27/09/2016, 00:29
—¿Besarte... En sueños...?—Repitió alejándose un par de pasos del contrario.
Por cada paso que la chica retrocedía, Reiji avanzaba otro. Le estaba cogiendo el gustillo a eso de la tortura psicológica, y lo mejor de todo: Aquella conversación era privada, si se atrevía a decir algo la tacharían de loca, pues era la única que la estaba escuchando. Tal vez debería empezar a usar aquello contra todos los que un día le habían hecho daño. Tal vez debería llevarlos hasta el limite de su cordura con las técnicas que estaba aprendiendo.
—Tú no eres Reiji... No el que conozco... —
—"¿No? Vaya... Que lastima que yo sea el único... ¿Por que no me permites adivinar lo que pasó? Vamos a ver...mmm...Conociste a un chico muy atractivo, claro que no tanto como yo, pero aun así, logro encandilarte, te aseguro que se llamaba Reiji, aunque claro, no era su nombre de verdad, y ¿Por que? te preguntaras... Yo te contesto: Todo era mentira, seguramente solo estuviera jugando contigo y ahora este en su casa, riéndose de ti, o mejor, tal vez este encandilando a otra chica, para hacerle lo mismo que te hizo a ti, mientras se regocija en el recuerdo de su ultima victoria: Tu"— Reiji seguía avanzando paso a paso, lentamente hacia la chica —"Si me equivoco, dime:¿Has vuelto a verlo alguna vez? estoy seguro que no..."
—Tú también... La escuchaste, ¿verdad...? —Soltó muy nerviosa la pelirroja.
—Quedó claro que lo hizo... —Espetó la mayor, aquella que nadie lograba vislumbrar a excepción de ella.
—"No hay nada que yo no pueda ver u oír...nada... todos sois... completamente transparentes para mi"
Por cada paso que la chica retrocedía, Reiji avanzaba otro. Le estaba cogiendo el gustillo a eso de la tortura psicológica, y lo mejor de todo: Aquella conversación era privada, si se atrevía a decir algo la tacharían de loca, pues era la única que la estaba escuchando. Tal vez debería empezar a usar aquello contra todos los que un día le habían hecho daño. Tal vez debería llevarlos hasta el limite de su cordura con las técnicas que estaba aprendiendo.
—Tú no eres Reiji... No el que conozco... —
—"¿No? Vaya... Que lastima que yo sea el único... ¿Por que no me permites adivinar lo que pasó? Vamos a ver...mmm...Conociste a un chico muy atractivo, claro que no tanto como yo, pero aun así, logro encandilarte, te aseguro que se llamaba Reiji, aunque claro, no era su nombre de verdad, y ¿Por que? te preguntaras... Yo te contesto: Todo era mentira, seguramente solo estuviera jugando contigo y ahora este en su casa, riéndose de ti, o mejor, tal vez este encandilando a otra chica, para hacerle lo mismo que te hizo a ti, mientras se regocija en el recuerdo de su ultima victoria: Tu"— Reiji seguía avanzando paso a paso, lentamente hacia la chica —"Si me equivoco, dime:¿Has vuelto a verlo alguna vez? estoy seguro que no..."
—Tú también... La escuchaste, ¿verdad...? —Soltó muy nerviosa la pelirroja.
—Quedó claro que lo hizo... —Espetó la mayor, aquella que nadie lograba vislumbrar a excepción de ella.
—"No hay nada que yo no pueda ver u oír...nada... todos sois... completamente transparentes para mi"