2/06/2017, 01:34
«Definitivamente está cantando sobre personas que conoce »pensó al escuchar aquella estrofa dedicada a un tal Akame, curiosamente Uchiha también. ¿Qué otra cosa podía ser sino?
A Koko realmente no le terminaba de convencer ninguna de esas canciones así que probablemente se dedicaría a limpiar lo mejor posible y ya. Aunque si vamos al caso toda la mesada y lo que había sobre ella estaba ahora mismo rechinando de limpio. Lo siguiente sería pasar la escoba aunque lo haría por toda la casa al completo incluso si eso suponía que tendría que mover a Datsue con todo y sofá.
Fingiendo que ni se había dado cuenta que la canción había terminado, la rubia tomó su siempre leal escoba y comenzó a repasar el piso de la entrada, avanzando rápidamente por todo aquel sector hasta pasar justo por delante de la puerta del baño.
«Espero que luego no ande cantando nada de mi frente a sus amigos »pensó un tanto horrorizada por la idea. Seguramente compondría una canción relacionada a la absurda cantidad de pecas que le adornaban el rostro, pero a saber, si hacía bien la limpieza tal vez y se ganaba un poco de piedad por parte del Uchiha al que cada tanto miraba de reojo para asegurarse que no hiciera nada extraño.
A Koko realmente no le terminaba de convencer ninguna de esas canciones así que probablemente se dedicaría a limpiar lo mejor posible y ya. Aunque si vamos al caso toda la mesada y lo que había sobre ella estaba ahora mismo rechinando de limpio. Lo siguiente sería pasar la escoba aunque lo haría por toda la casa al completo incluso si eso suponía que tendría que mover a Datsue con todo y sofá.
Fingiendo que ni se había dado cuenta que la canción había terminado, la rubia tomó su siempre leal escoba y comenzó a repasar el piso de la entrada, avanzando rápidamente por todo aquel sector hasta pasar justo por delante de la puerta del baño.
«Espero que luego no ande cantando nada de mi frente a sus amigos »pensó un tanto horrorizada por la idea. Seguramente compondría una canción relacionada a la absurda cantidad de pecas que le adornaban el rostro, pero a saber, si hacía bien la limpieza tal vez y se ganaba un poco de piedad por parte del Uchiha al que cada tanto miraba de reojo para asegurarse que no hiciera nada extraño.