28/10/2016, 12:06
—¿Protector? — Preguntó Ayame, y Eri se mordió el labio inferior.
Pero después de comentar por ella misma que era una historia tediosa y bastante larga, pareció que a Ayame le brillasen los ojos quizás por la curiosidad; y la verdad es que a la de cabellos azules no le importaba hablar del tema, ¡ella era muy curiosa! Pero tampoco lo veía bien del todo, ''es de Amegakure...'' pensó, un tanto indecisa; ''¡Pero también es... Como una amiga... Y estamos en paz las tres villas, aunque tampoco es un tema muy importante, vaya, ¡ay!'', comenzó a ponerse nerviosa en su cabeza, hasta que el hermano de la de la Lluvia intervino antes de que ninguno de los otros tres hablase.
—Ayame, deberíamos reservar una habitación antes de que se acaben —Eri evitó mirar directamente al chico que se encontraba al lado de la recién llamada, sin embargo, tardó varios segundos en seguir —. A no ser que te quieras pasar toda la noche deambulando por las calles de Tanzaku Gai.
''¡Es verdad!'' Reaccionó la joven, mirando a su alrededor para volver a la realidad: conseguir una cama caliente donde pasar la noche.
—¡No! —Exclamó la de cabellos oscuros. —. ¡Cualquier cosa menos eso! ¿Vosotros también os vais a alojar aquí?
El mayor de los dos pasó el peso de su cuerpo de una pierna a otra, todavía con la sonrisa dibujada en sus labios. Tomó a Eri por la cabeza y habló:
— Sí, o eso teníamos pensado. — Alegó. — Así que vosotros primero. — Invitó.
Pero después de comentar por ella misma que era una historia tediosa y bastante larga, pareció que a Ayame le brillasen los ojos quizás por la curiosidad; y la verdad es que a la de cabellos azules no le importaba hablar del tema, ¡ella era muy curiosa! Pero tampoco lo veía bien del todo, ''es de Amegakure...'' pensó, un tanto indecisa; ''¡Pero también es... Como una amiga... Y estamos en paz las tres villas, aunque tampoco es un tema muy importante, vaya, ¡ay!'', comenzó a ponerse nerviosa en su cabeza, hasta que el hermano de la de la Lluvia intervino antes de que ninguno de los otros tres hablase.
—Ayame, deberíamos reservar una habitación antes de que se acaben —Eri evitó mirar directamente al chico que se encontraba al lado de la recién llamada, sin embargo, tardó varios segundos en seguir —. A no ser que te quieras pasar toda la noche deambulando por las calles de Tanzaku Gai.
''¡Es verdad!'' Reaccionó la joven, mirando a su alrededor para volver a la realidad: conseguir una cama caliente donde pasar la noche.
—¡No! —Exclamó la de cabellos oscuros. —. ¡Cualquier cosa menos eso! ¿Vosotros también os vais a alojar aquí?
El mayor de los dos pasó el peso de su cuerpo de una pierna a otra, todavía con la sonrisa dibujada en sus labios. Tomó a Eri por la cabeza y habló:
— Sí, o eso teníamos pensado. — Alegó. — Así que vosotros primero. — Invitó.