
No mucho tiempo después ya se encontraban ambos allí, en la puerta del hotel, Riko sentado con las piernas flexionadas, recuperando el aliento que le faltaba y Eri, con las manos en las rodillas haciendo exactamente lo mismo que el de rastas.
— Sí, eso parece. — Sonrió el joven. — Bueno, pues ya hemos llegado Eri-chan, me da que voy a irme a mi habitación a darme una duchita de agua fría para relajarme un poquito. — Dijo Riko incorprándose. — Hasta aquí llega nuestro encuentro, y esperemos que haya un próximo, ¿no? — Alegó el joven con una amplia sonrisa y después de la despedida, se internó en el hotel y se dirigió al ascensor.
![[Imagen: tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif]](https://78.media.tumblr.com/ef716a7a224d02d15153150120153d79/tumblr_n4fzpkaZST1rmi71zo1_500.gif)
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