26/09/2016, 19:43
—¿Se puede saber quien es ese tal Koji que no paras de nombrar? Me da intriga. ¿Es alguna clase de maes....?—
—¿Sensei?— elevó la mirada para encontrar la de su interlocutor —¿Koji? ¿Sensei?...— negó con la cabeza —Se nota que no lo conoces, no hay nada que aprender de ese inútil— contestó la pequeñaja sin titubear —pero es mi senpai por lo que no me queda otra que obedecerlo— mientras respondía sacó de su portaobjetos un pequeño bote de un naranja translucido que dejaba ver las píldoras de su interior —El muy idiota falló a la hora de atrapar a los osos y estos se separaron, así que por su culpa estoy en esta maldita playa— chasqueó la lengua molesta —pero bueno...— dejó caer sobre la palma de su mano un par de cápsulas que se llevó directamente hacia la boca —¿Tú no tienes senpai?— devolvió el pequeño tarro al sitio de donde había salido
—¿Te molesta la arena? Me serviría entrenar un poco más las piernas. ¿Corres?—
—Odio la arena, es pegajosa— respondió la chiquilla inflando los mofletes visiblemente molesta —¿Correr? ¿Para qué? Si corro levantaré más arena y eso solo significaría más molestias— bufó la de Amegakure mientras le dedicaba una dura mirada al calvito —¿Por qué eres calvo? ¿Se te cayó el pelo de tanto entrenar?— lanzó la pregunta a bocajarro, tal y como se le había aparecido en la mente al contemplar la calva del chico
—¿Sensei?— elevó la mirada para encontrar la de su interlocutor —¿Koji? ¿Sensei?...— negó con la cabeza —Se nota que no lo conoces, no hay nada que aprender de ese inútil— contestó la pequeñaja sin titubear —pero es mi senpai por lo que no me queda otra que obedecerlo— mientras respondía sacó de su portaobjetos un pequeño bote de un naranja translucido que dejaba ver las píldoras de su interior —El muy idiota falló a la hora de atrapar a los osos y estos se separaron, así que por su culpa estoy en esta maldita playa— chasqueó la lengua molesta —pero bueno...— dejó caer sobre la palma de su mano un par de cápsulas que se llevó directamente hacia la boca —¿Tú no tienes senpai?— devolvió el pequeño tarro al sitio de donde había salido
—¿Te molesta la arena? Me serviría entrenar un poco más las piernas. ¿Corres?—
—Odio la arena, es pegajosa— respondió la chiquilla inflando los mofletes visiblemente molesta —¿Correr? ¿Para qué? Si corro levantaré más arena y eso solo significaría más molestias— bufó la de Amegakure mientras le dedicaba una dura mirada al calvito —¿Por qué eres calvo? ¿Se te cayó el pelo de tanto entrenar?— lanzó la pregunta a bocajarro, tal y como se le había aparecido en la mente al contemplar la calva del chico