24/09/2016, 22:07
—Perdón, no fue mi intención— el chico le tendió la mano a Tomoe para ayudarla a levantarla pero esta la rechazó con un manotazo
—¡Aleja tu zarpa de mí pelón!— la joven se alejó un poco más antes de incorporarse —¡Haz algo útil y devuélveme mis tabi!— se quejó la pequeñaja que ahora, no sólo tenía sus pies embadurnados en arena, si no que gran parte de su cuerpo y ropa también
—Soy Karamaru, ninja igual que tu por lo que veo. ¿Cómo te llamas? —
—¡ODIO ESTA PUTA ARENA!— se sacudía con bastante ímpetu, sobre todo el trasero que estaba empapado y rebozado en arena —¿Tú eres ninja?— rebuscó con la mirada el hitae-ate del chico pero no lograba encontrarlo —¿Dónde tienes...?— localizó la insignia de Amegakure en el cinturón del calvito —En vaya sitio me la llevas...— terminó de sacudirse —Podríamos decir que Tomoe es mi nombre, todo el mundo me llama así últimamente— contestó la pelimorada más centrada ahora en un nuevo problema que acababa de surgir, tenía las manos llenas de arena y no había manera de librarse de ella sin mancharse de nuevo —Esto es desesperante...— la niña se miraba las manos mientras hinchaba sus mofletes
"Odio mi vida..." lenvantó la mirada y se quedó mirando fijamente al calvito "Ya sé..." se acercó al chico y se limpió las manos en los pantalones del otro shinobi
—Alé, me manché por tu culpa así que es lo justo... Y no puedes quejarte, ya estabas manchado antes de que yo me limpiase— dijo tras dejar sus manos relucientes —Ahora puedo centrarme— dio un par de pasos hacia atrás y se quedó mirando fijamente a Karamaru, clavando sus pequeños ojillos en los del chico —¿Se puede saber que demonios hacías tirado en mitad de esta maldita playa?—
—¡Aleja tu zarpa de mí pelón!— la joven se alejó un poco más antes de incorporarse —¡Haz algo útil y devuélveme mis tabi!— se quejó la pequeñaja que ahora, no sólo tenía sus pies embadurnados en arena, si no que gran parte de su cuerpo y ropa también
—Soy Karamaru, ninja igual que tu por lo que veo. ¿Cómo te llamas? —
—¡ODIO ESTA PUTA ARENA!— se sacudía con bastante ímpetu, sobre todo el trasero que estaba empapado y rebozado en arena —¿Tú eres ninja?— rebuscó con la mirada el hitae-ate del chico pero no lograba encontrarlo —¿Dónde tienes...?— localizó la insignia de Amegakure en el cinturón del calvito —En vaya sitio me la llevas...— terminó de sacudirse —Podríamos decir que Tomoe es mi nombre, todo el mundo me llama así últimamente— contestó la pelimorada más centrada ahora en un nuevo problema que acababa de surgir, tenía las manos llenas de arena y no había manera de librarse de ella sin mancharse de nuevo —Esto es desesperante...— la niña se miraba las manos mientras hinchaba sus mofletes
"Odio mi vida..." lenvantó la mirada y se quedó mirando fijamente al calvito "Ya sé..." se acercó al chico y se limpió las manos en los pantalones del otro shinobi
—Alé, me manché por tu culpa así que es lo justo... Y no puedes quejarte, ya estabas manchado antes de que yo me limpiase— dijo tras dejar sus manos relucientes —Ahora puedo centrarme— dio un par de pasos hacia atrás y se quedó mirando fijamente a Karamaru, clavando sus pequeños ojillos en los del chico —¿Se puede saber que demonios hacías tirado en mitad de esta maldita playa?—