21/12/2016, 17:26
—Sí, muy gracioso —respondió, ante el jocoso comentario de Akame. Le dio la espalda, todavía de mal humor, mientras farfullaba en voz baja de modo que no llegase a oídos de su compañero Uchiha:—. Ya te daré yo formas menos distrac… distac-loquesea de calentarte, ya verás…
Mientras tanto, Yoshimitsu había salido a su encuentro, preocupado en un primer momento porque estuviesen discutiendo, pero siendo el primero en emprender la marcha hacia la fortaleza.
Datsue les siguió a un par de metros de distancia, con las manos en los bolsillos y pateando cada guijarro suelto que encontraba por el camino. Sabía que, en cierta parte, se estaba comportando como un niño pequeño. Pero, ¿acaso no lo era? Ni siquiera había cumplido los catorce, ¡ya tendría tiempo de preocuparse por ser maduro y responsable!
El camino fue haciéndose cada vez más empinado, a medida que alcanzaban la cima de la colina, donde el castillo feudal se imponía majestuoso sobre el resto de edificaciones que tenía a su alrededor. Apoyado en una plataforma de piedra, con forma de tronco piramidal, el castillo estaba compuesto por varios pisos, con las paredes pintadas de blanco y tejas de madera. A golpe de vista, Datsue calculó que la torre de homenaje alcanzaba al menos los treinta metros, y no pudo evitar emitir un silbido de admiración.
Entonces, sintió un leve pinchazo en el pecho. Era un lugar que, mucho se temía, jamás podría poseer.
Mientras tanto, Yoshimitsu había salido a su encuentro, preocupado en un primer momento porque estuviesen discutiendo, pero siendo el primero en emprender la marcha hacia la fortaleza.
Datsue les siguió a un par de metros de distancia, con las manos en los bolsillos y pateando cada guijarro suelto que encontraba por el camino. Sabía que, en cierta parte, se estaba comportando como un niño pequeño. Pero, ¿acaso no lo era? Ni siquiera había cumplido los catorce, ¡ya tendría tiempo de preocuparse por ser maduro y responsable!
El camino fue haciéndose cada vez más empinado, a medida que alcanzaban la cima de la colina, donde el castillo feudal se imponía majestuoso sobre el resto de edificaciones que tenía a su alrededor. Apoyado en una plataforma de piedra, con forma de tronco piramidal, el castillo estaba compuesto por varios pisos, con las paredes pintadas de blanco y tejas de madera. A golpe de vista, Datsue calculó que la torre de homenaje alcanzaba al menos los treinta metros, y no pudo evitar emitir un silbido de admiración.
Entonces, sintió un leve pinchazo en el pecho. Era un lugar que, mucho se temía, jamás podría poseer.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado