1/08/2017, 12:31
Cuando el Senju agarró al amenio para ayudarle a ponerse en pie y caminar pudo notar lo que sudaba y, siendo sincero, debería haberse dado cuenta antes de que se estaba agobiando entre tanta gente y deberían haber salido del grupo mucho antes, pero la obra teatral había atraído casi toda su atención.
La gente, por lo menos, no estaba molestando a los dos genin mientras andaban para dirigirse a algún lugar en el que Keisuke pudiera sentarse y tomar un poco el fresco, aunque Riko fue capaz de escuchar algún que otro murmullo cuando pasaban, pero los obvió, a fin de cuentas, lo más importante era que el amenio recuperase fuerzas.
—Oye, ¿no querrás comer o beber al...? — Pero rápidamente su acompañante se inclinó hacia delante, emitiendo un sonido característico que, sin duda alguna no eran buenas noticias.
Por favor, que no me salpique, que no me vomite en los pies, solo pido eso.
El uzunés cerró los ojos y tomó una bocanada profunda aire, viéndose venir lo que iba a suceder pero, tras unos instantes, se dio cuenta de que su compañero no había vomitado, había sido una falsa alarma, que esperaba no se repitiese más.
— Venga, vamos a sentarnos y te compro algo de comida y de bebida, ¿vale? — Instó el peliblanco, señalando un banco que se encontraba a la sombra un poco más adelante.
La gente, por lo menos, no estaba molestando a los dos genin mientras andaban para dirigirse a algún lugar en el que Keisuke pudiera sentarse y tomar un poco el fresco, aunque Riko fue capaz de escuchar algún que otro murmullo cuando pasaban, pero los obvió, a fin de cuentas, lo más importante era que el amenio recuperase fuerzas.
—Oye, ¿no querrás comer o beber al...? — Pero rápidamente su acompañante se inclinó hacia delante, emitiendo un sonido característico que, sin duda alguna no eran buenas noticias.
Por favor, que no me salpique, que no me vomite en los pies, solo pido eso.
El uzunés cerró los ojos y tomó una bocanada profunda aire, viéndose venir lo que iba a suceder pero, tras unos instantes, se dio cuenta de que su compañero no había vomitado, había sido una falsa alarma, que esperaba no se repitiese más.
— Venga, vamos a sentarnos y te compro algo de comida y de bebida, ¿vale? — Instó el peliblanco, señalando un banco que se encontraba a la sombra un poco más adelante.
~ Narro ~ Hablo ~ «Pienso»