17/02/2017, 00:57
La oficina principal del Edificio del Arashikage solicita su presencia el día de mañana, cuarto de la semana; a fin de recibir las indicaciones para la realización de su primera misión oficial. Todo detalle sobre la misma les será entregada dentro de las instalaciones, una vez haya registrado su nombre con el recepcionista de turno.
—POR FIN! POR FIN! POR FIN! mi valía ha sido reconocida y me llaman a una misión! SOY EL MEJOR GENNIN DE AMEGAKURE! —Gritaba el joven Uchiha mientras leía una carta con el sello oficial que su madre le había entregado.
—No te llaman, OS llaman, a ver si leemos mejor "Mejor gennin de Amegakure" —Dijo la madre del chico en tono de burla — Y por cierto, aun no has limpiado tu habitación, así que ve poniéndote con ello
—¿Eh? — Les..., en la carta ponía les... ¿a que otras personas se referiría la carta? u otra, con suerte le tocaba trabajar con alguna chica bien maja, así que se olvido del tema. En cuanto a lo de limpiar... eso ya no le gustaba tanto —Joo mama, que mañana tengo una misión, tengo que estar descansado
— Misión de Rango S: O limpias tu cuarto, o hago que busquen a otro gennin para esa misión ¿Entendido?
—Valeeeeeee, la limpio, la limpio ahora...
Aunque lo que primero hizo el chico fue preparar su despertador para no llegar tarde a la cita. Luego ya limpio la habitación. Ordeno sus comics de los Ame Rangers, sus personajes favoritos de ficción, y por ultimo, se dio una larga ducha caliente. Cuando termino, bajo a cenar con su madre y con su hermana. Por ultimo, aunque tenia ganas de leer el ultimo tomo de los Ame Rangers, decidió que lo mas sensato era acostarse y preparar sus cosas para el día siguiente.
Como se había preparado con tiempo, se levanto tranquilamente de la cama al día siguiente. Hizo lo que hacia cada mañana. Bajo a la cocina a desayunar. Por supuesto, su madre hacia rato que se había levantado, era una mujer madrugadora y que se preocupaba bastante por sus hijos. Esa día era la primera misión de su primogénito, y tenia que alimentarlo bien.
Cuando el Uchiha termino todo que tenia en el plato, subió a su habitación, se vistió, se coloco sus portaobjetos, donde guardo el pergamino que lo citaba, luego se echo por encima su capa. Por ultimo, se puso aquella misteriosa mascara que le dejaba disfrutar de una de sus aficiones favoritas y salio volando por la ventana tras tomar la forma de un cuervo.
Su madre detestaba que hiciera aquello, por que ademas siempre se dejaba la ventana abierta y entraba agua en su habitación, pero era mucho mas rápido que subir hasta la terraza.
Así que voló. Voló hasta el edificio de la Arashikage tranquilamente y sin prisas, disfrutando del viento en sus plumas y de las suaves caricias de la lluvia. Había salido con tiempo de sobra, y aunque se tomo su tiempo para disfrutar de sus alas, llego al edificio unos minutos antes de la hora indicada.
Sin quitarse la mascara del rostro, entro al edificio y busco la recepción, donde le habían dicho que fuera a por los detalles de su misión.
El Joven Uchiha se acercaría a la recepción, y si había alguien allí, se identificaría para que le dieran sus ordenes.
—Buenas, soy Uchiha Reiji y me han llamado para una misión