1/08/2017, 23:43
—Lo cierto es que nadie conocía la existencia de ese laberinto, Daruu-kun —explicó su maestro—. Después del incidente y de dejaros en el hospital, lo primero que hice fue ir a avisar a Arashikage-sama sobre lo sucedido. Se buscó entre los archivos el nombre del propietario original, que resultó ser Kanemochi Meiro, ya fallecido tanto tiempo atrás que no se recordaba su existencia. No existen registros sobre ese laberinto, así que, por lo que me has contado, es muy probable que llevara a cabo ese sádico juego suyo en clandestinidad —Kori entrecerró los ojos durante un momento
y sacudió la cabeza casi instantáneamente después—. Si te acuerdas del cliente de nuestra misión, se llama Kanemochi Dōkan. Debe de ser uno de sus descendientes, o algo así. Si conoce o no la existencia de ese laberinto ya no lo sabemos, pero Arashikage-sama se encargará de desmantelar cualquier tipo de trampa antes de poner ese edificio en sus manos y, desde luego, le tendrá bien vigilado durante un buen tiempo. De eso no me cabe la menor duda.
Daruu agachó la cabeza y su rostro se ensombreció unos instantes.
—A eso quería llegar, Kori-sensei —dijo—. Me preocupaba que Doukan conociera las instalaciones, no solo por eso sino porque significaría que nos mandó a morir allá abajo. Pensándolo de esa manera, dudo que las conociera, no se habría arriesgado así con Arashikage-sama...
»¿No?
Sacudió la cabeza.
—Da igual. Hay otra cosa que quiero preguntarte, Kori-sensei —dijo, muy serio, y se detuvo un momento—. Sobre Ayame...
»¿Qué es lo que tiene sellado en la espalda, Kori-sensei?
y sacudió la cabeza casi instantáneamente después—. Si te acuerdas del cliente de nuestra misión, se llama Kanemochi Dōkan. Debe de ser uno de sus descendientes, o algo así. Si conoce o no la existencia de ese laberinto ya no lo sabemos, pero Arashikage-sama se encargará de desmantelar cualquier tipo de trampa antes de poner ese edificio en sus manos y, desde luego, le tendrá bien vigilado durante un buen tiempo. De eso no me cabe la menor duda.
Daruu agachó la cabeza y su rostro se ensombreció unos instantes.
—A eso quería llegar, Kori-sensei —dijo—. Me preocupaba que Doukan conociera las instalaciones, no solo por eso sino porque significaría que nos mandó a morir allá abajo. Pensándolo de esa manera, dudo que las conociera, no se habría arriesgado así con Arashikage-sama...
»¿No?
Sacudió la cabeza.
—Da igual. Hay otra cosa que quiero preguntarte, Kori-sensei —dijo, muy serio, y se detuvo un momento—. Sobre Ayame...
»¿Qué es lo que tiene sellado en la espalda, Kori-sensei?
![[Imagen: K02XwLh.png]](https://i.imgur.com/K02XwLh.png)