30/07/2017, 14:22
—La noche es larga y alberga horrores —remedó Skippy, echándose a reír después—. Parece que no era así.
Sea como fuere, el extraño personaje se despidió de Kappa con un distraído gesto y no sólo acompañó a Kaido y a la muchacha semi inconsciente fuera, sino que se adelantó a ambos como si tuviese prisa por marcharse de allí.
El aire frío de la noche amenia les saludó con su toque refrescante. Había empezado a llover, aunque todavía de forma ligera, y las calles estaban ya empapadas. Skippy se resguardó bajo el portal de la entrada del karaoke y dio una última pitada a su porro antes de tirarlo al suelo y apagarlo con el talón de sus sandalias.
—Sí, tío, sí —contestó—. ¿Qué puede comer aquí cerca? ¿Carioqui, pizza?
Mientras, la chica que colgaba del hombro de Kaido parecía haber recuperado ligeramente la consciencia al respirar aire fresco. Todavía parecía incapaz de ponerse en pie, murmurando por lo bajo y abrazándose al Gyojin; que sentiría sus pequeños pero firmes pechos aplastados contra él.
Sea como fuere, el extraño personaje se despidió de Kappa con un distraído gesto y no sólo acompañó a Kaido y a la muchacha semi inconsciente fuera, sino que se adelantó a ambos como si tuviese prisa por marcharse de allí.
El aire frío de la noche amenia les saludó con su toque refrescante. Había empezado a llover, aunque todavía de forma ligera, y las calles estaban ya empapadas. Skippy se resguardó bajo el portal de la entrada del karaoke y dio una última pitada a su porro antes de tirarlo al suelo y apagarlo con el talón de sus sandalias.
—Sí, tío, sí —contestó—. ¿Qué puede comer aquí cerca? ¿Carioqui, pizza?
Mientras, la chica que colgaba del hombro de Kaido parecía haber recuperado ligeramente la consciencia al respirar aire fresco. Todavía parecía incapaz de ponerse en pie, murmurando por lo bajo y abrazándose al Gyojin; que sentiría sus pequeños pero firmes pechos aplastados contra él.