1/07/2015, 15:38
Sin duda los pastelillos habían despertado a un Yota que quizás estaba antaño dormido bajo una máscara de falsa madurez. Claro, al fin y al cabo era un niño, como Daruu, que seguía con los brazos cruzados y los mofletes hinchados, con el orgullo más herido que su cabeza llena de chichones.
Yota sugirió que probaran ellos los pasteles primero, pero Kiroe negó con la cabeza.
—No, no, los invitados primero. ¡Vamos, coge uno! —instó Kiroe.
—Sí, mi madre es muy guay. Pero no has probado mis pizzas. Algún día, serán las mejores del mundo, ¿sabes? —dijo Daruu.
Tanto Kiroe como su hijo aguardaron a que Yota cogiese un pastelillo, y kuego hicieron lo propio. Tras dar un bocado, Kiroe carraspeó.
—¿Qué tal la vieja Shiona, Yota-kun? ¿Tan sana como siempre?
Daruu la observó de reojo, entrecerrando los ojos con perspicacia.
Yota sugirió que probaran ellos los pasteles primero, pero Kiroe negó con la cabeza.
—No, no, los invitados primero. ¡Vamos, coge uno! —instó Kiroe.
—Sí, mi madre es muy guay. Pero no has probado mis pizzas. Algún día, serán las mejores del mundo, ¿sabes? —dijo Daruu.
Tanto Kiroe como su hijo aguardaron a que Yota cogiese un pastelillo, y kuego hicieron lo propio. Tras dar un bocado, Kiroe carraspeó.
—¿Qué tal la vieja Shiona, Yota-kun? ¿Tan sana como siempre?
Daruu la observó de reojo, entrecerrando los ojos con perspicacia.
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)