8/07/2017, 23:03
Finalmente había llegado el día de "la orgía popular". No nos engañemos, aquello de bien seguro había estado montado para que unos cuantos se divirtiesen a nuestra costa, mientras gennins como yo nos íbamos partiendo la cara, alguno incluso puede que acabase con lesiones más o menos serias. También había sido creado para que nuestros kages sacasen pecho. Resumiendo, un espectáculo en el que, nosotros, los ninjas éramos los monos de feria. sin embargo, negarse no era una opción. Decepcionaría a Kenzou-sama y me ganaría su más absoluta desaprobación. Tenía que hacerlo sí o sí.
Una vez en las instalaciones donde se disputaría el gran evento del año nos fueron apartando uno a uno, sin poder mediar palabra con nadie, metiéndonos en habitaciones insonorizadas con casi anda en su interior. apenas una solitaria silla para estar "cómodo" y 4 paredes oscuras. Así que tomé asiento, apoyando mi codo derecho sobre mi pierna para que la palma de mi mano soportase el peso de mi cabeza. La otra mano repiqueteaba la silla con los dedos con una melodía monótona y aburrida, pero a mi me entretenía hasta que llegase el momento.
Y finalmente el momento llegó. Las puertas se abrieron, lo cual significaba que debía ir a la zona de combate. Crucé el umbral de la entrada y pude ver la gente del estadio, emocionado ante aquel día de tortas y combates y en el centro ya esperaba mi contrincante así que no demoré más la espera y fui directo a colocarme a mi lugar.
*Amegakure..*
Al menos no era un camarada, así no tendría que andarme con reservas. Resaltaban sus ojos, de un color muy similar a los míos y su cabellera rojiza.
No obstante y antes que nada, debía mostrar respeto a las autoridades así que busqué el palco de los kages hasta que lo encontré, entonces giré mi cuerpo para ponerme de frente y hacer una reverencia en señal de respeto, saludándolos.
— Bueno, no hagamos esperar a esta gente a lo que han venido a ver y que gane el mejor — dije finalmente al volverme a ponerme en frente de mi rival.
*Osea, yo*
Una vez en las instalaciones donde se disputaría el gran evento del año nos fueron apartando uno a uno, sin poder mediar palabra con nadie, metiéndonos en habitaciones insonorizadas con casi anda en su interior. apenas una solitaria silla para estar "cómodo" y 4 paredes oscuras. Así que tomé asiento, apoyando mi codo derecho sobre mi pierna para que la palma de mi mano soportase el peso de mi cabeza. La otra mano repiqueteaba la silla con los dedos con una melodía monótona y aburrida, pero a mi me entretenía hasta que llegase el momento.
Y finalmente el momento llegó. Las puertas se abrieron, lo cual significaba que debía ir a la zona de combate. Crucé el umbral de la entrada y pude ver la gente del estadio, emocionado ante aquel día de tortas y combates y en el centro ya esperaba mi contrincante así que no demoré más la espera y fui directo a colocarme a mi lugar.
*Amegakure..*
Al menos no era un camarada, así no tendría que andarme con reservas. Resaltaban sus ojos, de un color muy similar a los míos y su cabellera rojiza.
No obstante y antes que nada, debía mostrar respeto a las autoridades así que busqué el palco de los kages hasta que lo encontré, entonces giré mi cuerpo para ponerme de frente y hacer una reverencia en señal de respeto, saludándolos.
— Bueno, no hagamos esperar a esta gente a lo que han venido a ver y que gane el mejor — dije finalmente al volverme a ponerme en frente de mi rival.
*Osea, yo*
![[Imagen: K1lxG4r.png]](https://i.imgur.com/K1lxG4r.png)
![[Imagen: dlinHLO.png]](https://i.imgur.com/dlinHLO.png)
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