19/08/2017, 00:53
Ni siquiera sabría decir de quién podría ser aquella prenda, pero tampoco se le ocurrió a la rubia que la de menor estatura podría estarle mintiendo o algo parecido respecto a esa chaqueta, pero tampoco era algo grave, no era como si estuviesen escondiendo un cadáver o... ¿tal vez sí? Bueno, no era asunto suyo, era de Eri y ya se tendría que arreglar sola.
De cualquier modo, una de las preguntas que le soltó a la peli-morada en un intento por romper el hielo dio justo en un tema que no parecía serle de agrado. «Probablemente haya perdido también, aunque dudo que haya sido tan mala como yo »razonó al no ver que la joven que tenía delante estuviese golpeada ni nada, en cambio ella, la Kageyama, tenía la piel de un tno rojizo que dejaba en evidencia que preservaba las quemaduras de aquellas técnicas que le había tirado Akame durante la pelea.
—Permiso —comentó más bien por cortesía cuando pasó al interior de la habitación—. Tengo unos bollos dulces rellenos con crema —agregó sonriendo y alzando la bolsa que tenía en mano.
Entre las galletas y los bollos dulces Koko seguramente se decantaría por los bollos, aunque no iba a despreciar comida, jamás lo haría así fuera algo que le desagrada y menos si se trata de algún dulce o comida chatarra, de esa que los shinobis deberían evitar a toda costa para evitar problemas de salud y eso.
—Respecto de la pelea, si te sirve de consuelo, me dieron una paliza y no pude hacer nada al respecto —le dijo a Eri esbozando una media sonrisa nerviosa—. Y casi me quedo en evidencia frente al público también.
Con tanto fuego parte de su ropa se había hecho cenizas y justamente, un sector de la espalda de la chica había sido afectado así que con un mínimo movimiento se podría haber mostrado un tanto más de lo necesario.
De cualquier modo, una de las preguntas que le soltó a la peli-morada en un intento por romper el hielo dio justo en un tema que no parecía serle de agrado. «Probablemente haya perdido también, aunque dudo que haya sido tan mala como yo »razonó al no ver que la joven que tenía delante estuviese golpeada ni nada, en cambio ella, la Kageyama, tenía la piel de un tno rojizo que dejaba en evidencia que preservaba las quemaduras de aquellas técnicas que le había tirado Akame durante la pelea.
—Permiso —comentó más bien por cortesía cuando pasó al interior de la habitación—. Tengo unos bollos dulces rellenos con crema —agregó sonriendo y alzando la bolsa que tenía en mano.
Entre las galletas y los bollos dulces Koko seguramente se decantaría por los bollos, aunque no iba a despreciar comida, jamás lo haría así fuera algo que le desagrada y menos si se trata de algún dulce o comida chatarra, de esa que los shinobis deberían evitar a toda costa para evitar problemas de salud y eso.
—Respecto de la pelea, si te sirve de consuelo, me dieron una paliza y no pude hacer nada al respecto —le dijo a Eri esbozando una media sonrisa nerviosa—. Y casi me quedo en evidencia frente al público también.
Con tanto fuego parte de su ropa se había hecho cenizas y justamente, un sector de la espalda de la chica había sido afectado así que con un mínimo movimiento se podría haber mostrado un tanto más de lo necesario.