3/05/2017, 16:17
Karamaru pareció estar de acuerdo con la idea que había tenido el uzureño, por lo que, rápidamente se separaron, al menos, el amenio lo hizo, puesto que Yachi no soltó el brazo del pelliblanco en todo el rato, pero, aún así, iban parando de vez en cuando a alguna persona, preguntándola acerca del gran evento del que habían oído hablar, pero nada, nadie tenía la más mínima idea de qué era, ni cuándo iba a pasar, ni dónde iba a ser, por lo que, con aspecto abatido, se volvieron a reunir los tres.
— ¿Pudiste encontrar algo? Lo único que me respondieron es que tal vez pasase algo en los campos. Pero allí no hay nadie ni nada, así que me no me fío para nada de la vieja que me lo comentó.
Riko le lanzó una mirada al calvo en la que dejaba ver la frustración que sentía, dando a entender que no había encontrado nada.
— Nada... Nadie sabe nada, ¿qué mierdas será? ¿Cómo es posible que nadie sepa nada? No me lo puedo creer...
Ya solo les quedaba esperar, en algún momento algo les llamaría la atención, o alguien les diría a donde tenían que ir o qué tenían que hacer, así que solo tenían que esperar.
— ¿Pudiste encontrar algo? Lo único que me respondieron es que tal vez pasase algo en los campos. Pero allí no hay nadie ni nada, así que me no me fío para nada de la vieja que me lo comentó.
Riko le lanzó una mirada al calvo en la que dejaba ver la frustración que sentía, dando a entender que no había encontrado nada.
— Nada... Nadie sabe nada, ¿qué mierdas será? ¿Cómo es posible que nadie sepa nada? No me lo puedo creer...
Ya solo les quedaba esperar, en algún momento algo les llamaría la atención, o alguien les diría a donde tenían que ir o qué tenían que hacer, así que solo tenían que esperar.
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»