25/09/2016, 03:38
—No conoces muy bien el país ¿Verdad? No ibas a llegar nunca a donde querías llegar—
Tomoe ladeó la cabeza a la vez que entornaba un poco los ojos
—¿Quieres que te lleve a Amegakure? Hay que adentrarse por las llanuras y bosques, es un camino corto por lo menos.—
—O yo me explico muy mal...— comenzó la pelimorada un tanto enfadada, no le gustaba repetir las cosas dos veces —o tú estás sordo— torció el gesto —Te he dicho que voy a un poblado pesquero...—
—Que no me olvide-— interrumpió Karamaru cualquier intento de respuesta por parte de la pelimorada - ¿Puedo limpiarte las tabi con agua? Se mojarán un poco pero estarán sin esta jodida arena—
"Este tío es bastante rarito la verdad... no sé de que parte de Amegakure habrá salido, pero vamos"
—A ti si que te voy a limpiar yo los oídos...— replicó la pequeñaja enojada —Vamos por partes— la joven alzó su pequeña mano para que el calvo pudiese verla claramente —Uno: No estoy perdida— levantó su dedo indice para enumerar —Dos: Voy a un pueblo de pescadores al sur de aquí— levanto el corazón —Tres: Cuando hable me escuchas, odio repetir las cosas— extendió el pulgar —Cuatro: No soy una niña pequeña, al menos no una cualquiera— recogió el pulgar y extendió el resto de sus dedos —Cinco: Toma las tabi y déjalas bien limpias— le tendió las zapatillas para que el calvo hiciese lo prometido
Tomoe ladeó la cabeza a la vez que entornaba un poco los ojos
—¿Quieres que te lleve a Amegakure? Hay que adentrarse por las llanuras y bosques, es un camino corto por lo menos.—
—O yo me explico muy mal...— comenzó la pelimorada un tanto enfadada, no le gustaba repetir las cosas dos veces —o tú estás sordo— torció el gesto —Te he dicho que voy a un poblado pesquero...—
—Que no me olvide-— interrumpió Karamaru cualquier intento de respuesta por parte de la pelimorada - ¿Puedo limpiarte las tabi con agua? Se mojarán un poco pero estarán sin esta jodida arena—
"Este tío es bastante rarito la verdad... no sé de que parte de Amegakure habrá salido, pero vamos"
—A ti si que te voy a limpiar yo los oídos...— replicó la pequeñaja enojada —Vamos por partes— la joven alzó su pequeña mano para que el calvo pudiese verla claramente —Uno: No estoy perdida— levantó su dedo indice para enumerar —Dos: Voy a un pueblo de pescadores al sur de aquí— levanto el corazón —Tres: Cuando hable me escuchas, odio repetir las cosas— extendió el pulgar —Cuatro: No soy una niña pequeña, al menos no una cualquiera— recogió el pulgar y extendió el resto de sus dedos —Cinco: Toma las tabi y déjalas bien limpias— le tendió las zapatillas para que el calvo hiciese lo prometido