25/05/2015, 23:34
Y así fue como los dos shinobi se encaminaron en un paseo revelador, donde Atsushi se explayaría un poco sobre lo que era, para que existe y cual creía él que tenía de función. Kota asentía cada vez que podía para darle rienda suelta a que continuara, afirmando así que entendía claramente lo que le estaban contando y que no tenía interrogante alguna para el muchacho de facciones reptiles. Aprovechó así también para darle algo de gusto a la historia, mencionando que las lenguas tan viejas como sabias decían que se trataba de una especie de linaje antiquísimo con parentescos con las serpientes.
El Uchiha balbuceó. Le pareció terrible que por su diferencia la gente lo rechazara. Imaginó que podría haber tenido una dura infancia, incluso en la academia; ambiente que da a lugar situaciones de ese estilo. "Que tú, cara de serpiente, animal rastrero e improperios de ese tipo".
Una lástima para aquellos que se aprovechaban de algo tan nimio como la apariencia.
—Pues si yo fuera una especie de experimento, intentaría aprovecharlo al máximo. Sacar provecho de las diferencias que se te han otorgado pueden ayudarte mucho en este trabajo, ya sabes; el de un ninja.
En cuanto terminó su intervención, Kota continuó caminando y prefirió dejar el tema hasta allí. No era ni de cerca su intención el presionar al muchacho o hacerle sentir invadido, aunque era evidente que la curiosidad le seguiría carcomiendo al peliblanco durante un buen tiempo. Tendría que contárselo a su hermano y de seguro éste no le creería.
Pero hablando de Yota, persona con la que compartía un linaje; el reptil no tardó en demostrar su interés por el símbolo que reposaba en la chaqueta del Uchiha. Kota sonrió levemente e hizo un deje de tanteo que demostraba una sabia desconfianza que Atsushi seguramente entendería. Prevenir antes que lamentar, eso lo tenía bien claro.
—Pues sí, es el estandarte de mi familia. Aunque sé que entenderás que no pueda decir nada más, visto que acabamos de conocernos y que pertenecemos a aldeas diferentes. Es algo tonto, pero ya te lo contaré si coincidimos más adelante.
El Uchiha balbuceó. Le pareció terrible que por su diferencia la gente lo rechazara. Imaginó que podría haber tenido una dura infancia, incluso en la academia; ambiente que da a lugar situaciones de ese estilo. "Que tú, cara de serpiente, animal rastrero e improperios de ese tipo".
Una lástima para aquellos que se aprovechaban de algo tan nimio como la apariencia.
—Pues si yo fuera una especie de experimento, intentaría aprovecharlo al máximo. Sacar provecho de las diferencias que se te han otorgado pueden ayudarte mucho en este trabajo, ya sabes; el de un ninja.
En cuanto terminó su intervención, Kota continuó caminando y prefirió dejar el tema hasta allí. No era ni de cerca su intención el presionar al muchacho o hacerle sentir invadido, aunque era evidente que la curiosidad le seguiría carcomiendo al peliblanco durante un buen tiempo. Tendría que contárselo a su hermano y de seguro éste no le creería.
Pero hablando de Yota, persona con la que compartía un linaje; el reptil no tardó en demostrar su interés por el símbolo que reposaba en la chaqueta del Uchiha. Kota sonrió levemente e hizo un deje de tanteo que demostraba una sabia desconfianza que Atsushi seguramente entendería. Prevenir antes que lamentar, eso lo tenía bien claro.
—Pues sí, es el estandarte de mi familia. Aunque sé que entenderás que no pueda decir nada más, visto que acabamos de conocernos y que pertenecemos a aldeas diferentes. Es algo tonto, pero ya te lo contaré si coincidimos más adelante.