2/07/2016, 13:05
Para cuando Eri terminó de hablar —y empezó a gimotear—, Datsue ya estaba parcialmente recuperado de la carrera, lo suficiente como para continuar él. ¿Molestarse en ser un caballero y correr hacia ella para consolarla? Hacía un buen rato que había dejado de fingir lo que no era.
—Y entonces vimos a un anciano, atravesado con una lanza por el pecho. Tratamos de socorrerle, pero caímos en una especie de zanja, una trampa. El agua empezó a subir, la tierra se cubrió por encima. Logramos escapar ella y yo por los pelos —Datsue lo decía sin emoción en la voz, como si estuviese recitando la lista de la compra y no los serios obstáculos a los que se tuvieron que enfrentar—. Oímos otro grito, más allá del camino, pero pensamos que era mejor venir a informar.
El viejo samurái mantuvo una expresión seria, adusta. Luego desvió la mirada hacia su compañero.
—¿Tú te crees algo de esto?
El joven samurái cambió el peso del cuerpo de una pierna a otra, y su zurda se posó con suavidad sobre la empuñadura de la katana.
—Creo que deberíamos ir a comprobarlo.
El viejo miró a shinobi y kunoichi durante un largo instante, como evaluándolos. Luego, suspiró.
—Está bien, ve a informar al cuartel y que ellos decidan. Y vosotros, chicos —El joven samurái ya había desaparecido, tan rápido como la sombra de un águila en pleno vuelo—. Tendréis que enseñarme la identificación si queréis pasar.
—Y entonces vimos a un anciano, atravesado con una lanza por el pecho. Tratamos de socorrerle, pero caímos en una especie de zanja, una trampa. El agua empezó a subir, la tierra se cubrió por encima. Logramos escapar ella y yo por los pelos —Datsue lo decía sin emoción en la voz, como si estuviese recitando la lista de la compra y no los serios obstáculos a los que se tuvieron que enfrentar—. Oímos otro grito, más allá del camino, pero pensamos que era mejor venir a informar.
El viejo samurái mantuvo una expresión seria, adusta. Luego desvió la mirada hacia su compañero.
—¿Tú te crees algo de esto?
El joven samurái cambió el peso del cuerpo de una pierna a otra, y su zurda se posó con suavidad sobre la empuñadura de la katana.
—Creo que deberíamos ir a comprobarlo.
El viejo miró a shinobi y kunoichi durante un largo instante, como evaluándolos. Luego, suspiró.
—Está bien, ve a informar al cuartel y que ellos decidan. Y vosotros, chicos —El joven samurái ya había desaparecido, tan rápido como la sombra de un águila en pleno vuelo—. Tendréis que enseñarme la identificación si queréis pasar.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado