23/06/2017, 10:49
(Última modificación: 29/07/2017, 02:23 por Amedama Daruu.)
—Los laberintos son muy fáciles de resolver si tienes unos ojos que ven a través de las paredes —respondió Daruu, seguro de sí mismo—. Verás. ¡Byakugan!
Sin embargo, el genin estaba a punto de sufrir una desilusión. Y es, ante sus ojos, enseguida se daría cuenta de que las paredes estaban recubiertas de una densa capa de energía brillante que le impedía ver más allá de ellas. Quienquiera que fuera el que diseñara aquella trampa para ratones, desde luego había pensado en todos los detalles.
—¿Y bien? —Inquirió Ayame, ansiosa.
Sin embargo, el genin estaba a punto de sufrir una desilusión. Y es, ante sus ojos, enseguida se daría cuenta de que las paredes estaban recubiertas de una densa capa de energía brillante que le impedía ver más allá de ellas. Quienquiera que fuera el que diseñara aquella trampa para ratones, desde luego había pensado en todos los detalles.
—¿Y bien? —Inquirió Ayame, ansiosa.