6/03/2017, 00:07
Daruu entrecerró los ojos, molesto, y chasqueó la lengua. Ahora sí que tenía curiosidad por saber lo que estaba pasando allá adentro, pero por otra parte estaba creciendo en su interior una galopante desconfianza. ¿Por qué tomarse tantas molestias? ¿Y si había algo peligroso realmente allá dentro?
—Disculpa —Una voz femenina le hizo dar un respingo—. ¿Te encuentras bien?
Daruu sacudió la cabeza. Las venas alrededor de sus ojos dejaron de ser perceptibles al instante.
—¿Eh...? ¡Sí! Sí... Estaba preguntándome... ¿Has leído la nota sobre una habitación con puzzles? Me ha llamado la curiosidad.
—Si fuera tan sencillo no tendría ninguna gracia, ¿verdad? —Daruu retrocedió un paso, sorprendido por otra voz de mujer. Se trataba de una fémina de treinta años, con el pelo negro, largo y liso, sujeto en una coleta. Sus ojos aguamarina eran tan misteriosos como el edificio que tenía detrás—. Mi marido era como tú, mi nombre es Inoue Hyuuga, y soy la dueña de todo esto. ¿Estáis interesados? ¿Queréis pasar y divertiros?
Inoue Hyuuga. ¿Por qué el apellido después que el nombre? Qué raro. Quizás Hyuuga era el nombre. Pero no tenía ningún sentido.
—No sé, todo esto me parece muy extraño —dijo Daruu—. Una habitación con puzzles recubierta de chakra, ¿una atracción para ninjas? ¿Y como pagas todo esto? ¿Para qué lo haces? ¿Con qué dinero? No has dicho nada de un precio. ¿Vas a cobrarnos? ¿Si no, por qué demonios hacer todo esto?
—Disculpa —Una voz femenina le hizo dar un respingo—. ¿Te encuentras bien?
Daruu sacudió la cabeza. Las venas alrededor de sus ojos dejaron de ser perceptibles al instante.
—¿Eh...? ¡Sí! Sí... Estaba preguntándome... ¿Has leído la nota sobre una habitación con puzzles? Me ha llamado la curiosidad.
—Si fuera tan sencillo no tendría ninguna gracia, ¿verdad? —Daruu retrocedió un paso, sorprendido por otra voz de mujer. Se trataba de una fémina de treinta años, con el pelo negro, largo y liso, sujeto en una coleta. Sus ojos aguamarina eran tan misteriosos como el edificio que tenía detrás—. Mi marido era como tú, mi nombre es Inoue Hyuuga, y soy la dueña de todo esto. ¿Estáis interesados? ¿Queréis pasar y divertiros?
Inoue Hyuuga. ¿Por qué el apellido después que el nombre? Qué raro. Quizás Hyuuga era el nombre. Pero no tenía ningún sentido.
—No sé, todo esto me parece muy extraño —dijo Daruu—. Una habitación con puzzles recubierta de chakra, ¿una atracción para ninjas? ¿Y como pagas todo esto? ¿Para qué lo haces? ¿Con qué dinero? No has dicho nada de un precio. ¿Vas a cobrarnos? ¿Si no, por qué demonios hacer todo esto?