31/05/2017, 22:16
La puerta no tardó en abrirse y allí estaba un Datsue también bastante casual, hablando de una forma que hizo que una de las cejas de Koko se fuese alzando muy lentamente hasta su límite puesto que parecía estar empleando diálogos ensayados una y mil veces. «¿Es así? Ayer al menos parecía distinto »pensaba la chica extendiendo lentamente los brazos para dejarle el pantalón al alcance.
—Lo encontré, sí… —dijo sin siquiera saber cómo reaccionar ante lo dicho por el chico.
Nunca nadie le enseñó a seguirle el juego a nadie así que aunque se esforzara no tenía idea.
—Supongo que ya termin… —no terminó la frase, no podía hacerlo, no tras ver semejante cosa.
La expresión de la rubia fue de terror absoluto y un fuerte escalofrío la recorrió de pies a cabeza sin mencionar que la piel se le había erizado como si estuviese helando cuando en realidad hacía calor.
—Has… ¿Has tenido una fiesta o algo esta mañana…? —preguntó algo incrédula ante lo que veía en el interior del departamento.
Se suponía que ambas viviendas eran exactamente iguales, una al lado de la otra pero iguales al fin, pero lo que ella veía desde la puerta estaba muy lejos de parecerse a la suya.
—Lo encontré, sí… —dijo sin siquiera saber cómo reaccionar ante lo dicho por el chico.
Nunca nadie le enseñó a seguirle el juego a nadie así que aunque se esforzara no tenía idea.
—Supongo que ya termin… —no terminó la frase, no podía hacerlo, no tras ver semejante cosa.
La expresión de la rubia fue de terror absoluto y un fuerte escalofrío la recorrió de pies a cabeza sin mencionar que la piel se le había erizado como si estuviese helando cuando en realidad hacía calor.
—Has… ¿Has tenido una fiesta o algo esta mañana…? —preguntó algo incrédula ante lo que veía en el interior del departamento.
Se suponía que ambas viviendas eran exactamente iguales, una al lado de la otra pero iguales al fin, pero lo que ella veía desde la puerta estaba muy lejos de parecerse a la suya.