10/07/2017, 02:01
Girando las pupilas de los ojos hacia el costado donde se llevó la kunoichi a mi hermano, pude presenciar otro acto bueno por parte de esos dos cuales le había ignorado por completo hasta el punto de faltarles al respeto.
Me sentía apenado pero mi rostro no lo mostraba. Luego volví a concentrar mi mirada en el bandido al frente como también el otro había sido sacudido por el Ninja a mi lado.
Los bandidos gruñendo tuvieron que marcharse huyendo. Lo que si nunca se iban a pensar que unos muchachos le patearan el trasero. Y por su puesto que sería su más grande deserción.
Cuando se marcharon finalmente, me giré para darle el frente a los dos que me ayudaron. No podía mirarlos a los ojos fijamente, por lo que declaré con la vista al suelo y cabizbajo.
-Perdónenme, nunca pensé que fueran a ayudarme con esta situación. Imagine que actuarían recíprocamente y me dejarían a mi suerte. Ha sido mi error y lo reconozco.-
Luego levanto la mirada y estiro mi mano derecha hacia Shishio como para llamarlo sin anunciar.
-Para remediar mis anteriores acciones quisiera invitarlos a nuestro pequeño campamento. Podríamos conocernos mejor pasando un rato juntos. Y estaremos hasta la siguiente mañana porque partiremos hacia nuestro hogar-
Mi hermanito había cambiado la expresión de su cara completamente y corrió de las manos de Koko hacia la mía muy contento. Y afirmando mi propuesta. Al parecer Shishio había hecho una conexión con aquellos dos ninjas muy fuerte con tan solo un momento de haberlos conocido. Aquí es donde veo a mi madre y su gran carisma. Por desgracia soy más como mi padre y después de aquellos sucesos le declare la guerra a la felicidad y la confianza cosa que iría recuperando con el tiempo.
Me sentía apenado pero mi rostro no lo mostraba. Luego volví a concentrar mi mirada en el bandido al frente como también el otro había sido sacudido por el Ninja a mi lado.
Los bandidos gruñendo tuvieron que marcharse huyendo. Lo que si nunca se iban a pensar que unos muchachos le patearan el trasero. Y por su puesto que sería su más grande deserción.
Cuando se marcharon finalmente, me giré para darle el frente a los dos que me ayudaron. No podía mirarlos a los ojos fijamente, por lo que declaré con la vista al suelo y cabizbajo.
-Perdónenme, nunca pensé que fueran a ayudarme con esta situación. Imagine que actuarían recíprocamente y me dejarían a mi suerte. Ha sido mi error y lo reconozco.-
Luego levanto la mirada y estiro mi mano derecha hacia Shishio como para llamarlo sin anunciar.
-Para remediar mis anteriores acciones quisiera invitarlos a nuestro pequeño campamento. Podríamos conocernos mejor pasando un rato juntos. Y estaremos hasta la siguiente mañana porque partiremos hacia nuestro hogar-
Mi hermanito había cambiado la expresión de su cara completamente y corrió de las manos de Koko hacia la mía muy contento. Y afirmando mi propuesta. Al parecer Shishio había hecho una conexión con aquellos dos ninjas muy fuerte con tan solo un momento de haberlos conocido. Aquí es donde veo a mi madre y su gran carisma. Por desgracia soy más como mi padre y después de aquellos sucesos le declare la guerra a la felicidad y la confianza cosa que iría recuperando con el tiempo.