29/03/2017, 16:31
Tras el forzoso trato y apretón de manos, ambos fueron llamados por el sensei para que ingresasen al interior del local. Caminose sin garbo alguno, demostrando así el desgano que tenía encima. Sin embargo, sabía que debía disimular su malestar, así que el menos trató de mantener la espalda recta.
"Que curioso. Nos llevan tras un camino oculto fuera de la vista del público general, quizás sea porque aquí guardan la mercancía más valiosa que no está expuesta en la recepción. Eso o yo estoy imaginándome cosas de nuevo. Bah, como sea. Me pregunto que clase de objeto será, supongo que lo descubriré pronto."
Sus intentos de hacer lucir la misión más interesante no estaban funcionando.
Tras seguir a Kurozuchi por los pasillos, llegaron finalmente con cliente, el cual se encontraba aparentemente ocupado con papeleos y labores administrativas. Tras un leve intercambio de palabras, era la hora de proceder con las incómodas presentaciones; incómodas para el Senju, odiaba tener que hablar sobre sí... Bueno, en realidad odiaba casi cualquier cosa, pero las presentaciones más que nada. Para su suerte, el escualo fue el primero en alzar la voz de forma efusiva mostrando una gran autoconfianza.
—Mi nombre es Isa Kagetsuna y, este, bueno...— Quién lo diría, se atascó sin saber que decir. No se le ocurría nada interesante para contar sobre sí mismo. —Soy un genin graduado recientemente, haré lo mejor posible para llevar el encargo—. Bajó la voz al hablar y el rubor se le subió a las mejillas. Estaba avergonzado por algo demasiado simple, pero aún así mantuvo firme la mirada sin desviarla del señor Jinbë.
"Me lleva la que me trajo. Claro, nada mejor para la confianza del cliente que decir que eres un novato. Es que seré idiota..."
"Que curioso. Nos llevan tras un camino oculto fuera de la vista del público general, quizás sea porque aquí guardan la mercancía más valiosa que no está expuesta en la recepción. Eso o yo estoy imaginándome cosas de nuevo. Bah, como sea. Me pregunto que clase de objeto será, supongo que lo descubriré pronto."
Sus intentos de hacer lucir la misión más interesante no estaban funcionando.
Tras seguir a Kurozuchi por los pasillos, llegaron finalmente con cliente, el cual se encontraba aparentemente ocupado con papeleos y labores administrativas. Tras un leve intercambio de palabras, era la hora de proceder con las incómodas presentaciones; incómodas para el Senju, odiaba tener que hablar sobre sí... Bueno, en realidad odiaba casi cualquier cosa, pero las presentaciones más que nada. Para su suerte, el escualo fue el primero en alzar la voz de forma efusiva mostrando una gran autoconfianza.
—Mi nombre es Isa Kagetsuna y, este, bueno...— Quién lo diría, se atascó sin saber que decir. No se le ocurría nada interesante para contar sobre sí mismo. —Soy un genin graduado recientemente, haré lo mejor posible para llevar el encargo—. Bajó la voz al hablar y el rubor se le subió a las mejillas. Estaba avergonzado por algo demasiado simple, pero aún así mantuvo firme la mirada sin desviarla del señor Jinbë.
"Me lleva la que me trajo. Claro, nada mejor para la confianza del cliente que decir que eres un novato. Es que seré idiota..."