16/08/2017, 04:31
—Yakisoba-sama… Me gustaría pedirle un favor.
Datsue supo en aquel mismo instante que algo iba mal. Se lo decía su instinto y su lógica al mismo tiempo. Cuando uno va a pedir un favor a alguien, y solo obtiene silencio como respuesta, es sin duda una mala señal. Cuando una vez pedido, como segundos después hizo el Uchiha, el silencio se prolonga, deja de ser una mala señal para convertirse, sencillamente, en un drama.
Yakisoba nada había dicho ni respondido al Uchiha. Ni siquiera su expresión había cambiado lo más mínimo. Es más, parecía actuar como si ni siquiera le hubiese escuchado, desenvolviendo lentamente unos pergaminos para, con toda la parsimonia del mundo, liberar unas galletas junto con una taza de chocolate.
Datsue se quedó mudo del asombro. ¿Acaso estaba conociendo el lado oscuro del jounnin? ¿Acaso detrás de aquella fachada de buenazo se escondía un hombre que disfrutaba con la desgracia ajena? Ya se lo imaginaba en el despacho de Gouna, él y la Uzukage riendo a carcajada suelta mientras le comentaba todos los pormenores de la misión. Luego se lo imaginó de misión con otros gennins, ofreciéndoles una buena comida junto a una hoguera recién hecha. ¿Y con qué llenaría el silencio? Con anécdotas, claro, ¿y qué mejor anécdota que el incidente acontecido por Datsue el Intrépido? «Jodidamente ninguna» Y así, en menos de lo que un Kusareño grita: ¡me rindo!, todo Oonindo sabría lo que había pasado en el bosque…
—Decidme, chicos —intervino de pronto Yakisoba, iluminando la cara de Datsue, que por un momento creyó que al fin iba a responder a su petición. Pero en su lugar… —. ¿Qué opináis de Gouna-chan?
La pregunta le cayó como un jarro de agua fría. No solo no respondía a su pregunta, sino que le preguntaba por la Uzukage, esa que tantas veces había criticado junto con Akame. Por suerte, su compañero fue el primero en hablar, dándole tiempo a pensar una respuesta más o menos convincente. A preparar su mentira…
… ¿y cuál era la mejor mentira? Datsue creía saberlo muy bien. «La mejor mentira es una verdad… o al menos, una verdad a medias»
—Pues yo pienso que Gouna-sama es una kunoichi con carácter —si asesinar a un jounnin delante de toda la aldea no era tener carácter, entonces el Uchiha no sabía qué lo era—, con las ideas claras —muy claras debía tener sus ideas para no haber dado siquiera oportunidad a Zoku de defenderse verbalmente de sus acusaciones—, y a la que definitivamente no me gustaría decepcionar —terminó por añadir, esbozando una leve sonrisa.
Datsue supo en aquel mismo instante que algo iba mal. Se lo decía su instinto y su lógica al mismo tiempo. Cuando uno va a pedir un favor a alguien, y solo obtiene silencio como respuesta, es sin duda una mala señal. Cuando una vez pedido, como segundos después hizo el Uchiha, el silencio se prolonga, deja de ser una mala señal para convertirse, sencillamente, en un drama.
Yakisoba nada había dicho ni respondido al Uchiha. Ni siquiera su expresión había cambiado lo más mínimo. Es más, parecía actuar como si ni siquiera le hubiese escuchado, desenvolviendo lentamente unos pergaminos para, con toda la parsimonia del mundo, liberar unas galletas junto con una taza de chocolate.
Datsue se quedó mudo del asombro. ¿Acaso estaba conociendo el lado oscuro del jounnin? ¿Acaso detrás de aquella fachada de buenazo se escondía un hombre que disfrutaba con la desgracia ajena? Ya se lo imaginaba en el despacho de Gouna, él y la Uzukage riendo a carcajada suelta mientras le comentaba todos los pormenores de la misión. Luego se lo imaginó de misión con otros gennins, ofreciéndoles una buena comida junto a una hoguera recién hecha. ¿Y con qué llenaría el silencio? Con anécdotas, claro, ¿y qué mejor anécdota que el incidente acontecido por Datsue el Intrépido? «Jodidamente ninguna» Y así, en menos de lo que un Kusareño grita: ¡me rindo!, todo Oonindo sabría lo que había pasado en el bosque…
—Decidme, chicos —intervino de pronto Yakisoba, iluminando la cara de Datsue, que por un momento creyó que al fin iba a responder a su petición. Pero en su lugar… —. ¿Qué opináis de Gouna-chan?
La pregunta le cayó como un jarro de agua fría. No solo no respondía a su pregunta, sino que le preguntaba por la Uzukage, esa que tantas veces había criticado junto con Akame. Por suerte, su compañero fue el primero en hablar, dándole tiempo a pensar una respuesta más o menos convincente. A preparar su mentira…
… ¿y cuál era la mejor mentira? Datsue creía saberlo muy bien. «La mejor mentira es una verdad… o al menos, una verdad a medias»
—Pues yo pienso que Gouna-sama es una kunoichi con carácter —si asesinar a un jounnin delante de toda la aldea no era tener carácter, entonces el Uchiha no sabía qué lo era—, con las ideas claras —muy claras debía tener sus ideas para no haber dado siquiera oportunidad a Zoku de defenderse verbalmente de sus acusaciones—, y a la que definitivamente no me gustaría decepcionar —terminó por añadir, esbozando una leve sonrisa.
¡Agradecimientos a Daruu por el dibujo de PJ y avatar tan OP! ¡Y a Reiji y Ayame por la firmaza! Si queréis una parecida, este es el lugar adecuado