9/06/2015, 16:36
Estaba todo calculado al milimetro. El machote estaba centrado en Daruu, el de Amegakure ya no debía saber de quién narices huir o de quién era amigo y yo, desde aquel escondite improvisado no tuve elección. Cierto era que veníamos de lugares distintos y en aquel momento ni siquiera pensé en la Alianza de las tres grandes aldeas. No. Lo que vi fue alguien con quien me apetecia estrechar vínculos y ahora estaba en aprietos así que ni lo pensé, me lancé como un estúpido.
Todo iba genial, el tipo no parecía haverme visto...
*¡Joder!*
Pude sentir como me aprisionaba la pierna para pocos segundos después sentirme como se siente un proyectil, mi objetivo noe ra otro que el que se suponía era mi compañero pero algo falló en el vuelo, seguí deslizandome por el aire y acabé dandome un cocotazo contra la la dura corteza de un árbol. Con el sobresalto de mi aparición en escena, llevandome la mano a la coronilla, levanté la cabeza para ver como todo iba empeorando a pasos agigantados. No solo no conseguí golpearle, sino que había apresado al gennin, apuntalandole con su cuchillo mientras se burlaba de nosotros y se presentaba ante un nombre de lo más cutre salsichero.
-¿Chiyo el del Cuchillo? ¿De donde has sacado semejante estúpidez? En realidad no has visto nada..-
Pero no pude terminar. Para mi asombro, ante las provocaciones de Chiyo y de DAruu, el de Ame hizo arder su cabeza antes de que el bandido perforase su tráquea.
*¿Cómo lo ha hecho?*
No lograba salir de mi asombro, pero no cabia duda alguna. Aquella técnica o lo que fuese que hizo, era un katon, lo cual nos daba una ventaja interesante. Ambos eramos afines a aquel destructivo elemento y teníamos que basar nuestra defensa en las llamas que aguardaban en nuestro interior, pero debíamos darnos prisa.
-Por fin, joder. Ya era hora de que entrases en razón, Daruu-san.- admití, visiblemente más aliviado -Desafortunadamente tendremos que librarnos de estos incordios-
Pude apreciar como mientras hablabamos Chiyo nos enviaba a sus hombres así que empecé a realizar rápidamente una larga secuencia de sellos. Eran 5 y venían totalmente desorganizados. Di un pas firme al frente, curvando mi dedo indice y pulgar en torno a mis labios y lancé un chorro de fuego en forma de abanico, ladenaod mi cara para cubrir un rango de alcance mayor.
-Ve tu a por tu amigo el sin cuchillo. Yo me encargo de sus lameculos-
Al contrario que antes, mi voz había cambiado su tono, ahora hablaba desde la seriedad, analizandolo todo. Sabia que el Gokakyu no los habría matado, como mucho algo heridos, pero también era consciente de que Chiyo podría aprovechar para huir, alguien debía enfrentarse a él mientras el otro neutralizaba sus subordinados. Al igual que mi voz, algo más cambió, ahora lo veía todo con mayor claridad, a un ritmo más lento y era capaz de ver los chakras exteriores con facilidad, reduciendo así el posible número de sorpresas. El sharingan había sido llamado a la batalla. Mi mano diestra, además, sujetaba el kunai de mi portaobjetos.
Todo iba genial, el tipo no parecía haverme visto...
*¡Joder!*
Pude sentir como me aprisionaba la pierna para pocos segundos después sentirme como se siente un proyectil, mi objetivo noe ra otro que el que se suponía era mi compañero pero algo falló en el vuelo, seguí deslizandome por el aire y acabé dandome un cocotazo contra la la dura corteza de un árbol. Con el sobresalto de mi aparición en escena, llevandome la mano a la coronilla, levanté la cabeza para ver como todo iba empeorando a pasos agigantados. No solo no conseguí golpearle, sino que había apresado al gennin, apuntalandole con su cuchillo mientras se burlaba de nosotros y se presentaba ante un nombre de lo más cutre salsichero.
-¿Chiyo el del Cuchillo? ¿De donde has sacado semejante estúpidez? En realidad no has visto nada..-
Pero no pude terminar. Para mi asombro, ante las provocaciones de Chiyo y de DAruu, el de Ame hizo arder su cabeza antes de que el bandido perforase su tráquea.
*¿Cómo lo ha hecho?*
No lograba salir de mi asombro, pero no cabia duda alguna. Aquella técnica o lo que fuese que hizo, era un katon, lo cual nos daba una ventaja interesante. Ambos eramos afines a aquel destructivo elemento y teníamos que basar nuestra defensa en las llamas que aguardaban en nuestro interior, pero debíamos darnos prisa.
-Por fin, joder. Ya era hora de que entrases en razón, Daruu-san.- admití, visiblemente más aliviado -Desafortunadamente tendremos que librarnos de estos incordios-
Pude apreciar como mientras hablabamos Chiyo nos enviaba a sus hombres así que empecé a realizar rápidamente una larga secuencia de sellos. Eran 5 y venían totalmente desorganizados. Di un pas firme al frente, curvando mi dedo indice y pulgar en torno a mis labios y lancé un chorro de fuego en forma de abanico, ladenaod mi cara para cubrir un rango de alcance mayor.
-Ve tu a por tu amigo el sin cuchillo. Yo me encargo de sus lameculos-
Al contrario que antes, mi voz había cambiado su tono, ahora hablaba desde la seriedad, analizandolo todo. Sabia que el Gokakyu no los habría matado, como mucho algo heridos, pero también era consciente de que Chiyo podría aprovechar para huir, alguien debía enfrentarse a él mientras el otro neutralizaba sus subordinados. Al igual que mi voz, algo más cambió, ahora lo veía todo con mayor claridad, a un ritmo más lento y era capaz de ver los chakras exteriores con facilidad, reduciendo así el posible número de sorpresas. El sharingan había sido llamado a la batalla. Mi mano diestra, además, sujetaba el kunai de mi portaobjetos.
![[Imagen: K1lxG4r.png]](https://i.imgur.com/K1lxG4r.png)
![[Imagen: dlinHLO.png]](https://i.imgur.com/dlinHLO.png)
Narro ~ Hablo ~ Pienso ~ Kumopansa